Lo sustituye Florencia Serranía, hasta ayer titular del Servicio de Transportes Eléctricos

Remueven a González Garza de la dirección del STC-Metro

El cambio, a una semana de que el funcionario reconoció en la ALDF que el servicio a los usuarios "no es bueno" y que el organismo enfrentará dificultades por el recorte presupuestal

LAURA GOMEZ FLORES

Javier González Garza fue removido ayer como director del Sistema de Transporte Colectivo (STC)-Metro, y en su lugar fue designada Florencia Serranía Soto, quien se desempeñaba como titular del Servicio de Transportes Eléctricos, donde quedó al frente Jaime López.

González Garza se incorporará a la coordinación de asesores de la jefatura de Gobierno, donde participará en la elaboración del Plan Integral de Transporte.

El secretario de Gobierno, Alejandro Encinas Rodríguez, anunció la conformación de un consejo consultivo honorífico, encabezado por los ingenieros Gilberto Borja Navarrete y Gerardo Ferrando Bravo, que se encargará de supervisar el funcionamiento del Metro.

El relevo se realiza una semana después de que González Garza reconociera ante los integrantes de la Comisión de Transporte y Vialidad de la Asamblea Legislativa, que el servicio proporcionado a los usuarios del Metro "no es bueno", y que el STC enfrenta desde hace tres años conflictos con el Sindicato Nacional de Trabajadores del organismo, encabezado por Fernando Espino Arévalo, quien como diputado federal votó por una reducción del techo de endeudamiento del Gobierno del DF, lo cual redujo el presupuesto para este medio de transporte en mil 633 millones de pesos.

Lo anterior, dijo González Garza, provocará que este año sólo llegue uno de los 45 trenes nuevos programados, cuando la meta era que a partir de octubre se recibieran en promedio 1.5 por mes, pero "ahora estamos en una situación difícil, porque de no contar con los 10 mil millones de pesos requeridos para el próximo año, se suspenderá el contrato, con los costos que ello implica, y no se podrá continuar con la rehabilitación y ampliación del servicio".

En conferencia de prensa, convocada de última hora, Encinas y González Garza rechazaron que el cambio haya obedecido a "diferencias con (el jefe de Gobierno) Andrés Manuel López Obrador", y lo atribuyeron a "la culminación de un ciclo y la posibilidad de trabajar en un proyecto integral que solucione los problemas de infraestructura que tiene la ciudad".

González Garza precisó que desde julio del año pasado había analizado la posibilidad de "entrar a otro tipo de labor", sin que ello significara un rompimiento con el mandatario capitalino, quien en todos los problemas que enfrentó en el Metro, como la suspensión del servicio en agosto de 2002, lo respaldó, y lo asumió como un asunto de gobierno. "Creo necesarios estos cambios para lograr que otras gentes puedan jalar el asunto de forma más rápida y consistente", abundó. También aclaró que su relevo "no es producto de las presiones del sindicato, con el que hemos pretendido que todas las diferencias se zanjen en un ámbito estrictamente laboral, en la Junta Local de Conciliación o en el tribunal federal".

El secretario de Gobierno pidió no "especular", y precisó que se mantendrá la misma relación de pleno respeto a los derechos de los trabajadores y a la autonomía del sindicato, y se procurará el mejoramiento de sus condiciones salariales y laborales.

Recordó que en tres años se han otorgado aumentos salariales por encima de la inflación, para lograr una recuperación real de los sueldos y las prestaciones, vigilando que lleguen directamente a los trabajadores, sin desvíos ni intermediarios, y "estaremos muy atentos a que en ningún momento en el sindicato se realicen acciones extralaborales que puedan afectar la prestación del servicio, y en eso actuaremos con toda energía".

González Garza recibió el encargo de elaborar un plan integral que considere el proyecto del tren suburbano, la modernización y el mantenimiento del Metro, la ampliación de vialidades, la apertura de nuevas rutas de superficie y la posibilidad de construir una nueva línea del Metro, indicó.

La nueva directora del STC reconoció que su labor será difícil, pero dijo sentirse capaz de solucionar cualquier problema técnico, con el apoyo de los demás directivos de ese organismo, pues "solamente cambia de conductor y sigue el mismo tren dando servicio a los capitalinos", en un ambiente laboral de respeto y diálogo.