PENULTIMATUM

Pugnas en el Vaticano por filme de Gibson

CON MOTIVO DEL estreno de La pasión de Cristo, comenzamos con la revelación de la semana: ''El Holocausto es todo o quizá no todo, pero sí la mayor parte una ficción. Auschwitz y los otros lugares que dicen que fueron de exterminio eran sólo campos de trabajo, pues en las cámaras de gas y crematorios era imposible matar a tanta gente. La mayoría de los judíos presuntamente exterminados en realidad huyeron a otros lugares. Están por todos lados en el Bronx, Brooklyn, en Sydney y Los Angeles. Los judíos son los eternos enemigos del cristianismo. Buscan una sola religión y un solo gobierno. Por eso es que atacan tan fuerte a la Iglesia católica, para tomar el control con su doctrina": Hutton Gibson, papá del actor Mel Gibson y, como éste, integrante de la ultraderecha cristiana.

NADA MEJOR QUE la anterior declaración como marco para comentar las pugnas en el Vaticano por la película de corte religioso más violenta filmada hasta hoy y que apunta a ser éxito comercial. Y es que cada día se logra saber con mayor precisión que la noticia de que el Papa la había visto y aprobado partió del portavoz de la Santa Sede, el influyente miembro del Opus Dei Joaquín Navarro Valls. Aunque el filme sí fue visto por el Pontífice, todo indica que éste no expresó comentario alguno que debiera hacerse público, y menos cuando la polémica sobre el antisemitismo del filme daba ya la vuelta al mundo.

SIN EMBARGO, EL daño estaba hecho pues el nunca probado apoyo pontificio dejaba en la práctica sin efecto el documento conciliar Nostra Aetate por el cual la Iglesia borró la acusación de deicidio que por cientos de años recayó sobre el pueblo judío y en el que se condena toda forma de antisemitismo. El Vaticano optó por evitar la polémica al grado de que resolvió aplazar indefinidamente la ''mesa redonda interdisciplinaria", el diálogo con otras religiones que organizaba para aclarar la posición del Papa y de la Iglesia frente a las acusaciones de antisemitismo y fundamentalismo lanzadas contra la cinta, su director y productores. La voz eclesiástica se dirigió entonces a recalcar que se trata de un gran filme ''que enriquece el alma de los creyentes", que irradia amor y tolerancia. O como afirma el culto Jorge Serrano Limón: ''Extraordinaria, bellísima y profunda que va a mover a muchos corazones al arrepentimiento".

MUY DISTINTO PIENSA la mayoría de la crítica cinematográfica. O Franco Zefirelli, el director italiano que hizo en televisión una magnífica serie sobre la vida de Jesucristo. Aunque aquél reconoce a Gibson como gran actor, también le señala su obsesión desenfrenada y morbosa por la violencia y la muerte.

CLASIFICADA EN MEXICO para mayores de 18 años por su violencia extrema, recomendamos a los que vayan a verla revisen con sumo cuidado sus boletos de entrada, pues los de un cine de Estados Unidos llevaban la marca de la bestia, el temible número 666, identificado con Satanás o el Anticristo.