El nuevo reglamento de transferencias es un disfraz, dijo el chileno

Con el draft, sólo falta tener un vaso y pedir limosna: Estay

Criticó que los jugadores libres no puedan contratarse con quien deseen

MIGUEL ANGEL RAMIREZ

El nuevo reglamento de transferencias es simplemente un disfraz para Fabián Estay. Para él todo sigue igual. "No puede ser que en 10 horas tengas que ver tu futuro futbolístico o ver dónde se va a ir tu familia contigo. O quién te ofrece algo. O estas ahí como pidiendo el pan. Te falta ponerte con un vasito y pedir una limosna, a ver si te dan algo. Me parece que es muy denigrante", señaló.

Estay continuó ayer entrenando con el Atlante en las ex instalaciones de Pegaso, pero ignora dónde estará la siguiente temporada. Informó que el jueves pasado acudió a la Federación Mexicana de Futbol para inscribirse como jugador libre, aunque para él es muy cuestionable esto.

Porque aunque estés en la categoría de libres "tienes que pedir autorización al equipo con el que estuviste anteriormente. Entonces, hay muchas situaciones un poquito disfrazadas.

"Si tienes libertad de acción, tienes que ser libre de contratarte en el momento que tú quieras, con el equipo que desees hasta el último día antes de iniciar el campeonato. Creo que esas son las reglas en todos lados."

Lamentó la falta de solidaridad de sus colegas, principalmente de los mexicanos. Considera que deberían unirse "y decir esto no va". Porque la Comisión del Jugador "tiene las mejores intenciones, pero estando dentro de una misma federación, creo que están con las manos atrás".

El chileno tiene muchos motivos para estar decepcionado, pues no sólo lo marginaron del pasado torneo, sino que Santos todavía le debe dinero, a pesar de que en la FMF siempre se ha pregonado que no permitirán la participación de un equipo con adeudos.

Confió que la última vez que platicó con Guillermo Cantú le pidió que "tuviera paciencia".

Fabián tiene posibilidades de quedarse en Potros, siempre y cuando los dirigentes aprueben el lunes el aumento de jugadores extranjeros (los azulgranas ya tienen su cuota de cinco) o si se respetan a uno o dos naturalizados". Recordó que ya inició los trámites para convertirse en mexicano.

A Estay no le agrada la otra decisión de los dueños, de reducir a 18 equipos. "Creo que con 20 está bien. Este es un país grande, generoso y que tiene público para todos los clubes".

Para él, únicamente debe "haber seriedad" y proceder como "en Inglaterra". Es decir, que exista "un fondo común en la federación, que sea una garantía para los equipos cuando tengan problemas económicos".

Además, con la reducción "quedarían ente 60 y 70 jugadores sin trabajo".

Por lo pronto, el que ayer se despidió de los azulgranas fue Paulo Serafín. Ligó contrato por tres años con Monterrey y si todo sale cómo el desea elevará sus percepciones hasta "80 por ciento".