México D.F. Jueves 10 de junio de 2004
Aprueba Semarnat estudio de impacto ambiental;
cumple "casi" todos los requisitos
Inminente, la construcción de basurero industrial
en Hidalgo
El vertedero de residuos tóxicos de Chapantongo
sería el cuarto en desarrollarse en el país
ANGELICA ENCISO L.
Tras
la aprobación del estudio de impacto ambiental por la Secretaría
de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), es inminente la construcción
de un confinamiento de residuos peligrosos y una planta de reciclaje en
Chapantongo, Hidalgo, el cual sería el cuarto en desarrollarse en
el país, aunque actualmente sólo hay uno en operación.
Contra el proyecto ya se han manifestado organizaciones
co-mo Greenpeace y la Federación Pro Defensa del Patrimonio Cultural
y Natural de Hidalgo. Además, aún falta la aprobación
del municipio y del estado, los cuales han reconocido tener interés
en el plan por la generación de empleos.
El subsecretario de Gestión para la Protección
Ambiental, Francisco Giner de los Ríos, explicó ayer en entrevista
que ya se hicieron consultas con la comunidad y el proyecto cumple con
"casi" todos los requisitos que establece la normatividad.
Precisó que son dos puntos en los que existe incumplimiento:
el primero es que hay un acuífero superficial, para lo cual la empresa
que desarrolla el proyecto propuso acciones de ingeniería tendientes
a evitar daños, lo cual está considerado legalmente. Además
estimó que se trata de un acuífero de "poca importancia"
y es intermitente.
El otro punto que no se acata es la distancia que el confinamiento
de residuos debe tener respecto de la población de 10 mil habitantes
más cercana, la cual deberá localizarse a no menos de 25
kilómetros del sitio. En este caso, entre Tula y Ciudad Sahagún,
donde se propone ubicvar el confinamiento, se levanta una montaña,
lo cual constituye un "obstáculo natural".
El funcionario explicó que el gobierno estatal
está interesado en la obra porque le daría ventaja competitiva
respecto a otras entidades.
En Chapantongo se prevé construir la obra en 110
hectáreas, tendría una vigencia de 30 años y sería
para reciclaje y confinamiento. De acuerdo con versiones oficiales, en
el país se generan al año 3.7 millones de toneladas de residuos
peligrosos -cifras extraoficiales hablan de 14 millones- y actualmente
sólo opera el basurero que se localiza en Mina, Nuevo León,
el cual fue autorizado en 1985; se cree que su capacidad de almacenamiento
se está agotando.
En Sonora se construyó el confinamiento de Cytrar
en 1987 y dejó de operar en 1998, además de que empezaron
las obras de un sitio en Guadalcázar, San Luis Potosí, el
cual fue clausurado por la Procuraduría Federal de Protección
al Ambiente por depositar inadecuadamente 20 mil toneladas de residuos
y por protestas de los habitantes. En 2000, un tribunal internacional determinó
que México debía pagar 6 millones de dólares a Metalclad,
la empresa que operaría el sitio, por no permitirle continuar con
sus labores.
|