Exigen el inventario de las mercancías decomisadas y en poder del fisco

Industriales ponen en duda que se esté destruyendo el contrabando de textiles

Canaintex pide apoyo del gobierno para la industria y para enfrentar la competencia china

DAVID ZUÑIGA

La Administración General de Aduanas (AGA) no destruye todo el contrabando que decomisa y oculta información sobre la mercancía en su poder, acusó ayer el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex), Rosendo Vallés.

En conferencia de prensa, el empresario afirmó que las autoridades aduanales empezaron hace unas semanas la destrucción de la tela decomisada, pero sólo cortaron ''algunos rollos'' y la mercancía no se ha incinerado en hornos de empresas cementeras, como estaba previsto, a pesar de que existe un convenio con el sector privado para verificar el destino final del contrabando. Según Vallés, sólo falta que el gobierno federal ''dé la instrucción'' para incinerar la mercancía, ''porque todo está listo''.

El dirigente dijo que si bien se ha incrementado el número de decomisos durante esta administración, las bandas de contrabandistas siguen actuando con impunidad.

''Hemos solicitado en varias ocasiones un inventario muy detallado de las telas que tiene en su poder el fisco federal y de las que están en proceso judicial. Se ha solicitado formalmente dentro del marco de la Comisión Mixta de Combate a la economía ilegal, que preside Eduardo Sojo (coordinador de Políticas Públicas de la Presidencia) y estamos en espera de que se nos dé este inventario, que debería ser público, con un balance de entradas y salidas'', agregó.

En la conferencia participaron diputados federales del Partido Acción Nacional. El coordinador de la bancada, Francisco Barrio Terrazas, explicó que la propuesta sobre el tipo penal del contrabando ya se aprobó en el Senado, pero en la Cámara de Diputados hay diferencias sobre si debe perseguirse de oficio o previa querella.

Asimismo, señaló que hay sectores del empresariado -entre ellos la industria maquiladora y otros que realizan ''un gran movimiento de importaciones y exportaciones''- que están en contra de perseguir este ilícito de oficio por temor a que se cometan errores y abusos. Según Barrio, estos temores están infundados porque la ley prevé mecanismos para evitar estas irregularidades.

El legislador recordó que cuando fue gobernador de Chihuahua supo de numerosos casos en que los contrabandistas quedaban libres porque no había denuncia.

Por otra parte, Vallés demandó al gobierno mexicano defender a la industria textil ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) y advirtió que a partir del próximo año China podría apoderarse de todo el mercado estadunidense y desplazar a México, que vende 80 por ciento de sus exportaciones textiles al vecino país.

Vallés señaló que la industria textil es estratégica para el país porque aporta 3.2 por ciento del PIB manufacturero, en 2003 hizo exportaciones por 4 mil 687.6 millones de dólares y le da empleo a 142 mil personas (8 mil 500 se han recuperado este año); sin embargo, a partir del año 2000 ha estado perdiendo participación de mercado en Estados Unidos debido a la competencia de China, que el año pasado aumentó 32.8 por ciento sus ventas de textiles y ropa a ese país, mientras las de México se redujeron 7.9 por ciento.

Hasta marzo de este año 65 por ciento de la ropa que importaba Estados Unidos provenía de China, pero la proporción podría llegar a 85 por ciento en 2005 si la OMC elimina las cuotas textiles. Esto provocaría que 30 millones de empleos se trasladen a China.

Ante esta situación, 100 organizaciones empresariales de 52 países firmaron la Declaración de Estambul para impedir la eliminación de cuotas textiles y participaron en la Cumbre sobre Comercio Justo en Textiles y Confección, celebrada el 16 y 17 de junio en Bruselas, a fin de exigir una reunión de emergencia de la OMC y discutir la aplicación de mecanismos de salvaguarda expeditos y agilizar el combate a las prácticas desleales.

El tema se tratará en la reunión del Consejo de Mercancías de la OMC, que comenzará el primero de octubre.

La Canaintex solicitó al Congreso que apoye la demanda de ratificar hasta 2007 las cuotas compensatorias a la ropa y textiles procedentes de China, que el gobierno federal defienda a la industria nacional en la reunión de la OMC, que se tipifique el contrabando como delincuencia organizada, que se apruebe una partida de 50 millones de pesos para apoyar a la industria textil y 50 millones más para un fondo de garantías en Nacional Financiera para financiar a empresas del sector.

Francisco Barrio respondió que los diputados del PAN ven con ''gran simpatía'' las peticiones de la Canaintex; sin embargo, advirtió que en 2005 la astringencia presupuestal será aún más grave que este año debido al pago de pensiones y otras erogaciones.