El Banco de México da a conocer la balanza de pagos al primer trimestre

Más de 98 por ciento de las remesas, al pago de intereses de la deuda externa

La venta de Bancomer al BBVA, los envíos de trabajadores y el petróleo ampliaron la disponibilidad de divisas Un millón de dólares, en el limbo contable del BdeM

JUAN ANTONIO ZUÑIGA Y ROBERTO GONZALEZ

Más de 98 por ciento del ingreso de divisas procedente de los envíos de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos se destinó al pago de los intereses de la deuda externa pública y privada durante el primer trimestre de este año, indican informes del Banco de México.

El monto de las remesas de los trabajadores migrantes a sus familiares ascendió a 3 mil 339 millones de dólares; en tanto que la salida de divisas para cubrir los intereses del endeudamiento externo total del país fue de 3 mil 281 millones.

Al dar a conocer los resultados de la balanza de pagos, el banco central puntualizó que tres fueron los elementos determinantes en la disponibilidad de divisas durante los primeros tres meses de este año: un incremento anual de 21.8 por ciento en la suma de las remesas; el ingreso de 4 mil 200 millones de dólares como inversión extranjera directa por la venta de las acciones de Bancomer al Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), y la elevada cotización del petróleo mexicano de exportación.

Así, únicamente superadas por la inversión extranjera y la exportación de petróleo crudo, las remesas desde Estados Unidos por trabajadores mexicanos constituyeron la tercera fuente de ingresos de divisas para el país durante el primer trimestre de 2004.

Entre enero y marzo, los trabajadores mexicanos en el exterior realizaron 10.5 millones de envíos, de 318 dólares en promedio cada uno, a sus hogares en el país. El monto conjunto de esos recursos fue equivalente a 73 por ciento del valor de las exportaciones de petróleo crudo efectuadas en el periodo y fue 143 por ciento mayor al ingreso neto de divisas procedente del turismo internacional, indicó el Banco de México.

De mayor a menor, los principales estados receptores de remesas en el primer trimestre de este año fueron: Michoacán, Guanajuato, Jalisco, estado de México y Puebla. En conjunto a estas cinco entidades llegó 46.5 por ciento de los 3 mil 339 millones de dólares remitidos por los trabajadores.

El banco central reportó que la economía mexicana recibió 7 mil 425 millones de dólares como inversión extranjera directa entre enero y marzo. Esa cantidad se integró por 4 mil 870 millones de nuevas inversiones; mil 463 millones por reinversión de utilidades; 558 millones en préstamos de las matrices trasnacionales a sus filiales en México y 534 millones de dólares "por concepto de importaciones de activos fijos por empresas maquiladoras".

Poco más de 86 por ciento de la nueva inversión extranjera fue resultado de una sola operación bursátil y no de la canalización de recursos del exterior a nuevas plantas generadoras de empleo y riqueza: la venta de las acciones de Bancomer al español BBVA por 4 mil 200 millones de dólares.

En este contexto virtual se generaron dos cambios esporádicos en la estructura tradicional de la inversión extranjera en México. Por destino de los recursos, 58.6 por ciento se canalizó en el primer trimestre del año a los servicios financieros; y por país de origen, los capitales procedentes de España figuraron en el primer lugar con 61.2 por ciento del total.

En términos de efectivo, el ingreso de divisas como inversión extranjera directa fue 180 por ciento superior en el primer trimestre de este año, respecto al registrado en el mismo periodo de 2003.

Pero si se elimina el efecto producido por la venta de la empresa bancaria que ya funcionaba, la inversión extranjera habría registrado una elevación de 573 millones de dólares, 21.6 por ciento.

De cualquier manera esas divisas ingresaron a la economía mexicana, por lo que en términos contables contribuyeron en forma determinante a que la cuenta de capital de la balanza de pagos fuera superavitaria en 4 mil 119 millones de dólares en el primer trimestre del año. Esos recursos fueron más que suficientes para cubrir un déficit por mil 866 millones en la cuenta corriente y resarcir una salida por 640 millones de dólares, registrada en el inescrutable renglón de "errores y omisiones".

De esta manera, la reserva internacional de divisas del país aumentó en mil 614 millones de dólares en el primer trimestre de 2004, según concluye el Banco de México. Pero, de acuerdo con estas cifras, oficiales también, el resultado de la balanza de pagos habría dado un incremento de mil 613 millones de dólares.

Quizá por el "redondeo", pero un millón de dólares de diferencia en sus propias cuentas es relativamente poco para la economía nacional y relativamente mucho por lo que implica: 11 millones 476 mil pesos, calculados "al tipo de cambio aplicable para solventar obligaciones denominadas en moneda extranjera en la República Mexicana, determinado el 25 de mayo de 2004", el cual fue de 11.4760 pesos por dólar.