México D.F. Jueves 10 de junio de 2004
Antes y ahora son los mismos; los cambios los
han causado los medios, expresa
Ser niño es un milagro sencillo y sin cortocircuitos,
afirma Chabelo
ARTURO CRUZ BARCENAS
Con 50 años como Chabelo, Xavier López no
se considera cantante, a la manera de "los demás", pero ayer presentó
el disco número 33 de su carrera, Katafixia, en la que el
niño creó otro niño de 13 años, edad sempiterna,
detenida en el tiempo de generaciones que lo han seguido en la televisión
y actualmente en su programa En familia, todos los domingos.
Ser
niño, definió, es un milagro, "sencillo y sin cortocircuitos".
La familia y la amistad son recompensas de la vida, agregó quien
se encarga de regresar al público al "planeta chiquillo", donde
maneja el elemento sorpresa que en el lenguaje de los niños se llama
imaginación.
En Katafixia, palabra inventada por él (del
idioma ficticio mautro, de los marcianos), sin traducción directa
y que, informó, está en proceso de entrar al Diccionario
de la Real Academia, regala lo mejor de lo que ocurre a diario, desde el
festejo de saborear la fruta fresca y pasear con los amigos, hasta el triunfo
de traer la gorra puesta.
En su mundo hasta los insectos bailan danzón y
un sapo es el solista de una orquesta. La autoría de las piezas
es del propio Xavier López, Leonardo Sandoval, Marcial Alejandro,
Gerardo García, Jorge Prado, Xavier Asali y Sabo Romo.
En conferencia expuso: "El disco lo hicimos pensando en
este mundo tan cambiante, en el que es necesario mostrar un abanico de
estilos para que los niños puedan escoger. El ser humano cuando
es niño tiene el deseo de crecer lo más rápido que
se pueda, pero estoy convencido de que la de ser niño es la mejor
etapa del ser humano".
Mamacita, dónde está Santaclós,
es el único tema de Chabelo que ha estado en las listas de popularidad.
En la rueda de prensa, a veces respondía como Chabelo
y otras como Xavier López. Para el personaje, "el niño es
sencillo, claro, transparente, diáfano, y no es necesario rebuscarle
el material. Hay que darle lo simple, porque ellos así son; son
la verdad".
Chabelo dijo que este disco tiene el talento "del señor
Alejandro, del señor Sabo y otros. Tiene, sin temor a equivocarme,
la calidad de otros discos hechos por quien sea. El mío tiene la
cualidad de que puede estar en las tiendas de discos todos los días
del año porque la gente sabe quién he sido a lo largo de
50 años. Puede estar presente en todas las fiestas.
"Hay materiales que salen para los pequeños, pero
es aplastante la cantidad de cosas que no son para ellos. Hay cosas hechas
al aventón. No es por subestimar a los otros compañeros que
hacen música para niños, y no es que yo niegue la competencia,
sino que tengo algo muy claro: que todos llegamos al mundo con un equipaje,
un par de maletas que nos hacen únicos.
"En esas maletas vienen unas herramientas; las mías
sólo las sé usar yo. Soy único, pero no como presunción.
No me va a alcanzar la vida para usar todas las herramientas."
-¿Ha cambiado el hecho de ser niño?
López: "El personaje de Chabelo nació de
manera casual. Mi escuela, mi universidad, a lo largo de 50 años,
se originó en la observación de los niños, en ver
cómo se comportan. Los niños de antes y ahora son los mismos.
Los cambios los han provocado los medios. Sí hay tanta información
que, señalan algunos estudios, los niños comienzan a recibirla
al quinto mes de gestación. El niño ya nace, digamos, con
chip especial para defenderse de la agresión de tanta información,
pero un niño sigue siendo eso: un niño".
El chavo Chabelo es respetuoso con las personas adultas,
para dar el ejemplo. "La televisión la ven las personas que no tienen
otra alternativa de diversión. ¿Por qué no les doy
un tipo de música en específico? Porque entonces sería
discriminatorio. No puedo dirigir un producto sólo a los niños
de la ciudad.
"Las canciones que canto tienen la sencillez del lenguaje
de los niños, cuyo imperativo es jugar. Sobre si un día me
retiraré, sólo puedo decir que quisiera ser eterno".
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