Médico militar amenazó con acusar a la enferma ante los padres de familia

Expulsan de escuela privada a una menor en Acapulco contagiada de sida

En Querétaro, denuncian a religiosa por cometer abusos contra varios niños

MISAEL HABANA Y MARIANA CHAVEZ CORRESPONSALES

Una menor de seis años de edad fue "expulsada" del colegio privado Instituto México, ubicado en Acapulco, Guerrero, por ser portadora del VIH/sida, debido a las presiones de un médico militar que amenazó con divulgar entre los padres de familia del grupo que la pequeña "tiene sida y es una amenaza para la salud de sus compañeros".

Arturo Vázquez Pedraza, miembro del Grupo Amigos con VIH (GAVIH), responsable de la Casa Sarita, donde se atiende a portadores del virus y a enfermos de sida, dijo que la menor fue expulsada del plantel por presiones de Román Salgado Galván, médico militar y padre de uno de los escolares, argumentando que el "sida se contagia por medio de la saliva".

A pesar de que Jazmín de Jesús, la niña huérfana, cuyos padres murieron de sida hace algunos meses, mantenía en el "anonimato" su tratamiento en Casa Sarita, el médico propietario de la clínica California alertó a los directivos de la escuela privada en la que estudian sus hijos de que la menor "tenía sida por que la había visto salir varias veces de Casa Sarita".

El militar amenazó a los directivos del colegio, al que asiste la clase media de este puerto, "con hacer un escándalo si mantenían su posición de tener a la niña, además de convencer al resto de padres de familia de sacar a sus hijos de esta escuela", aseguró Vázquez Pedraza.

En enero pasado, por las presiones del médico, la directora del Instituto México, Olga Espinobarro, la expulsó de la escuela, por lo que desde esa fecha la menor infectada asiste a otro plantel.

Por otro lado, José Cruz Galván Olvera y Zumaya Malagón, denunciaron que la religiosa llamada Ana, que labora en la escuela particular Margarita Morales, ubicada en la ciudad de Querétaro, cometió abusos "denigrantes" contra su hija, así como en perjuicio de otros niños, al obligarlos a que "comieran su propio vómito".

Mediante una carta que turnaron a la directora jurídica y procuradora de los Derechos Educativos de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Guadalupe Cabeza Aguilar, y al director de Educación en la entidad, Gustavo Sandoval Gómez, solicitaron su intervención para que esta "acción tan humillante" no quede impune.

Explican que desde finales del año pasado recibieron varios comentarios de personas que habían sacado a sus hijos de ese colegio de educación primaria, por presuntos maltratos contra los niños.

"La semana pasada otra compañera me dijo que ella ya no dejaba a su hijo en el horario de comida, porque el niño le había comentado que había visto que la madre Ana obligaba a los niños que vomitaban porque no les gustaba la comida del día, a que comieran su propio vómito".

Agregan que le preguntaron a su hija si había observado lo anterior, y la menor contestó: "Sí mami, yo lo he visto".

Sin embargo, comentan que el domingo pasado, su hija llorando les dijo que a ella también le hicieron lo mismo cuando le dieron de comer chayotes con crema. "No me había dicho nada porque la madre la amenazó con expulsarla, y ella pensaba que yo me iba avergonzar".

Advierten que su hija ya no continuará estudiando en el colegio, y tras buscar una explicación en la dirección de la escuela donde la menor cursaba el primer año de primaria, "negaron que la madre Ana hubiera hecho algo tan denigrante".

Al respecto, la secretaria de Educación en la entidad, Guadalupe Murguía Gutiérrez, indicó que a petición de esta dependencia los padres de la niña interpusieron la denuncia formal ante la Procuraduría de Defensa del Menor y la Familia, para iniciar las investigaciones.

Además, informó que la misma dependencia, mediante el departamento jurídico, también realizará las investigaciones correspondientes. Por lo pronto, "estamos haciendo reuniones con los padres de familia, de la escuela, a quienes se pidió presentar formalmente su queja".

Asimismo, indicó que buscarán reubicar a los niños en otro centro escolar si los padres de familia lo consideran pertinente.