La situación de los bosques en América del Norte no es "severa", afirma el organismo

México rechaza las cifras de la FAO sobre hectáreas deforestadas

La tala clandestina, grave problema en la región; acción conjunta con EU y Canadá

ANGELICA ENCISO ENVIADA

Boca del Rio, Ver., 25 de octubre. Aunque la situación de los bosques en América del Norte no es "severa", la tala clandestina es un problema grave en la región: México no puede dar aún una cifra de deforestación, ya que desconfía del dato de 630 mil hectáreas afectadas que señala la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés); además, los incendios forestales provocaron que tan sólo en Estados Unidos se perdieran en dos años 6.3 millones de hectáreas.

"La cifra que maneja la FAO (de hectáreas deforestadas) es resultado de un análisis equivocado, y por ello se trabaja con este organismo para evaluar la situación real de la cubierta forestal del país", de la cual se ha perdido 50 por ciento en medio siglo, sostuvo el director de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Manuel Reed Segovia.

En la inauguración de la 22 reunión de la Comisión Forestal de América del Norte (Cofan), donde participan México, Estados Unidos y Canadá, el funcionario precisó que el inventario forestal, que se realiza con apoyo de los países de la región, estará listo este año y servirá de parámetro para evaluar los avances o retrocesos del país en la materia.

El representante de Estados Unidos, Dale Boswort, jefe del Servicio Forestal, dijo en su intervención que los desafíos en cuanto a recursos naturales en la región sólo se podrán resolver si hay buenas relaciones entre las tres naciones y que es necesario actuar de inmediato.

Estados Unidos enfrentó en los años recientes una serie de incendios forestales devastadores, que tan sólo en 2000 ocasionaron la pérdida de alrededor de 2.9 millones de hectáreas, mientras que en 2002 desaparecieron 3.4 millones de hectáreas por esa causa. En esa nación los siniestros se deben a la excesiva vegetación, que ocasiona la acumulación de cargas de combustible, indicó Boswort en su informe.

Ante representantes del sector forestal de las tres naciones, Hosny El-Lakanyel, comisionado forestal de la FAO, explicó que en esta sesión de la Cofan se espera obtener propuestas para el trabajo de los próximos dos años y consideró que la región está desarrollada y tiene buena cubierta vegetal, además de que va en crecimiento en comparación con otras naciones.

Reconoció que existen áreas preocupantes, porque hay exceso de tala clandestina, y aseguró que se tomarán medidas al respecto. Asimismo aseveró que a México se le ha apoyado en el desarrollo de algunos programas forestales con alrededor de 600 mil dólares.

Reed Segovia dijo que le apuesta a "quedar tablas" entre las tasas de deforestación y reforestación en el país, ya que los datos de los programas de recuperación de bosques revelaban, al comienzo de este gobierno, la sobrevivencia de 20 por ciento de los árboles plantados, y para este año espera que la cifra se ubique en 50 por ciento.

Dijo que entre las "fallas" de la evaluación de la FAO está que "si se reportaban 400 mil hectáreas en promedio afectadas por incendios, se tomaba en cuenta esa cifra pero se incluían matorrales, pastizales y arbustos; nosotros decimos que son 40 mil, porque esa vegetación no se desagregó y por eso no aceptamos que esa cifra sea tan dramática".

Respecto de este punto, el representante de la FAO en México, Norman Belino, puntualizó que las cifras se toman de los propios gobiernos, ya que éstos cuentan con los mecanismos para hacer las mediciones y lo que hay es una diferencia en la interpretación.

Diagnóstico forestal

Precisó el rezago que se encontró en el sector al comienzo de la administración foxista "nos hace pensar que los acuerdos alcanzados en el marco de cooperación de la Cofan no tuvieron un seguimiento puntual en épocas anteriores que hiciera realidad los beneficios de una voluntad de colaboración".

Sostuvo que el panorama en el sector no era optimista, ya que las cifras de deforestación, degradación y perturbación de bosques y selvas colocaban al país entre los cinco primeros lugares a nivel mundial en pérdida de cubierta forestal y de hábitat natural.

Destacó que entre las consecuencias de la falta de atención oportuna en la materia están la escasez de agua, que afecta a 60 por ciento de las grandes ciudades; el abatimiento de poblaciones de flora y fauna y la pérdida de calidad de vida para muchas comunidades rurales que hoy padecen fenómenos migratorios y de desintegración.

Afirmó que el presupuesto para este sector en este gobierno creció 10 veces, ya que empezó con 200 millones de pesos y en 2004 llegó a los 2 mil 100 millones, y expresó su confianza en que para el próximo año se obtenga 15 por ciento más.

Estados Unidos ocupa el cuarto lugar en cuanto a cubierta forestal, cuenta con ocho por ciento de los bosques del mundo, alrededor de 300 millones de hectáreas, sólo es superado por Rusia, Brasil y Canadá, y la mayoría de la superficie es privada. Entre otros problemas que enfrenta están la especies invasoras, las actividades recreativas no controladas y la fragmentación forestal.