Reconoce la Secretaría de Hacienda dificultad para reformarlos

De 116 por ciento del PIB, el déficit de los sistemas públicos de pensiones

Propone Gil Díaz privatizar los regímenes de burócratas y demás trabajadores

DAVID ZUÑIGA

El déficit actuarial de los sistemas públicos de pensiones en México alcanza 116 por ciento del producto interno bruto (PIB) y la mayor parte corresponde a trabajadores afiliados al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), afirmó el subsecretario de Hacienda, Alonso García Tamés.

Por su parte, el secretario del ramo, Francisco Gil Díaz, sostuvo que privatizar las pensiones de los burócratas y de otros grupos de trabajadores resulta indispensable para garantizar la viabilidad financiera de los planes de retiro a largo plazo. Citó una de las conclusiones de la Convención Nacional Hacendaria: "El diagnóstico de los distintos sistemas de pensiones públicos apunta a una dirección inequívoca: la creación de un sistema nacional con base en cuentas individuales y una pensión mínima garantizada".

Al participar en una conferencia con motivo de los 10 años de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), García Tamés dijo que reformar los sistemas públicos de pensiones del IMSS, del ISSSTE, de los gobiernos estatales, de las empresas paraestatales y de la banca de desarrollo "es una responsabilidad histórica impostergable".

Por sí sola, la deuda del sistema de pensiones del ISSSTE es "insostenible" porque ya equivale a 45 por ciento del PIB, crece rápidamente y cada año le cuesta al país 2 por ciento del PIB; sin embargo, reconoció que actualmente no existen condiciones para que el Congreso apruebe la iniciativa de reforma que ya elabora el Ejecutivo.

El déficit actuarial del sistema de pensiones del ISSSTE representa 45 por ciento del PIB, el de los estados, 25 por ciento; el del IMSS, 15 por ciento, y el de las paraestatales, 9 por ciento. En cuanto al Seguro Social, pronosticó que en 16 años ya no tendrá recursos no sólo para pagar pensiones si no para dar atención médica.

Por su parte, el subgobernador del Banco de México, José Julián Sidaoui Dib, advirtió que mientras más se postergue la reforma de los sistemas públicos de pensiones más le costará al país y "eventualmente se pondría en riesgo la estabilidad" económica del país.

A su vez, el director del Departamento de Protección Social del Banco Mundial, Robert Holzmann, subrayó que la mitad de los países de América Latina, encabezados por México y Chile, ya han reformado sus sistemas de pensiones.

Por su parte, el secretario de Hacienda afirmó que los sistemas de pensiones de reparto son "típica e intrínsecamente" deficitarios y por ello se debe generalizar el esquema de cuentas individuales. El objetivo es que las pensiones de los trabajadores "no generen presiones indeseables en el gasto público y que no haya necesidad de usar recursos del gasto social y de la inversión pública para pagarlas".

Uno de los retos del nuevo sistema de pensiones, es que los trabajadores no pierdan su ahorro al cambiar de empleo, sin importar si laboran para una empresa privada, para el gobierno o de manera independiente.

Gil Díaz destacó que los ahorros de los trabajadores han sido fundamentales para consolidar el sistema financiero. Las Sociedades de Inversión de Fondos para el retiro (Siefore) manejan actualmente el equivalente a 11.4 por ciento de los activos del sistema financiero. Hace siete años esta participación era de medio punto porcentual, es decir, se ha multiplicado más de 20 veces, y con esos recursos se financian proyectos de empresas públicas privadas, de estados y municipios, a través de diversos instrumentos financieros.