México D.F. Viernes 4 de junio de 2004
Informalidad y migración se consolidan
como puntales de la economía, dice el CEESP
El sector informal ofreció cinco veces más
empleos que el formal: Banamex
49 de cada 100 plazas de trabajo carecen de seguridad,
prestaciones o derechos laborales mínimos, según reporte
ROBERTO GONZALEZ AMADOR
Como reflejo de la degradación de las condiciones
laborales en México, en el primer trimestre de este año la
generación de empleos en el sector informal de la economía
creció cinco veces más que las plazas generadas por las actividades
formales, reveló un estudio de Banamex-Citigroup, elaborado con
base en información de instancias oficiales.
''La población que se incorpora al mercado de trabajo
lo hace mayoritariamente en el sector informal de la economía'',
expuso el principal grupo financiero del país.
El comportamiento del mercado de trabajo en los primeros
meses del año, caracterizado por un mayor crecimiento de las plazas
informales -donde no existe seguridad en el empleo, prestaciones o derechos
laborales mínimos- que de las formales, sigue una tendencia iniciada
hace al menos una década, pero que se ha manifestado de manera significativa
en los últimos tres años.
En 2000, de acuerdo con el reporte de Banamex que cita
información del Instituto Nacional de Estadística, Geografía
e Informática (INEGI), 45.5 de cada 100 empleos se ubicaban en el
sector informal de la economía, proporción que aumentó
a 49 de cada 100 en marzo pasado.
El crecimiento demográfico que México experimentó
durante últimas décadas se expresa ahora en importantes incrementos
de la población en edad productiva, indicó el grupo financiero.
En 2003, mientras la población total creció 1.3 por ciento,
la económicamente activa (PEA) lo hizo en 2.2 por ciento. En el
ámbito urbano en total se incrementó 1.7, en tanto la PEA
se expandió 3.2 por ciento.
Banamex consideró que ''el problema es que el aumento
de la población en edad productiva en las ciudades no ha estado
acompañado por un crecimiento económico sostenido, capaz
de generar el número de empleos de calidad que se requieren''.
Las cifras contenidas en el estudio no dejan lugar a duda
de que la población que se incorpora al mercado de trabajo lo hace
mayoritariamente en el sector informal de la economía. Durante 2003,
la tasa de crecimiento de los trabajadores afiliados al Seguro Social creció
0.1 por ciento, mientras el empleo urbano informal aumentó 4.8 por
ciento. En el primer trimestre de 2004 las plazas formales crecieron 0.7
por ciento, en tanto el empleo informal repuntó 4.3 por ciento.
Aunque el empleo informal alcanza gran parte de las actividades
productivas del país, el sector de los servicios -donde cobra especial
relevancia el comercio o el turismo- ha sido el principal nicho de la población
ocupada sin prestaciones, de acuerdo con el estudio de Banamex.
En todo el país, el sector de los servicios genera
70 por ciento del empleo total. Pero prácticamente la mitad de las
personas ocupadas en este tipo de actividades no goza de prestaciones.
El empleo informal en el sector de servicios cobra mayor
relevancia en ciudades donde la economía está altamente dedicada
a la prestación de servicios, como Cancún, La Paz, Veracruz
y Tuxtla Gutiérrez, donde más de 80 por ciento de la población
ocupada se sitúa en la prestación de servicios y el comercio,
y más de 40 por ciento se encuentra en la informalidad.
Persiste la incapacidad para generar crecimiento
DAVID ZUÑIGA
La informalidad sigue creciendo y se ha convertido en
una de las actividades de mayor peso económico en México,
pues genera el equivalente a 12.5 por ciento del producto interno bruto
(PIB), más que el sector agropecuario, la minería, la construcción
y la electricidad juntas, de acuerdo con el Centro de Estudios Económicos
del Sector Privado (CEESP).
El
organismo también señaló que el ''enorme'' aumento
de las remesas de los migrantes en años recientes es una señal
''preocupante'' de que la migración y la economía informal
siguen siendo las principales válvulas de escape ante la insuficiencia
de las estrategias gubernamentales para generar crecimiento y empleo.
Los analistas del CEESP señalan, con base en la
Encuesta del Subsector Informal del INEGI correspondiente a 2001, que el
PIB de este sector ascendió a 663 mil 104 millones de pesos a precios
corrientes y sigue avanzando en distintas actividades: 19.8 por ciento
del PIB generado por el comercio, la hotelería y los servicios de
restaurantes provino del sector informal, al igual que 17.4 por ciento
de la riqueza generada por los servicios comunales, sociales y personales,
10.7 en la construcción, 9.5 en el transporte y 5.9 por ciento en
las manufacturas.
El CEESP destaca que, con algunas variaciones, el empleo
en el ''sector no estructurado de la economía'' ha mantenido una
tendencia ascendente en el gobierno de Vicente Fox: en el último
trimestre de 2000 había aproximadamente 10 millones de mexicanos
en el sector informal, cifra que para el primer trimestre de 2004 llegaba
a 11.6 millones, 27 por ciento de la población económicamente
activa (PEA).
Los analistas argumentan que el aumento de la informalidad
y el desempleo se debe en parte a que persisten el exceso de regulación
y un sistema fiscal complejo y costoso, que estimula la evasión.
Abrir un negocio aquí requiere en promedio 57 días,
mientras en China se requieren 46 y en Estados Unidos sólo cuatro.
Además, señalan, los costos laborales no salariales equivalen
a 59.3 por ciento del total del salario; es decir, el empresario debe erogar
por cada trabajador contratado 1.6 veces el salario que le ofrece.
El centro que dirige Mario Rodarte señala que la
falta de crecimiento genera un círculo vicioso, pues aumenta el
desempleo y la informalidad; no obstante, también reconoce que las
empresas mexicanas no tienen capacidad para absorber toda la mano de obra
que cada año se incorpora al mercado.
Crecen remesas 22% al año
El CEESP destacó que en el primer trimestre las
remesas familiares sumaron 3 mil 339 millones de dólares, 73 por
ciento de las exportaciones de petróleo crudo y 45 por ciento de
la inversión extranjera que ingresó en ese periodo (incluida
la venta de acciones de Bancomer al español BBVA, por 4 mil 200
millones de dólares).
En ese periodo se realizaron 10.5 millones de envíos
por un monto promedio de 318 dólares.
Los envíos de dinero de los migrantes, señala,
se han vuelto factor clave para calcular el saldo de la cuenta corriente
y sin ellas resulta ''imposible'' entender la relación económica
de México con el extranjero. Durante los últimos cinco años
las remesas han crecido a una tasa anual promedio de 22 por ciento, muy
superior a la mostrada por las exportaciones, servicios factoriales y no
factoriales.
Sin embargo, a pesar de su peso en la cuenta corriente,
las remesas no generan crecimiento ni empleos porque se trata de dinero
destinado al consumo. Además, 46.5 por ciento de estos recursos
se concentran en sólo cinco entidades: Michoacán, Guanajuato,
Jalisco, estado de México y Puebla.
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