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México D.F. Viernes 27 de agosto de 2004

En combate soy su entrenador y el papá se queda en casa, dijo Reynaldo Salazar

El resultado motivará a su hermana Iridia

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Atenas, 26 de agosto. Primero ganó la medalla de plata y luego llegó la preocupación para Oscar Salazar, quien de acuerdo con la información proporcionada por su padre, Reynaldo, deberá ser intervenido por la rotura de los ligamentos cruzados en la rodilla derecha, lesión con la que participó en la final olímpica de taekwondo.

Su también entrenador destacó que haber llegado a la final y ganar el segundo sitio se magnifica todavía más por las condiciones en las que Oscar compitió.

Comentó que su hijo empezó el combate por la medalla de oro un poco incierto por los tres puntos que le contabilizaron al comienzo de la pelea a su contrario, Chu Mu Yen de China Taipei, y aunque después intentó recuperarse ya no tuvo la plena confianza en cada ofensiva que realizó.

"La estrategia no salió bien, pero estoy contento con su resultado, ya que a sus cinco años le dije que debía ser medallista olímpico", recordó.

Dijo que el resultado de esta pelea motivará con seguridad a su hermana Iridia, quien este viernes competirá en el torneo olímpico en la categoría de menos de 57 kilogramos.

"Iridia debe ganar medalla, esa es la ilusión que tenemos todos", anticipó Reynaldo.

Presente en el Pabellón Deportivo de Faliro, Iridia apoyó con gritos de ánimo a su hermano en todo momento. Al final del combate, la también taekwondoísta se vio un poco desilusionada porque Oscar no ganó la medalla de oro, aunque dejó en claro que "es mi ídolo, mi motivación, lo quiero mucho y estoy orgullosa de él".

Al preguntarle a Reynaldo sobre su doble función de padre y entrenador, respondió que quien está sentado en la silla es el entrenador de Oscar, porque "la figura de padre se quedó en casa".

Explicó que "no hay dificultad en definir esta función, al contrario, es más la confianza y comunicación que hay, yo lo puedo entender con sólo ver su cara, sus gestos, si está nervioso, tranquilo, confiando o si está respondiendo a las indicaciones que le estoy diciendo".

El ex competidor y ganador de medalla en un campeonato mundial tiene clara su función en casa y en cada competencia de sus hijos, por lo que indicó -luego del primer combate ganado por Oscar y a la espera de las acciones de Iridia- que "lo de cada cosa en su lugar; ahorita estoy de entrenador y no hay papá, el papá se quedó en casa". Señaló que con esa autoridad de entrenador "le hablo con toda la fuerza a Oscar, lo motivo muchísimo, le doy mucha confianza y sobre todo le hago ver las indicaciones muy claramente de lo que debe hacer".

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