El lunes arranca en el Senado de la República la Unión Interparlamentaria

Legisladores de 119 países, en México

El punto de urgencia, pendiente; fluctúa entre el conflicto en Medio Oriente y el terrorismo

BLANCHE PETRICH Y ANDREA BECERRIL

Los más de mil diputados y senadores de 119 países que sesionarán en esta ciudad, en la 110 asamblea anual de la Unión Interparlamentaria (Uip), decidirán el lunes próximo cual será el "punto de urgencia" que concentrará los debates del encuentro. Los parlamentos de los países árabes y la delegación de Indonesia proponen que se discuta el conflicto de Palestina y las condiciones necesarias para rencauzar las negociaciones de paz con Israel, mientras los parlamentos de Chile y Alemania sugieren que sea la lucha antiterrorista el centro de las discusiones.

En todo caso, lo que se proponen los legisladores del mundo -que sesionan sin los representantes del Capitolio estadunidense, suspendidos de este antiguo foro multilateral, porque los estadunidenses se han negado a pagar sus cuotas- es ''actuar como instrumento útil para la paz mundial'', según explicó el presidente de la Uip, el senador chileno Sergio Páez, en conferencia de prensa.

Entre los más de mil legisladores que se congregarán en esta capital, en un hotel del Centro Histórico, hay varios secretarios generales de partidos, directivos de grupos parlamentarios y representantes de centenares de institutos políticos de todo el mundo, excepto de Estados Unidos.

Páez explicó que los congresistas estadunidenses fueron ''desafiliados'' el año pasado por no cubrir sus cuotas. El senador demócratacristiano chileno añadió que ''desde luego no fue por falta de recursos, sino por falta de interés" que los legisladores estadunidenses cayeron en moratoria con la organización

Por lo pronto, los congresistas de la mayor potencia estarán ausentes del debate que, sea cual fuere el tema que se aborde en el llamado "punto de urgencia", -que será definido en votación el lunes-, les incumbe directamente.

El secretario general de la Uip, Anders Johnsson, de Suecia, abordó el tema de las dificultades que tienen los parlamentos del mundo para influir en la toma de decisiones de sus respectivos gobiernos.

"Los legisladores tienen que organizarse de modo que cuando tomen decisiones en foros como éste, los ministros y gobernantes en sus respectivos países efectivamente escuchen lo que sus representantes tienen que decir.''

En el caso concreto de la 110 asamblea de la Uip -el primer foro multilateral que se organizó en el mundo, en 1889, con vocación pacifista, décadas antes de que se concibiera la idea de la Organización de las Naciones Unidas-, se rendirá el informe del Comité de Derechos Humanos de los Parlamentarios, que actúa en casos en los que hay legisladores presos o privados de sus derechos, como en Zimbawe, Burundi o Ruanda.

El tema de la guerra y el terrorismo, así como el asunto del conflicto palestino-israelí, serán, sin embargo, el plato fuerte del encuentro.

Hay cuatro propuestas para el llamado ''punto de urgencia''. En el caso del tema de Palestina, el Parlamento de Líbano, en nombre de los legisladores de los países árabes, propone que se discuta como "un obstáculo para la paz" el muro que Israel pretende alzar en territorios ocupados. Indonesia propone un matiz en la discusión, al poner el énfasis en la búsqueda de condiciones para negociar una paz durable entre Israel y Palestina.

Alemania, por su parte, propone que la asamblea discuta el combate contra el terrorismo desde el diálogo pacífico entre las culturas y las civilizaciones. En su proyecto de resolución, la delegación pluripartita alemana llama a intensificar los esfuerzos para el desarrollo, a observar plenamente los derechos humanos y a impulsar una mejor comprensión de las diversas filosofías existentes en el mundo, como las mejores vías para abatir las prácticas terroristas.

Este documento reafirma que toda medida adoptada para combatir al terrorismo debe concordar con los compromisos adquiridos en el derecho internacional y reconoce que el terrorismo no debe ser atribuido a una religión, una nacionalidad, una cultura o una civilización en particular. Insiste asimismo que, si bien de manera alguna se justifican las prácticas terroristas, éstas pueden generarse a partir de un déficit democrático, de rezagos en el desarrollo económico y en condiciones de violación de los derechos humanos.