Modernizar la trova es arruinarla, expresa el contratenor que realiza gira por México

El rap ha venido a destruir la melodía latinoamericana: Armando Garzón

"El bolero es la canción de arte de AL y los cubanos nos preciamos de que fue creado por un santiaguero" Hoy se presenta en la plaza Aranzazú, de San Luis Potosí, y el 19, 20 y 21 en el DF

JUAN JOSE OLIVARES

El cubano Armando Garzón es un contratenor dotado de una voz privilegiada, suave y tersa. El bolero, al cualconsidera "la canción de arte latinoamericana", es el género que más interpreta, pero no de forma convencional: lo adereza con armonías de son, vieja trova santiaguera y danzón. Es un "provocador" que ha experimentado en tres discos con todos esos acordes, y ahora tiene el proyecto de interpretar textos de escritores españoles del Siglo de Oro, pero a manera de boleros.

Por lo pronto, el llamado Angel Negro de Voz de Terciopelo presentará en México, junto con su quinteto de Santiago de Cuba -incluido el gran compositor santiaguero Alejandro Almenares, autor de la pieza Mueve la cintura, que incluirá en su nuevo disco Omara Portuondo-, un repertorio de boleros cubanos de la vieja trova poco conocidos, así como sones y uno que otro danzón, interpretados con instrumentos de trova. Los conciertos serán hoy en la plaza Aranzazú, de San Luis Potosí; en el Distrito Federal serán el viernes 19 y el sábado 20 en El Bataclán, de la Condesa, y el domingo 21 en la explanada de la delegación Iztacalco.

"No quiero hacer los boleros como una cosa fiambre, gastada, perdida; nosotros no les damos ese tratamiento. Hacemos mutaciones atrevidas, lo que habla de una modernidad un tanto desaforada, pero que demuestra que esta música (el bolero), como lenguaje, tiene permanencia. Que se hayan hecho con parámetros antiguos no quiere decir que sean canciones viejas", comenta Garzón en un ensayo, durante el cual hasta el sudor de los músicos de Santiago y el propio parecen tener ritmo.

Y agrega: "Mi idea del bolero es que es la canción de arte latinoamericana y los cubanos nos preciamos, Santiago en particular, de que fue creado por un santiaguero, Pepe Sánchez, pero ha tenido el encanto de que ha sido interpretado por cantantes de toda América. En Santiago, como estamos en el centro del volcán, la música se explica sola. Hay gente que aún no comprende estas mutaciones, pero la idea no es repetir, sino provocar. Había que mortificarlo con algo, torcerle el brazo para que digan la versión de Garzón me gusta o no me gusta".

Garzón se inició en el Coro Orfeón de Santiago, con el que interpretó repertorio universal y arias. Ha actuado en otras seis ocasiones en México en foros como el Zócalo (donde reunió a miles cantando al lado de la danzonera de Felipe Urbán), en los que ha mostrado eclécticos arreglos de sus tres discos: Boleros (que grabó junto con Pablo Milanés), Danzón y Escándalo. El artista aprendió canto con un profesor clásico de nombre Daniel Vázquez; qué curioso: fue él quien más le insistió en que cantara boleros.

Garzón expresa: "Muchos han querido modernizar la trova, pero no es algo que se modernice, o sea que para establecer un puente de comunicación con una audiencia más reciente lo conveniente es darle unos códigos más contemporáneos. La canción es la canción, no se le cambia nada ni de la música ni de la letra, simplemente se le hacen algunos aditivos en armonías buscando establecer códigos con ese público que ya tiene otro bagaje musical".

Garzón es un artista crítico. "Muchos cantantes en algún momento determinado han cantado bolero. Hay boleros buenos que son canciones de arte, pero hay otros boleros de deformación comercial, que se pudren, porque ni siquiera son malos, es música podrida."

Estilo particular en los géneros cubanos

Abunda: "De todas maneras el bolero se mantiene como un estilo muy particular y dentro de los géneros cubanos, es el que más evolución ha tenido. Hay canciones que, aunque fueron escritas hace 60 años, su contexto se repite. Pareciera que las escribieron el año pasado. El tipo de texto que busco para establecer esa comunicación es una canción que independientemente de la época en que haya sido concebida todavía diga algo, que no tenga tiempo ni espacio. Esas son las canciones inmortales. Los boleros son atemporales".

Armando Garzón es considerado por muchos la mejor voz de Santiago, donde dice "el bolero sigue teniendo su nicho".

No obstante, asevera: "Diré un disparate: el problema es que la Casa de la Trova, en Santiago, producto de esa oleada de cosas comerciales y de moda, ya en vez de ser un lugar donde uno fuera a escuchar la trova se han metido a modernizarla y a cambiarla, y en esos cambios y modernizaciones, muchas veces, las canciones salen perdiendo. Por ejemplo, este grupo que traigo, el Quinteto de la Trova, mantiene la línea, pero aún está el síndrome post salsa. Todo el mundo quería parecerse a Oscar de León y a Celia Cruz. Es curioso porque es como si uno se viera en un espejo y esa imagen saliera de él y paseara, y luego cuando entra a tu casa uno trate de parecerse a la imagen que estaba en el espejo. ¿Uno imitándose a uno mismo?"

Y también comenta sobre el rap, de tanta efervescencia en la isla hoy día. "No sé si han tenido una epidemia de rap. Como hay mal bolero hay mal rap, y lo malo es que siempre son las cosas que se le ponen a uno por la radio, mañana, tarde y noche. Creo que el rap, en general, ha venido a destruir la melodía latinoamericana." Por eso, él se sabe cantador de boleros "de toda la vida; los boleros me llevaron a la música religiosa y de ésta volví a los boleros, aunque realmente yo no separo la música, la música es la música".

El cantante asegura que los primeros compositores hicieron música culta de corte popular. "Llegaron a usar la gran orquesta como medio de expresión, hicieron óperas y también hicieron canciones populares. Lo más interesante de esas óperas es que tienen guarachas, danzones. El caso más notable es el de Lecuona."

Sobre su proyecto de hacer recitales con textos de literatura española del Siglo de Oro, dice: "Uno se pone a leer la poesía del Siglo de Oro español y se da cuenta de que de ahí es de donde viene la letra de los boleros. Se vería, evidentemente, por qué escojo en mi repertorio determinada letra".

Acompañarán a Garzón el percusionista y vibrafonista Hiraldo Garrido; Alejandro Almenares, en la guitarra requinto; Lorenzo Mazo, en la guitarra; Nolvis Calzado, en el clarinete, y Francis Freites, contrabajo. Todos son profesores de la escuela de arte de Santiago, menos Almenares, músico de tradición popular santiaguera, o sea, un maestro.