Estamos acostumbrados a enfrentar situaciones adversas, afirma el gobernante

Descarta López Obrador alzas en impuestos o ajustes al presupuesto

Los de la llamada clase política no nos ven con buenos ojos; sólo están pensando en el 2006, dice No van a detener nuestro proyecto; vamos a seguir gobernando con honradez y austeridad

ANGEL BOLAÑOS SANCHEZ

La reducción del techo de endeudamiento solicitado por el Gobierno del Distrito Federal (GDF) de 2 mil 500 a 500 millones de pesos fue una decisión de índole política en la Cámara de Diputados, donde "todo mundo está pensando en el 2006", afirmó el jefe del Ejecutivo local, Andrés Manuel López Obrador, quien descartó tener que recurrir a aumentar o crear nuevos impuestos por esta situación.

Aseguró que las finanzas de la ciudad tienen blindaje con la política de austeridad republicana, y si bien se retrasará el inicio de algunas obras, garantizó que no habrá recortes a los programas sociales, como la pensión universal a personas adultas mayores, los apoyos a discapacitados, los servicios médicos y medicamentos a personas que carecen de seguridad social, así como la construcción de vivienda, entre otros.

"Vamos a salir, estoy optimista: ahora sí que el frío nos hace lo que el viento a Juárez", afirmó el mandatario capitalino.

Reconoció que se tenía contemplada la posibilidad de que no se autorizara ese techo de endeudamiento, aun cuando se trata del monto más bajo que se ha solicitado en los últimos 15 años; "sabíamos que podían tomar algunas medidas pensando en el 2006, porque no nos ven con buenos ojos, desde luego los de la llamada clase política", pero aseguró que ya se tiene contemplado cómo ir compensando la privación de dichos recursos.

López Obrador recordó que no es la primera vez que su administración enfrenta situaciones adversas, pues en los primeros tres años de su gobierno la mayoría de los diputados de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal se aliaron en su contra y le pusieron candados, pero aún así continuó trabajando.

"Este proyecto se ha echado a andar y no se va a detener, vamos a lograr el propósito de acreditar una nueva forma de gobernar con honradez y austeridad", apuntó.

Asimismo, aprovechó para enviar un mensaje a los habitantes del Distrito Federal: "quiero decirles que tenemos recursos para ayudar a la gente humilde; para garantizar los recursos básicos de la ciudad; que no va a faltar el agua; vamos a seguir dando mantenimiento al drenaje; se van a seguir construyendo las obras que son indispensables para mejorar la vialidad y evitar tantos problemas de congestionamiento de tránsito".

Refirió que en el Código Financiero se establecieron algunos mecanismos para mejorar la recaudación y combatir la evasión fiscal, como la instalación de medidores a los grandes consumidores de agua. Destacó el apoyo de la gente, que cada vez paga con mayor oportunidad sus impuestos, lo que da fortaleza económica y financiera a su gobierno.

Afirmó que si bien no se van a sacar los 2 mil millones de pesos no otorgados, por lo menos se obtendrá una cantidad cercana.

Entre los proyectos de obras que aseguró que no se detendrán destacó los que anunció apenas la semana pasada para inyectar agua a los acuíferos; los puentes de avenida del Taller y Fray Servando, así como el deprimido de Marruecos, que complementan la obra del distribuidor vial Heberto Castillo; el hospital general de Iztapalapa; los contratos para adquirir nuevos trenes del Metro, que incluso podría adelantarse un mes la entrega del primer tren, en agosto, en tanto que las obras de rehabilitación del Centro Histórico acaso podrían iniciar con una inversión menor de la prevista, pero al final del año se habrá invertido el monto total previsto.

Por esto, indicó, no hay motivo para dar mensajes de desaliento, "vamos a salir adelante, la clave está, siempre lo he dicho y lo repito ahora, en evitar la corrupción y en ahorrar evitando los dispendios del gobierno".