México D.F. Miércoles 27 de octubre de 2004
Firma el gobierno de Batlle acuerdos apresurados
con la administración de EU
Multitudinario acto de Tabaré Vázquez
en estado clave para los comicios de Uruguay
Cierran campaña los partidos Nacional y Colorado;
la alianza de izquierda mantiene la ventaja
STELLA CALLONI ENVIADA
Montevideo, 26 de octubre. Horas decisivas se viven
aquí después que el Frente Amplio-Encuentro Progresista-Nueva
Mayoría (FA-EP-NM), la alianza de izquierda y centroizquierda que
aparece como posible triunfadora en las elecciones presidenciales del próximo
31 de octubre, realizó el mayor acto de cierre en la historia política
del departamento de Canelones, lo que se analiza como una definición
del interior del país.
Como una contracara de estos festejos, en la madrugada
de ayer varios locales del FA-EP-NM fueron atacados por un grupo de jóvenes
que causaron algunos daños en tres comités, ante lo cual
el ministro del Interior, Daniel Borrelli, dispuso vigilancia especial
en los domicilios de los candidatos presidenciales, y la mayoría
se expresó contra "todo tipo de intolerancia".
Anoche
en el vecino departamento de Canelones una caravana de más de ocho
kilómetros acompañó a los candidatos a la presidencia
y vicepresidencia de la coalición, Tabaré Vázquez,
y Rodolfo Nin Novoa, antes del acto final. Si como se dice aquí,
quien triunfa en Canelones triunfa en el país y el acto se materializa
en votos, Vázquez ganaría en primera vuelta. Ambos se comprometieron
ante sus seguidores a vencer en los comicios el próximo 31 de octubre.
"Ya nadie puede dudar en Uruguay y fuera de las fronteras
que ganamos en primera vuelta... ustedes dejarán marcada una huella
que quedará para futuras generaciones... hoy somos la primera fuerza
política en el país y ya no hay encuesta que resista a creer
que somos más de 50 por ciento", afirmó Vázquez, aunque
llamó a la militancia a golpear las puertas hasta los últimos
momentos en que se pueda trabajar.
Otra señal importante es que tanto voceros del
gobierno del presidente saliente, Jorge Batlle, como los dirigentes de
izquierda, han confirmado que existen contactos -informales- ante la posibilidad
de un triunfo frenteamplista para abrir paso a la transición necesaria.
La esperanza del triunfo está en todas partes.
Ventanas de edificios engalanadas en la ciudad y especialmente en las casas
de los barrios humildes, muestran banderas frenteamplistas y un colorido
muy especial en los preparativos del acto de cierre de campaña en
la zona céntrica tradicional de Montevideo que se realizará
mañana.
A su vez, Jorge Larrañaga, abanderado del Partido
Nacional, cerró esta noche aquí su campaña ante unas
10 mil personas con un acto diseñado para atraer la atención
de los indecisos y lograr ir a un segunda vuelta con el favorito Tabaré
Vázquez.
Larragaña, a quien las encuestas anticipan entre
27 y 34 por ciento, manifestó este día su confianza de que
el postulante frenteamplista no supere el 50 por ciento de los votos; los
sondeos otorgan a Vázquez una ventaja de 47 a 55 por ciento.
En su discurso de cierre Larrañaga criticó
al aspirante frenteamplista por sus simpatías con los gobernantes
de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Argentina, Néstor Kirchner.
El cierre de campaña del Partido Colorado (gobernante),
reflejó la debacle política y fue casi un mitin cerrado.
Se calcula que difícilmente podrá superar 10 por ciento de
los votos nacionales que le adjudican las encuestas.
Batlle se alejó de las acciones de guerra sucia
de varios hombres de su partido, como el ex presidente Julio María
Sanguinetti.
Sin embargo, existe preocupación por todo aquello
que esté firmando o acordando a último momento el gobierno
actual. Ayer mismo Batlle firmó un acuerdo con el representante
adjunto del gobierno de Estados Unidos, Peter Allgeir, de "promoción
y protección recíproca de inversiones", después que
la semana pasada se acordó también una política de
"cielos abiertos", algo rechazado en varios países del sur.
Inevitablemente esto hizo recordar los acuerdos apresurados
firmados por la ex presidenta de Panamá, Mireya Moscoso, para dejar,
si fuera posible, las manos atadas a su sucesor en aspectos estratégicos
de política exterior.
"Es un título algo pomposo (el que lleva el acuerdo)
ya que encierra a la vez un matiz ridículo: ¿qué significaría
'reciprocidad' en este ámbito?", alerta el analista Carlos Abin
de la revista Brecha, y recuerda que el tratado se negoció
a "marchas forzadas" durante los últimos siete meses y, como de
costumbre, en el más absoluto secreto.
Esta es sólo una muestra de que los caminos no
serán muy claros y que quien triunfe el próximo 31 de octubre
podría encontrarse con varias sorpresas.
Otro tema que tendrá trascendencia es el de derechos
humanos, ya que Batlle no dejó avanzar a la justicia para terminar
con la impunidad reinante después de la pasada dictadura y a pesar
de que han sido señalados, con pruebas, los principales responsables
de los crímenes de lesa humanidad cometidos entonces.
Por estas horas la pelea por el triunfo esconde todas
las piedras en las manos, pero hay equipos trabajando activamente para
que en todo caso haya una transición pacífica, a pesar de
los recelos, por lo que se hallará al abrir lo que muchos mencionan
como "una caja de Pandora", como herencia no sólo de este periodo
sino de gobiernos anteriores. Por alguna razón el oficialismo y
el Partido Blanco, sortearon hasta ahora mencionar el tema de corrupción
a fondo.
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