México D.F. Lunes 25 de octubre de 2004
El objetivo, evitar que algunas familias se beneficien de programas duplicados
Eliminar subsidios a la tortilla y a la leche, recomienda la OCDE a México
NOTIMEX
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) recomendó a México eliminar los subsidios que otorga a la tortilla y a la leche -por medio de Liconsa-, para evitar duplicidades con otros apoyos que da el gobierno federal.
En la publicación Estudios económicos de la OCDE, en el apartado "Alivio de la pobreza", el organismo internacional expuso que si bien los recursos canalizados a combatir la pobreza extrema en México han aumentado con regularidad en los años recientes, queda mucho por hacer.
Indicó que se requiere coordinar mejor los programas sociales para garantizar que algunas de las familias a las que se pretende llegar no se beneficien de programas duplicados, en tanto otras queden excluidas por completo de todos ellos.
Aseguró que es el caso de la industrializadora de leche del gobierno, Liconsa, y del Programa de la Tortilla, pues ahora el programa Progresa Oportunidades también se dirige a la población semiurbana y urbana, agregó.
La OCDE también recomendó al gobierno mexicano asegurar, por medio de la canalización adecuada, que los programas de reducción de la pobreza no generen incentivos contrarios al trabajo.
Además, que realice evaluaciones regulares sobre los logros de la estrategia de la reducción de la pobreza aplicada durante los años recientes, al igual que un análisis costo-beneficio de algunos de su componentes.
Refirió que de acuerdo con datos del Banco Mundial, la proporción de la población mexicana que vive en condiciones de pobreza extrema y que es definida con una remuneración inferior a un dólar bajó de 16.2 por ciento en 1989 a 13.2 por ciento en 2000.
En tanto, la desnutrición de los niños menores de cinco años también se redujo de 14.4 por ciento en 1988 a ocho por ciento en 2000, mientras la tasa de mortalidad entre menores de cinco años disminuyó de 46 de cada mil en 1990, a 36 de cada mil en 2000.
La OCDE consideró que la reducción de la pobreza puede atribuirse a varios factores, entre ellos una generación neta de empleos en el sector formal, un ligero aumento en los salarios reales, el incremento de la remesa de los migrantes y la expansión de programas sociales durante los años recientes.
No obstante, añadió que los índices de pobreza en México aún son altos, pues más de 45 millones de mexicanos viven con menos de dos dólares diarios, mientras que 10 millones de ellos sobreviven en condiciones de pobreza extrema, con acceso limitado a servicios básicos.
En 2000, precisó, 27.8 por ciento de la población mayor de 15 años de edad no había completado la educación primaria, casi 15 por ciento vivía en casa con piso de tierra y cerca de 12 por ciento no tenía acceso a agua entubada o drenaje.
Finalmente, el organismo internacional destacó que en México la pobreza extrema afecta más que nada a la población de la zona del sureste del país.
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