México D.F. Sábado 31 de julio de 2004
Agravia la inseguridad en que vivimos: Sepúlveda Amor
Condena comunidad médica el asesinato de Carmen Gutiérrez
ANGELES CRUZ
La comunidad médica expresó ayer su más enérgico repudio por el asesinato de la doctora Carmen Gutiérrez de Velasco y exhortó a los legisladores a aprobar los mecanismos que garanticen que el sistema de justicia disponga de más y mejores instrumentos para impedir este tipo de hechos, y sobre todo que se castigue a los responsables.
Encabezados por Jaime Sepúlveda Amor, coordinador de los institutos nacionales de salud, empleados y directores de éstos, así como de los hospitales y centros nacionales adscritos a la Secretaría de Salud (Ssa), realizaron un mitin en la explanada principal del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER).
"Nuestras profesiones nos llamaron desde temprana edad al cuidado, protección y preservación de la vida. Es por eso -dijo Sepúlveda- que las circunstancias de la muerte de Carmelita nos indignan aún más."
El 22 de julio, Gutiérrez de Velasco fue secuestrada cuando se dirigía al hospital Médica Sur. Sus familiares mantuvieron negociaciones con los plagiarios, quienes a pesar de ello asesinaron a la doctora, también jefa de la división de Rehabilitación Geriátrica y Cardiorrespiratoria del Centro Nacional de Rehabilitación (CNR).
"Nuestra comunidad -dijo Sepúlveda-, nuestros familiares y amigos han sido también agraviados por el clima de inseguridad en que vivimos."
Ante unos 300 empleados de los hospitales, institutos y centros nacionales de la Ssa, Sepúlveda Amor relató que al conocer la muerte de Gutiérrez de Velasco los médicos decidieron hacer pública su protesta. "La disyuntiva de no hacer nada la descartamos desde el primer momento", apuntó.
Poco antes del mediodía, los trabajadores de salud iniciaron la protesta. Luis Guillermo Ibarra, director del CNR, presentó la semblanza de Carmen Gutiérrez; después, el director del INER, Fernando Cano Valle, dio lectura a un desplegado suscrito por los titulares de las dependencias de salud.
En su turno, Sepúlveda, en nombre de los ahí reunidos, exigió a las autoridades que "inmediatamente tomen todas las providencias y medidas necesarias para una adecuada y exhaustiva investigación, para el total esclarecimiento de los hechos, y la condena más enérgica que en derecho proceda a quienes, ocultos en el anonimato, la cobardía, la violencia y la impunidad, arrebataron la vida a un ser humano, miembro de nuestra comunidad."
Expresó su solidaridad con la familia de Gutiérrez de Velasco, en particular con su esposo, Manuel Ruiz de Chávez, presidente ejecutivo de la Fundación Mexicana para la Salud, y sus hijos.
Más adelante, recordó que justamente ayer se realizó el periodo extraordinario de sesiones del Congreso de la Unión durante el cual los legisladores debieron abordar -además de la iniciativa de reforma a la Ley del Seguro Social- el tema de la seguridad pública. Los exhortó a aprobar los cambios legales que aseguren la prevención de los actos de violencia que atentan contra la integridad física de las personas, y principalmente, que se castigue a los responsables de esos delitos.
Sepúlveda convocó a no perder la capacidad de sorpresa e indignación ante agravios como el sufrido por la familia Ruiz de Chávez. "Estamos llamados a cerrar filas, a exigir, a demandar justicia y castigo a los transgresores de la ley."
Todos, agregó Sepúlveda, deben manifestarse y "trabajar por tener un mejor país para nosotros y nuestras familias. Este es el momento para demostrar lo mejor de nosotros y no desperdiciar, o menospreciar, los valores de la vida que Carmelita llevó con tanta fortaleza, calidez y dignidad".
El acto de protesta finalizó con un minuto de silencio en memoria de Carmen Gutiérrez de Velasco.
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