México D.F. Domingo 31 de octubre de 2004
El ejército estadunidense desoyó advertencia sobre arsenal
Bagdad, 30 de octubre. Un grupo de derechos humanos reveló este sábado haber dado aviso a fuerzas estadunidenses de que en un colegio militar iraquí se almacenaban armas desprotegidas, sin que se hiciera nada al respecto.
Peter Bouckaert, dirigente de la agrupación Human Rights Watch, con sede en Nueva York, informó haber reportado el 9 de mayo de 2003 a oficiales estadunidenses que encontró salones "retacados hasta el techo" con misiles superficie-a-superficie en Baquba, al noreste de Bagdad. Pero pasados 10 días no se habían resguardado los misiles, y a diario el lugar era objeto de saqueos.
La revelación se produce después de que se descubrió que más de 380 toneladas de explosivos desaparecieron de otro complejo en Al Qa'qa.
El tema se ha vuelto fuente de un amargo debate, lleno de acusaciones, entre el presidente George W. Bush y John Kerry en los días finales de la campaña electoral estadunidense.
Bouckaert dijo que informó a oficiales estadunidenses la localización exacta de las cabezas explosivas, y les entregó fotografías del sitio, al cual fue llevado por pobladores iraquíes desplazados con quienes trabajaba su organización. Pero la noticia al parecer no interesó a los militares. "Preguntaron sobre todo por armas químicas y biológicas, que no habíamos visto. En los 10 días siguientes continué trabajando cerca de esa lugar y nada se había hecho por resguardarlo. Muchos hombres armados con rifles Kalashnikov y cohetes lanzagranadas saquearon a placer."
Bouckaert calcula que cada cabeza explosiva contenía 26 kilos de explosivos de alto poder. "En ese colegio militar había material suficiente para abastecer a un grupo guerrillero durante largo tiempo, produciendo bombas como las que se usan todos los días en ataques suicidas." KIM SENGUPTA, THE INDEPENDENT © The Independent Traducción: Jorge Anaya |