México D.F. Miércoles 3 de noviembre de 2004
Presentará Santa Sabina Conversación
con los difuntos en el Claustro de Sor Juana
El arte, cada vez más lejos del ritual y más
cerca del entretenimiento: Poncho
La harán un poco de actores el jueves y viernes,
a partir de un guión de Adriana Díaz Enciso
Rita personificará a un escritor Habrá
citas de Quevedo, Gorostiza y la Décima Musa
JUAN JOSE OLIVARES
"Qué importa la muerte si la vida no es vida, qué
importa la vida si la muerte es la vida", cantó una vez Rita Guerrero
de Santa Sabina en 2001, cuando la banda, con 15 años de trayectoria,
fue bautizada por la hija de la sabia de los hongos María Sabina,
en Huautla, Oacaxa. Y es que ese misticismo y apología a paisajes
interiores del ser humano siempre han acompañado a este grupo de
rock, que cada año dedica algunos conciertos al culto a la muerte,
como los que realizarán los próximos 4 y 5 de noviembre en
la Universidad del Claustro de Sor Juana a las 20:30 horas.
Conversación con los difuntos se llaman
estos conciertos cuyo hilo conductor está vinculado con varias canciones
de su repertorio, como "diálogo sosegado con la muerte", y a partir
de un guión de la escritora Adriana Díaz Enciso. Los sabinos
(Rita, Alfonso, Alejandro, Julio y Leonel) llamarán, interrogarán
y celebrarán a los muertos: a los suyos, a los desconocidos, a todos
los muertos que son, que serán. Invocan la presencia de varios aliados
que ya cruzaron el umbral, conversan con voces como las de Villaurrutia,
Sor Juana y Quevedo e invitarán a avivar la llama como dicta la
tradición: con flores, música y canto".
Santa
Sabina (que ha editado Espiral, Mar adentro, MTV unplugged,
Babel, Concierto acústico, Símbolos
y Santa Sabina) hace de cada concierto un ritual. Su característica
es la profundidad de las rolas.
"El misticismo desaparece. En sí mismo, el arte
está cada vez más al lado del entretenimiento y menos del
ritual. Creo que desaprovechamos un legado, un pasado que nos acerca a
las fuerza por medio de los rituales. Ahora el pragmatismo y el hedonismo
no permiten que se hagan celebraciones en conjunto, de grupo, desaprovechamos
eso que tenemos en nuestra cultura. El arte está confundido entre
el entretenimiento o conjuntar las fuerzas del humano con la naturaleza
para comunicarse con las deidades. En las rolas de Santa nos gusta hablar
de dualidades paralelas a la objetiva realidad, como el amor; de los fantasmas
del amor y de la libertad. María Sabina está más cerca
de la luz", comenta el bajista Poncho.
-Es una fortuna que los mexicanos tengamos esa cultura
de la apología a los muertos, al misterio.
-Es una cualidad que nos hace ser vivenciales, porque
es un recuerdo permanente de que las cosas son efímeras, que la
vida es sólo un pequeño momento en el que se puede librar
a la muerte. A estos personajes que mencionaremos, la muerte les ha sonreído
porque al morir han renacido en nuestra memoria y corazones.
"A lo largo de estos 15 años de vida de Santa Sabina
ha entrado cada vez más en ese lenguaje, convencido de que la cosmovisión
mexicana continúa siendo una posibilidad de vida. Los mexicanos
tenemos la responsabilidad de estar en contacto con esos viejos que están
tan cerca de no estar y rescatar la cosmogonía, que tiene que ver
con volverse más simple y natural, menos consumista."
Santa Sabina llega a un lugar de karma, donde se encuentra
la energía de Sor Juana. "Nos dieron la oportunidad de estar en
el Claustro. Tocar allí es demasiada evocación e invocación
a los muertos. En Conversación con los difuntos platicaremos
con nuestros muertos personales, pero también con los que han dado
luz en el camino. Rita personificará a un escritor, es una representación
de esos seres que nos dieron luz."
Para el jueves y viernes "seleccionamos las canciones
con una relación más directa con el tema de la muerte, la
ausencia, las mandamos a Adriana Díaz Enciso, quien hizo un guión
para que la hagamos un poco de actores", explica.
-¿En qué momento está la banda?
-Creo que seguimos tocando en cualquier lugar. En Chimalhuacán
(donde tocaron hace unos días) me recordó las tocadas del
principio porque hay puro rock urbano fue como picar piedra, no nos fue
tan bien, no les hicimos raro. Tuvimos que seguir probando luego de 15
años, todavía hay chance de cambiarle el gusto a unas personas
o que nos incluyan en sus gustos.
Santa Sabina en el Claustro de Sor Juana (ubicado en Izazaga
92, Centro Histórico, a un costado de la estación del Metro
Isabel la Católica).
|