José Angel Quintanilla sustituye a Gonzalo Araico en la presidencia de esa cámara

Reitera la Caniem su compromiso por defender la exención del IVA al libro

Adelanta que estarán atentos a las propuestas de la Convención Nacional Hacendaria

Seguiremos pugnando porque se incorpore en la ley la promoción de la lectura, anuncia

ARTURO JIMENEZ

Como cada dos años, la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem) realizó ayer una asamblea general para elegir a su presidente, por lo que Gonzalo Araico fue sustituido por José Angel Quintanilla.

El cambio de mando se hizo luego de que el año pasado la producción privada de libros se mantuvo en 130 millones de ejemplares, igual que en 2002, y que el logro principal de 2003 fue frenar el intento gubernamental de aplicarle el impuesto al valor agregado (IVA).

Combate a la piratería y la reprografía

Las prioridades ahora, expresa Quintanilla en entrevista, son defender el avance de la exención del IVA, impulsar un programa de promoción de la lectura y esperar que no surja un embate en la Convención Nacional Hacendaria.

Esa convención plural se realiza desde febrero para buscar una ''reorganización fiscal" que podría concretarse en abril y de ella, dice, ''puede salir cualquier cosa", en referencia a propuestas contra la industria editorial.

Pero también, incrementar la participación gremial de los editores de publicaciones periódicas y libros en la Caniem.

Además, atender problemas pendientes, como la piratería y la reprografía, por la que cada año se hacen 7 mil millones de fotocopias ilegales de volúmenes, revistas y periódicos, lo cual afecta el derecho de autor.

De igual manera, pendientes como el de lograr mayor participación de los editores privados en programas como el de bibliotecas de aula.

O el de conseguir mayor participación en la ''elaboración de los contenidos" de los libros de texto gratuitos, en su mayoría hechos por el Estado.

''Hacemos menos de 50 por ciento de la producción editorial de los contenidos que están en el mercado. Nosotros queremos incrementar nuestra participación ahí.''

El problema de la lectura

Hace tres días el nuevo presidente de la Caniem dejó la presidencia de la sociedad de gestión colectiva Centro Mexicano de Protección y Fomento de los Derechos de Autor (Cempro) para desarrollar su nuevo cargo, al cual considera en broma como ''la rifa del tigre" por los ''boteprontos que surgen de repente".

Quintanilla lleva más de 20 años en la industria editorial y más de 14 participando como consejero en actividades gremiales. Entre otras, ha estado en la Fundación Mexicana de Fomento a la Lectura y en la Asociación Nacional del Libro.

Entre los mayores problemas que Quintanilla observa se encuentra la ''grave deficiencia" en el hábito de lectura en el país. ''No tenemos estadísticas reales, pero el problema es amplio".

Recuerda que desde hace años la Caniem propone una ''ley general del libro", y asegura que la Ley de Fomento al Libro y la Lectura creada hace cuatro años es una ''presentación parcial" de lo que la cámara ha propuesto al Ejecutivo y al Legislativo.

''Seguiremos luchando como se ha estado haciendo en los recientes consejos de la cámara para que esa ley se complemente con esas partes que le faltan, como la promoción de la lectura, facilitación de la comercialización de los libros, el apoyo a ediciones y coediciones mexicanas o aspectos relacionados con las bibliotecas."

Además, agrega el dirigente editorial, para que dicha legislación se haga operativa, porque los órganos que ya deberían de funcionar no se han creado.

Otra propuesta de la Caniem que se encuentra en la Cámara de Diputados es la de regresar al apoyo de 100 por ciento de exención de impuesto sobre la renta, el cual se ha ido reduciendo 10 por ciento anual y en 2004 es de 20 por ciento y en 2005 será de 10 por ciento.

La condición es que las utilidades se reinviertan en la industria editorial mexicana, precisa el presidente de la Caniem.