Las acusaciones del PRD son "afirmaciones falsas, sin fundamento", sostiene

Creel niega haber negociado impunidad de Echeverría por la reforma del IMSS

Advierte que el gobierno no permitirá acciones de los trabajadores al margen de la ley

Nadie puede presionar al Legislativo para que tome sus decisiones, afirma el titular de la SG

ENRIQUE MENDEZ

El titular de la Secretaría de Gobernación, Santiago Creel Miranda, sostuvo que el gobierno federal no negoció con el PRI la impunidad del ex presidente Luis Echeverría Alvarez a cambio de la reforma a la Ley del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). A las acusaciones lanzadas por el PRD, reviró: "afirmaciones falsas, sin fundamento".

Como el sábado, ayer una vez más advirtió que no tolerará que el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS) adopte acciones diferentes a las que "tienen que hacerse bajo los cauces legales; lo demás no lo vamos a permitir".

Luego de que el SNTSS anunció movilizaciones y amagó con un paro nacional en repudio al proyecto de reforma, Creel Miranda afirmó que aun cuando la administración foxista respeta "la manifestación que quiera hacer cualquier mexicano, ya que hay libertad de expresión y libertad de manifestación", pero esto "tiene que hacerse dentro de las instituciones".

A diferencia de otras ocasiones, en que el Congreso de la Unión ha recibido críticas del Ejecutivo por rechazar sus iniciativas, este domingo el titular de Gobernación afirmó que nadie puede presionar al Poder Legislativo para que tome sus decisiones.

En entrevista, luego de la ceremonia del 132 aniversario luctuoso del Benemérito de las Américas, Benito Juárez -en cuyo honor se depositó una ofrenda floral en el hemiciclo de la Alameda Central, pero no se pronunció ningún mensaje-, Creel Miranda recordó que el viernes, sólo dos días después de que la iniciativa se presentó ante la Comisión Permanente, el proyecto legislativo fue dictaminado por la Comisión de Hacienda.

"Seguramente", dijo, en esta semana se discutirá en las comisiones de Seguridad Social y del Trabajo, "y vamos a esperar a ver qué resuelven los legisladores, que son los que tienen la última palabra."

Esa respuesta también dio pie para que insistiera en que le parece "inaceptable que se quiera chantajear, que se quiera amedrentar a los legisladores con amagos o amenazas para que fallen en uno o en otro sentido. Lo democrático, lo que verdaderamente se apega al marco constitucional, es esperar a que los legisladores resuelvan en función de los intereses que juzguen convenientes".

Declaró que el gobierno de Vicente Fox piensa que debe apoyarse una reforma al IMSS, "pero estamos conscientes y somos respetuosos de que los legisladores tienen la última palabra. Lo que no vamos a aceptar es que se amedrente, que se chantajee al Congreso mexicano o a los legisladores con presiones".

Sostuvo que el Poder Ejecutivo dialoga con todos los partidos y es mediante esa vía como espera que se aprueben las reformas "que le hacen falta al país", con respeto a los diputados y senadores "si deciden lo contrario; así es la democracia. Presentamos las cosas con un carácter incluyente, abierto y democrático, a sabiendas de que quienes tienen la última palabra son los propios legisladores y nadie más".

También, sin que mediara pregunta, afirmó que el presidente Fox "ya dispuso de mil millones de pesos adicionales" para seguridad pública y dijo que hay un compromiso para "dobletear" el presupuesto en este rubro para 2005.

Informó que el Consejo de Seguridad Pública está en plena restructuración y en él habrá un espacio ciudadano para que se verifiquen las acciones y sean parte de las decisiones que se toman en ese órgano.

Se le preguntó sobre las declaraciones del empresario Juan Sánchez Navarro, quien consideró que Creel Miranda será el candidato presidencial del PAN en 2006, y respondió: "estoy concentrado plenamente en ser secretario de Gobernación. Mi responsabilidad es de tal magnitud importante, que debo estar concentrado y atento en lo mío. Nada me va a distraer, ninguna expresión ni posibles apoyos o desapoyos, críticas o halagos me van a distraer de mi camino de ser secretario de Gobernación, de cumplir con el mandato y encargo del presidente Fox y, sobre todo, de garantizar la estabilidad política del país y la gobernabilidad. Ese es mi encargo, a eso estoy abocado y lo demás, para mí, es lo de menos".