México D.F. Jueves 18 de marzo de 2004
Ahora el sindicato "es un ejemplo de democracia
y unidad", asegura la profesora
Consumado: Gordillo, presidenta del SNTE
Sin la participación de la disidencia, la reforma
estatutaria se llevó a cabo "a modo"
CLAUDIA HERRERA BELTRAN ENVIADA
Tonatico,
Mex., 17 de marzo. El besamanos de delegados comenzó antes de
que concluyeran las votaciones. Elba Esther Gordillo fue ungida esta noche
presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación
(SNTE) por cuatro años, en un proceso de elección de trámite,
sin la participación de disidentes y en el cual se reformaron los
estatutos "a modo".
En su primer mensaje, la nueva lideresa aseguró
que no busca "el poder por el poder", y dijo que ahora el SNTE es un ejemplo
de democracia y de unidad. "Basta de descalificaciones de que somos corruptos
y sinvergüenzas, porque estamos cambiando".
Exaltada y casi a punto de llorar, señaló
que deja de ser líder moral para convertirse en líder estatutaria.
"No me escondo, no me oculto, aquí estoy y doy la cara. No soy indestructible,
soy un ser humano de carne y hueso y aquí estoy en mi casa".
Anunció que promoverá la reforma del ISSSTE
y que para ello construirá una alternativa responsable para que
el instituto sea "eficaz para los trabajadores de la educación".
En el papel, la relección no existe en el SNTE,
pero con el proceso de hoy Gordillo llegaría a cumplir 10 años
al frente del gremio magisterial, los primeros seis como secretaria general
(1989-1995) y los próximos cuatro como presidenta, cargo que se
inventó para permitir su regreso como dirigente del sindicato.
Un día después de que se le otorgó
licencia en la Cámara de Diputados, Gordillo se refugió en
el SNTE, en lo que sus incondicionales calificaron como un "repliegue táctico",
y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE),
marginada del congreso, definió como un "charrazo".
Rafael Ochoa Guzmán en los hechos fue relegido
al ocupar la secretaría general ejecutiva, otro puesto de nueva
creación que se encargará de la "operación del sindicato",
lo que le permitirá prolongar su mandato cuatro años adicionales
a los tres que ya lleva.
Congreso fast track
El retorno de Gordillo fue posible en un congreso fast
track. Sólo se presentó una planilla, llamada de unidad.
A pesar de que varios profesores comentaban que habían depositado
votos en contra o en blanco, al final los dirigentes del gremio afirmaron
que hubo unanimidad. De un total de 2 mil 850 delegados, 2 mil 797 se pronunciaron
en favor y 12 anularon la papeleta.
Para dar la imagen de sindicato plural, antes de la presentación
de la planilla la dirigente del Movimiento Democrático Nuevo Sindicalismo,
Emma Rubio, y un representante de la sección 18 de Michoacán
-que se asegura es financiado por el SNTE- subieron al presidium para manifestar
su respaldo a Gordillo.
El temido momento de la toma de protesta de Elba Esther
en el que se preveían algunas manifestaciones de rechazo e incluso
rechiflas se logró evitar, debido a que Ochoa y su equipo se reunieron
con los secretarios generales de las secciones sindicales para darles la
orden de que convencieran a sus delegados que "se portaran a la altura".
El hotel Rancho San Diego, el más lujoso de esta
ciudad, se convirtió en el cuartel de Gordillo, donde se entrevistó
con las distintas fuerzas para acordar la integración del nuevo
comité ejecutivo. Por la tarde, la secretaria general del PRI se
ausentó para asistir a una comida con gobernadores en Valle de Bravo.
A su regreso ya la esperaba uno de sus colaboradores más
cercanos, el diputado priísta Miguel Angel Yunes, quien luego de
expresarle su respaldo en esta nueva etapa en el SNTE, acompañó
a la profesora a la ceremonia donde rindió protesta de su nuevo
cargo.
"Cambio para no cambiar"
Contrario a lo que los dirigentes institucionales habían
presumido, no hubo avances importantes en el tema de la proporcionalidad.
Con el estatuto anterior, el máximo de secretarías que una
minoría podía obtener en el Comité Ejecutivo Nacional
o en alguna sección sindical era de siete, pero ahora será
de 10 en el primer caso, y de nueve en el segundo.
El principal cambio consiste en que las carteras se repartirán
según el número de agremiados de cada sección sindical.
Por ejemplo, en las que tengan menos de 10 mil afiliados, la primera minoría
que alcance una votación de 15 a 30 por ciento recibirá cinco
secretarías y dos adicionales si supera 30 por ciento.
Las secciones con un número de entre 10 mil y 30
mil agremiados asignarán ocho secretarías a otras expresiones,
y las que superen los 30 mil afiliados repartirán nueve.
Producto de la reforma de los estatutos, el SNTE también
acordó una especie de corporativización de todo tipo de organizaciones
sociales. Señala que promoverá la constitución de
agrupaciones de padres de familia, jóvenes, mujeres, adultos en
plenitud, grupos con capacidades diferentes que se unirán al sindicato
con carácter de adherentes.
También impulsará la afiliación individual
o colectiva de trabajadores de la educación que no sean parte del
sindicato. Con ello se propone atraer la clientela de maestros de
escuelas privadas que actualmente no participan en el sindicato.
En el papel, la reforma otorga mayor autonomía
a los comités nacionales de Vigilancia, Electoral y de Acción
Política, pero en la práctica estas estructuras siguen copadas
por los gordillistas.
Los estatutos reformados también introducen las
figuras de revocación del mandato de los dirigentes, el plebiscito
y el referéndum, pero su aplicación será decisión
exclusiva de los consejos nacionales o congresos nacionales, órganos
de gobierno que son controlados por el grupo de Gordillo.
Los nuevos estatutos señalan que se puede demandar
la revocación del mandato de un dirigente sindical sólo cuando
existan casos probados de violaciones graves al estatuto, se atente contra
la unidad del gremio, se demuestre incapacidad e ineficiencia en perjuicio
de los representados o se incurra en casos de corrupción u otro
tipo de conductas que erosionen la honorabilidad de los trabajadores de
la educación.
El plebiscito será una "forma excepcional de consulta"
sobre asuntos de orden político sindical que requieran del punto
de vista de la mayoría de los agremiados y se convocará a
propuesta de la cúpula sindical con la aprobación del consejo
y el congreso nacional del gremio.
También se incorpora el reférendum como
procedimiento excepcional de consulta sobre asuntos normativos que por
su trascendencia requieran de la amplia participación de los sindicalizados.
El SNTE tampoco llegó lejos en el tema de la votación
universal directa y secreta para elegir a sus dirigentes seccionales y
nacionales, porque se le reconoce sólo como una "forma más
de elección".
Ante las críticas de algunos delegados que preferían
este tipo de votación como método único, los institucionales
respondieron que "es un asunto de política y no de matemáticas",
y que había riesgos de intromisión externa en el sindicato
por medio del financiamiento de campañas por parte de empresarios
o gobernadores.
A la Declaración de Principios, el SNTE le dio
una remozada léxica con la inclusión de términos bien
vistos, como el de "proclamarse contrario a toda forma de discriminación,
explotación e intolerancia" o "declararse en favor de la libre autodeterminación
de los pueblos".
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