Es un intento por controlar los gustos del pueblo, dice la leyenda del rock en el NYT

Opresión, negar la entrada a EU a músicos cubanos, opina el cantautor Jackson Browne

DAVID BROOKS Y JIM CASON CORRESPONSALES

Nueva York y Washington, 22 de marzo. Jackson Browne, cantautor que este año ingresó al Salón de la Fama del Rock & Roll, criticó la política estadunidense de negar visas a artistas cubanos y la prohibición de viajes entre ambos países, al considerarlo una forma de opresión de Washington.

En un artículo de opinión publicado hoy en el New York Times, Browne denuncia que Washington negó una visa al músico cubano Carlos Varela para una serie de conciertos en Estados Unidos y recuerda que ha hecho lo mismo con otros, incluyendo a Ibrahim Ferrer y Manuel Galbán, cuando se les negó la visa para asistir a la ceremonia de los Premios Grammy (en los que ambos ganaron). Todo porque, según la explicación oficial, las visitas de estos artistas cubanos son "dañinas a los intereses" de este país, informa Browne.

"De manera profunda, nuestro gobierno toma el papel de opresor cuando intenta controlar cuáles artistas tendrán permitido el acceso a nuestras mentes y nuestros corazones", escribió Browne. "Podremos pensar que aislamos a Cuba con nuestro embargo y nuestras restricciones sobre viajes, pero somos nosotros, como estadunidenses, los que nos estamos aislando."

Browne agrega que "la política exterior estadunidense hacia Cuba es impopular en Estados Unidos, y por buena razón. Frena que estadunidenses viajen a Cuba y a cubanos que vengan a Estados Unidos. Nos frena para compartir medicinas con los enfermos y limita nuestra habilidad de vender alimentos a los que tienen hambre. Esta política es una reliquia anticuada de la guerra fría y sólo existe como pago político a los votantes cubanoestadunidenses que se inclinan hacia los republicanos en Miami".

Al señalar que Varela no representa la cara de la represión cubana, Browne dice que está triste ante el tratamiento de la disidencia política por el gobierno cubano, y que espera el día en el que ambos gobiernos permitan el libre flujo de sus ciudadanos entre los dos países. A la vez, comenta que los jóvenes cubanos respetan los logros de sus líderes, pero están ansiosos y listos para manejar sus propios asuntos. "Desean libertad para sí mismos e independencia para su país. Quieren que la nueva Cuba sea creada por el pueblo cubano, no por Estados Unidos."