México D.F. Martes 9 de noviembre de 2004
El mandatario electo inicia consultas para conformar
su gabinete; prepara giras
Uruguay: la Corte Electoral confirma el triunfo del
izquierdista Tabaré Vázquez
Medios locales critican al canciller saliente por nombrar
a 14 nuevos embajadores
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 8 de noviembre. Después de
una semana de cuidadoso conteo, la Corte Electoral de Uruguay proclamó
hoy a Tabaré Vázquez y a Rodolfo Nin Novoa, respectivamente,
presidente y vicepresidente del país, convalidando el triunfo de
la coalición de izquierda Encuentro Progresista-Frente Amplio-Nueva
Mayoría (EP-FA-NM), que ganó las elecciones el pasado 31
de octubre. El entusiasmo estalló en la sala donde se realizó
la sencilla ceremonia, entre los militantes que pacientemente trabajaron
durante 30 años para obtener esta victoria, la cual llevará
por primera vez a la izquierda al gobierno nacional.
Vázquez
superó por casi 10 mil la cifra de votos que necesitaba para ganar
la presidencia en la primera vuelta -requería 50 por ciento más
uno de total-, al sumar un millón 124 mil 761 sufragios en todo
el país. El Partido Nacional (Blanco), de Jorge Larrañaga,
alcanzó 34.3 por ciento del total y el Colorado, que prácticamente
gobernó desde 1830, alcanzó apenas 10.36 por ciento, en una
derrota sin antecedentes. Asimismo el Partido Independiente obtuvo 1.5
por ciento.
El EP-FA-NM logró mayoría propia en el Senado
al obtener 17 de las 31 bancas, el Partido Nacional 11 y el Colorado tres,
y en la Cámara de Diputados tendrá 52 de los 99 asientos,
aunque llegaba a 53 en el escrutinio primario. Asimismo ganó en
siete departamentos (estados) de los 19 del país, que son los más
importantes, entre ellos Montevideo, donde viven un millón 200 mil
uruguayos de los tres millones 200 mil que habitan en todo el país.
También obtuvo el triunfo en Canelones, el segundo departamento
más poblado, así como en Salto, Rocha, Maldonado, Florida
y Soriano.
Vázquez, quien asumirá el primero de marzo
de 2005, no necesitará de los votos opositores para aprobar leyes,
pero sí deberá negociar en temas en que la Constitución
demanda resoluciones aprobadas por dos tercios o tres quintos, como en
el nombramiento de directores de los entes autónomos y otras empresas
públicas.
El presidente electo de inmediato inició una serie
de reuniones con su equipo para preparar la transición, después
de anunciar que "los privilegiados -en las primeras resoluciones que tomará-
serán los que están fuera del sistema".
Igualmente se iniciaron contactos tanto con el presidente
saliente, Jorge Batlle, del Partido Colorado, como con el Blanco y el Independiente;
se espera que de estas reuniones salgan algunos nombramientos, para dar
una señal de amplitud ya anunciada.
Los únicos dos designados de su gabinete son el
secretario de la presidencia, Gonzalo Fernández, y el senador Danilo
Astori, como ministro de Economía. Otros nombre que suenan en algunos
medios son el de Azucena Berrutti, quien podría ser ministra de
Defensa, y José Díaz, ex legislador socialista, para ministro
del Interior. Sin embargo, Vázquez prefiere continuar con las consultas
necesarias dentro de la coalición "sin apuros" para conformar finalmente
su gabinete.
El mandatario electo realizará una gira para agradecer
a sus votantes en el interior del país y luego viajará a
Argentina y Brasil, cuyos gobiernos apoyaron decididamente al Frente Amplio
en su lucha por llegar al gobierno.
Se espera un informe económico, de la administración
saliente, mientras algunos medios locales critican la decisión del
actual canciller, Didier Opertti, de nombrar a 14 nuevos embajadores, entre
ellos Enrique Juan Delgado, el tercero en rango en ese ministerio, para
la embajada de Uruguay en México. El actual subsecretario William
Ehler fue designado embajador en India. El mismo Opertti ocuparía
la secretaría general de la Asociación Latinoamericana de
Integración.
Conjuntamente con las elecciones generales fue votada
una reforma constitucional promovida por el sindicato de funcionarios de
las Obras Sanitarias del Estado y aprobada por 64.5 por ciento de los votos,
que pone en manos estatales el control del agua del país, su explotación
y la construcción de los servicios de saneamiento.
El pueblo uruguayo produjo un giro de 180 grados en la
política nacional, cambiando el régimen bipartidista vigente
desde hace más de 170 años de historia institucional y eligió
a esta coalición de izquierda, cuyo núcleo básico
el Frente Amplio nació en los años 70 y desde entonces creció
y acumuló fuerzas con paciencia y dentro de las características
de este país, que acaba de dar otro ejemplo de democracia en el
sur de América.
|