Condena unánime al atentado contra José Murat

La violencia, enemiga de la democracia: Fox y Creel

El hecho enrarece aún más el clima político, coinciden

DE LA REDACCION

El atentado contra el gobernador de Oaxaca, José Murat Casab, concitó inmediatas reacciones de condena y la exigencia de que se halle a los responsables de la agresión.

El presidente Vicente Fox Quesada expresó, en un comunicado, su repudio al ataque y consideró que se trata de ''una afrenta contra la política, la convivencia social y las reglas propias de un estado de derecho''. Estableció asimismo que la violencia es la peor amenaza contra la democracia.

El mandatario dispuso que todos los órganos de seguridad del Estado otorguen apoyo institucional para las investigaciones, ''hasta asegurar la captura de los responsables de este reprobable hecho''.

En tanto, el secretario de Gobernación, Santiago Creel Miranda, condenó el hecho y manifestó que el gobierno federal "reprueba toda violencia en cualquiera de sus formas".

Manifestó que se comunicó con Murat Casab para ofrecerle su solidaridad y brindarle "toda la colaboración y apoyo" que fuese a necesitar en todos los órdenes, pero particularmente en las áreas de seguridad y de procuración de justicia.

Dijo que la dependencia a su cargo colabora para que de inmediato se establezcan todas las líneas de investigación posibles para dar con los culpables.

También en Bucareli, el subsecretario de Gobernación, Francisco José Paoli Bolio, llamó a un pacto político y cívico, "aunque sea virtual", para reducir las "agresiones" en todos los ámbitos y permitir que se mejore el ambiente rumbo a la celebración de los procesos electorales que tendrán lugar este año en 14 estados.

Consideró que el atentado es "sobreaviso de que pueden venir cuestiones más graves", y planteó reforzar la seguridad de servidores públicos y candidatos. Añadió que el ambiente "se ha venido calentando a la luz de los videos y de las denuncias''.

La repulsa también provino de los partidos políticos. El dirigente nacional del PRI, Roberto Madrazo Pintado, demandó a autoridades y cuerpos de seguridad pública federal y estatal una exhaustiva investigación a fin de lograr la aprehensión de los responsables.

Sostuvo que la directiva tricolor respalda la tarea del gobernador, quien a lo largo de su administración ha dado "muestras fehacientes" de impulsar el desarrollo de su estado y el avance democrático.

El PAN igualmente apremió al esclarecimiento de los hechos y a una expedita investigación que delimite responsabilidades y castigue a los agresores.

La Suprema Corte y el Consejo de la Judicatura Federal lamentaron el atentado y condenaron la violencia en cualquiera de sus formas.

En Acapulco, donde se reúnen los banqueros, representantes del sector privado reprobaron lo sucedido a Murat Casab y exigieron ''castigo ejemplar a los responsables''. Manuel Medina Mora, presidente de la Asociación de Bancos de México, aseguró que el ataque es un hecho aislado que no perturba la estabilidad macroeconómica que prevalece en el país.

El responsable de las relaciones entre la Iglesia católica y las instancias gubernamentales, Abelardo Alvarado Alcántara, advirtió que un clima viciado en la política es sumamente peligroso para la democracia.

En Oaxaca, integrantes del Consejo Ciudadano de Unión Hidalgo y del Consejo Indígena Popular coincidieron en que el intento de homicidio contra el mandatario local es reflejo de la situación de ''inseguridad y grave violación'' a los derechos humanos prevaleciente en el estado.

También la Confederación Nacional Campesina (CNC) condenó el atentado y demandó al gobierno federal una investigación a fondo.