México D.F. Viernes 6 de febrero de 2004
Reitera Paul Bremer que el 30 de junio será
traspasado el poder a los iraquíes
Ileso, el ayatola chiíta Ali al Sistani en un
intento de asesinato en Najaf
Protesta la policía de Kirkuk por detención
de siete agentes por fuerzas estadunidenses
AFP Y DPA
Najaf, 5 de febrero. El ayatola Ali al Sistani,
considerado la principal autoridad religiosa de los chiítas de este
país, salió ileso de un intento de asesinato ocurrido en
esta localidad, al tiempo que el administrador civil estadunidense en Irak,
Paul Bremer, reiteró que el traspaso del poder a los iraquíes
se realizará el próximo 30 de junio.
Un
comando armado abrió fuego esta mañana contra Al Sistani,
de 73 años, cuando saludaba a un grupo de personas.
No trascendió si miembros de la comitiva del jefe
religioso resultaron heridos en la acción, ocurrida un día
antes de la llegada de una comisión de la Organización de
Naciones Unidas (ONU) que evaluará las condiciones para unas posibles
elecciones en el país ocupado.
El ayatola ha pedido reiteradamente a las autoridades
de ocupación que organicen elecciones generales en lugar de la organización
de asambleas regionales que promueve Estados Unidos.
En declaraciones publicadas este jueves por el diario
londinense en lengua árabe Al Hayat, Al Sistani se pronunció
por la creación de un futuro gobierno plural y aceptó que
apoyaría como jefe de gobierno a un no chiíta si éste
ganara las elecciones.
"Es importante que los iraquíes de todas las clases
y grupos se sientan representados. Nadie tiene el derecho de ser injusto
con ningún grupo por su clase, religión o posiciones políticas
y religiosas", sostuvo el clérigo chiíta.
En Washington, responsables del Departamento de Estado
sugirieron que se podría posponer el traspaso del poder a los ira-quíes
si la ONU lo recomienda.
Pero Paul Bremer desmintió la versión al
ratificar que Estados Unidos se compromete con el acuerdo del 15 de noviembre
de 2003, según el cual el poder sería traspasado a los iraquíes
el próximo primero de julio.
En Erbil, el Parlamento autónomo kurdo sesionó
por primera vez desde los atentados del domingo anterior, que dejaron 115
muertos y decenas de heridos.
Los kurdos discutieron cómo extender su región
autónoma hasta la ciudad petrolera de Kirkuk, y a la vez aumentar
su influencia en el futuro gobierno iraquí.
Por otro lado, en la norteña ciudad de Kirkuk la
policía local protestó por la detención de siete agentes
iraquíes por las fuerzas de ocupación estadunidense, acusados
de colaborar con la resistencia.
Los estadunidenses acusan a los policías de filtrar
información a la guerrilla, que utiliza en su lucha para expulsar
del país árabe a las fuerzas de ocupación.
Por último, en la localidad de Fallujah dos jóvenes
acusados de colaborar con las fuerzas estadunidense y británicas
fueron asesinados por hombres encapuchados, reportó la policía
local.
|