Diagnóstico del instituto

Al término del presente sexenio, el déficit pensionario acumulado en el ISSSTE será de 129.7 mil millones de pesos, toda vez que de cada peso de ingreso se requiere un subsidio de 1.50 pesos. La cantidad referida equivale, por ejemplo, al presupuesto que ejercieron el año pasado la Comisión Federal de Electricidad y Luz y Fuerza del Centro.

De continuar la estructura vigente, afirma la dirección del instituto, para 2012 el desfalco será de 309.3 mil millones de pesos, esto es, el presupuesto anual del sector educativo o el gasto destinado al combate a la pobreza. Y, hacia 2018, el déficit sería de 531.1 mil millones, monto cercano al total de reservas del Banco de México.

De un total de 10.3 millones de beneficiarios del ISSSTE, sólo 23 por ciento (poco menos de 2.5 millones) son trabajadores que cotizan, el resto está compuesto por familiares de los empleados, pensionados y familiares.

Con esa base, las autoridades del instituto advierten de la "problemática estructural" que atraviesa el fondo de pensiones por una sencilla razón: cada día habrá menos trabajadores en activo que alimenten, con sus cuotas, el fondo de pensiones.

Según cálculos actuariales difundidos por la dirección financiera del organismo, en 1975, con una esperanza de vida de 64.4 años, los trabajadores disfrutaban de su pensión menos de tres años, ya que se retiraban después de la sexta década de vida. Actualmente, con una esperanza de vida de 75.3 años y una edad promedio de retiro de 55 años, el instituto debe garantizar pensiones por cerca de 21.2 años.

Desde 1983, la Ley del ISSSTE ha sido modificada con importantes beneficios para los derechohabientes, basta recordar que en 1992 se exentó a los pensionados de pagar 4 por ciento de contribución al fondo médico y, desde 2000, las trabajadoras pueden registrar como beneficiario a su pareja. A ello se agrega que al inicio del actual sexenio, el aumento a pensiones se realiza en proporción a la inflación o incremento salarial.

FABIOLA MARTINEZ