México D.F. Viernes 9 de enero de 2004
El deceso ocurrió en el Metro; según sus padres, se le negó atención de urgencia
Fallece un bebé por deshidratación luego de salir del hospital de La Villa
Fue sacado del nosocomio por sus familiares, sin autorización: Secretaría de Salud
LAURA GOMEZ Y AGUSTIN SALGADO
La Secretaría de Salud del Distrito Federal se deslindó de la muerte de un bebé de 10 meses dentro de la estación Indios Verdes del Metro, cuando sus padres intentaban trasladarlo a otro nosocomio luego de que, según declararon más tarde, se les negó atención médica en el área de urgencias del hospital pediátrico de La Villa.
Los padres del niño, María de los Angeles Escobar y Alejandro Montero Ascencio, de 24 y 28 años de edad respectivamente, ingresaron al Metro con la intención de dirigirse al hospital infantil de Tacubaya, pero antes de abordar el transporte su hijo murió.
El fallecimiento de Guillermo Montero Escobar ocurrió minutos después de las 10 de la mañana. Fueron infructuosos los esfuerzos del personal de seguridad del Metro, usuarios y elementos de la Policía Auxiliar. Al lugar acudió una ambulancia del Servicio Médico Forense (Semefo) para recoger el cuerpo y trasladarlo al anfiteatro de la agencia 13 del Ministerio Público, mientras los padres se presentaron en la agencia 50, ubicada en la estación Martín Carrera, para presentar su declaración.
Por la tarde, la Secretaría de Salud informó que el niño, proveniente del municipio de Ecatepec, estado de México, fue llevado por sus padres la madrugada de ayer al hospital pediátrico de La Villa, debido a que presentaba un cuadro clínico de deshidratación, y se le suministró suero oral como corresponde en estos casos. La dependencia explicó que a esa hora, alrededor de las 6:30, se presentaron de manera simultánea otros casos de "extrema urgencia", al ingresar otros dos bebés en estado crítico; uno con paro cardiorrespiratorio y otro con neumonía, por lo cual fueron atendidos de inmediato, junto con Guillermo Montero.
Sin embargo, los padres del pequeño decidieron trasladarlo a otro sitio para que recibiera atención médica, pese a que ningún miembro del personal médico se lo recomendara, y la rapidez con que actuaron impidió llenar los registros y la carta responsiva correspondientes, así como complementar el tratamiento y la valoración médica del paciente.
La determinación de los padres, explicó la dependencia en un comunicado de prensa, derivó en el fallecimiento del niño dos horas más tarde, según consta en la información proporcionada por la procuraduría capitalina, que inició la investigación respectiva para establecer si el personal médico no cumplió con su trabajo y/o recomendó trasladar al pequeño a otro nosocomio, para deslindar responsabilidades.
Tras lamentar los hechos, la secretaría exhortó a la población que acude a la red de hospitales del gobierno capitalino a que en esas situaciones no abandone los centros de salud sin completar el tratamiento y la valoración médica.
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