Es tan cercano al poema como ''distinto y distante a la televisión'': Rocío Becerril

Se consolida el género de la videodanza ''aunque no transpire ni salpique sudor''

Deplora que algunos creadores del gremio dancístico se resistan a cultiva esa expresión

Imparte un taller en Casa del Lago, donde hoy se estrena Arar arena, de Irene Martínez

ANGEL VARGAS

La videodanza, asienta la creadora Rocío Becerril, se ha consolidado como una de las principales opciones de expresión y experimentación artísticas en México, no sólo entre coreógrafos jóvenes, sino creadores de otras disciplinas ajenas a la danza, como el cine y las artes visuales.

Se trata de un fenómeno reciente, que comenzó a finales de la década pasada, y que si bien cobra cada vez mayor arraigo y adeptos, está muy lejos de experimentar un boom, sobre todo por los altos recursos económicos que demanda esta vertiente híbrida que fusiona danza y video.

De acuerdo con la coreógrafa y videoartista mexicana, especialista en la materia y una de sus principales representantes en el país, todavía hay algunos creadores de la comunidad dancística nacional que se resisten a esta modalidad, por considerar que es una expresión ''no viva, en la que no se transpira ni se salpica el sudor".

Sin embargo, agrega, ''son ya muy pocos", porque las nuevas generaciones de estudiantes y coreógrafos profesionales, ''no tienen miedo al uso de la tecnología y el video, y están llevando a la escena obras mixtas, con video o multimedia, o bien crean piezas específicamente para videograbarlas".

Firme apoyo de la UNAM

Rocío Becerril refiere que proyectos como el taller que la artista fundó en el Centro Nacional de las Artes en 1998, o una serie de producciones que realizó en 1993 bajo el auspicio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), comienzan hoy a rendir frutos para que mayor número de personas cobren conciencia sobre la relevancia de esta vertiente artística.

De manera paulatina pero firme, dice, cada vez se aprecia más a la videodanza como género poético, ''tan distinto y distante a la televisión y tan cercano a lo que es un poema y a la escritura como tal".

Esa circunstancia repercute también en algunas instituciones públicas, como en la UNAM, la cual, mediante dependencias como la dirección de Danza de Difusión Cultural y Tv UNAM, entre otras, ha decidido apoyar con firmeza esta disciplina.

Este apoyo ocurre retomando un proyecto que se remonta a 10 años y que consiste en producir obras de dicho género, así como la organización en octubre próximo de la tercera Muestra Internacional de Videodanza, encaminada a enfatizar las producciones de origen latinoamericano.

En preparación para acudir a esa muestra con un par de trabajos, Rocío Becerril continúa su labor al frente del taller de videodanza en Casa de Lago, recinto en el que hoy, a partir de las 19 horas, se proyectará una serie de cinco de esos trabajos, entre ellos el estreno de Arar arena, opera prima de la coreógrafa Irene Martínez, quien fue asistente de la creadora alemana Pina Bausch.