Museo de la Pintura Mural Teotihuacana

Los tiempos de la muerte en México, las formas de tributo desde los mexicas

DE LA REDACCION

Los ritos tradicionales de las culturas precolombinas y las manifestaciones más contemporáneas, tienen lugar en la muestra Los tiempos de la muerte en México, que se exhibe en el Museo de la Pintura Mural Teotihuacana. Recorrido por nuestro pasado y presente, mediante ofrendas, tzompantlis y audiovisuales, entre otros elementos relacionados con la transformación y evolución de las imágenes de las muerte en la historia nacional.

La exposición, que permanecerá abierta hasta la segunda semana de diciembre, realiza, de manera iconográfica, un análisis de esa figura "venida del más allá" en los periodos prehispánico y virreinal, durante el siglo XIX, y en la actualidad; también símbolo de veneración e inclusive de sátira política y social.

Con la coordinación general de Esmeralda Reynoso, subdirectora del Museo de la Pintura Mural Teotihuacana, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la muestra abarca cuatro salas. Empieza con una explicación visual del culto a los difuntos en las civilizaciones mesoamericanas y en la cual puede observarse la instalación de un "bulto mortuorio".

Esta ceremonia se efectuaba antes de la llegada de los conquistadores españoles en homenaje a la persona fallecida, no sólo en el momento de su deceso, sino en los siguientes cuatro años. Acompaña a este "bulto mortuorio" su respectiva ofrenda en alusión a los cuatro elementos: agua, tierra, fuego y aire, como preparación para el viaje al Mictlán, lugar donde reposaban las almas para los mexicas.

La sala siguiente calude a la muerte en la Colonia, "periodo en el que se usaba el túmulo (armazón de madera vestido de paños fúnebres, que se erigía para la celebración de las honras del difunto) como parte de la tradición española; pero a la vez, permanece la puesta de la ofrenda, a la que se incorporan también el pan y las velas, connotaciones del sacrificio cristiano".

Para Reynoso Camacho, el siglo XIX será definitivo en lo que respecta a la visión que los mexicanos tienen hoy en día sobre la muerte, debido a que fue durante esta centuria cuando se da su utilización "masiva" como metáfora de la condición humana, recurso inigualable para la sátira política y motivo de dolor que no dejará de ser por ello, retratado en la incipiente disciplina fotográfica y en la labor litográfica.

"A mediados de ese siglo, tras la desamortización de los bienes eclesiásticos por Juárez, los cementerios se convirtieron otra vez en un espacio para el pueblo. Durante la época prehispánica, la muerte era vista como parte de un ciclo vital, de renovación, mientras en el Virreinato, bajo el rito católico, se le ve como un acto, mediante el cual, se dará la expiación de los pecados.

"De esa manera, cuando el Estado mexicano toma el control de los panteones, sumado a la difusión de la imagen de la muerte en los nacientes medios masivos como el periódico, ésta deviene noticia. Será José Guadalupe Posada, quien por medio de sus grabados asuma una posición contestataria contra el régimen Porfirista y los vicios de la sociedad como medio de sometimiento", expresó.

Los tiempos de la muerte en México, tiene tiene el propósito fundamental lograr que los visitantes se reconozcan en los ritos que hasta en la actualidad se suceden como parte de una identidad que nos brinda presencia en todo el mundo y, en particular, el Día de Muertos, Patrimonio Intangible de la Humanidad reconocido por la UNESCO.

"Actualmente, ante el mundo, es una singularidad del pueblo mexicano cómo manejamos la muerte, cómo nos reímos, cómo nos burlamos, y cómo nos la comemos", concluyó.

El Museo de la Pintura Mural Teotihuacana se encuentra en Circuito de la Zona Arqueológica de Teotihuacán, frente a puerta 3, Carretera México-Pirámides, kilometro 46, Teotihuacán, México 55850. Teléfono 01 (594) 958-2081.