Convoca el Centro de la Imagen a la versión 11 de la Bienal de Fotografía

Critica Castellanos la ''insuficiente profundidad'' del fotoperiodismo

Los artistas jóvenes tienden a un diálogo más fluido con las imágenes globales, expresa

MERRY MAC MASTERS

La fotografía en México experimenta un momento ''afortunado'' por su tradición y peso social y cultural significativos, pero desde una posición ''más crítica'' existe un hueco en lo que concierne a la foto como documento, testimonio, en fin, el fotoperiodismo que no se realiza con ''suficiente profundidad", señala Alejandro Castellanos, director del Centro de la Imagen, entrevistado con motivo de la emisión de la convocatoria de la versión 11 de la Bienal de Fotografía.

Para Castellanos hoy día se desarrolla un proceso de cambio dentro de la fotografía, parecido a muchas de las situaciones que ocurren en el país. Esto, anota, tiene que ver con ''un momento previo que predominó en el siglo XX, que era una idea muy ligada a lo nacional, a una identidad establecida. De Manuel Alvarez Bravo hasta Mariana Yampolsky se puede ver todo el peso y la calidad de esa producción". Y como sucede en muchas áreas de la cultura, en especial en las artes visuales, ''los artistas jóvenes tienden a mantener un diálogo más fluido con las imágenes globales".

Redescubrimiento de Manuel Ramos

''Estamos justo en ese momento -prosigue Castellanos- en el cual, por un lado, las nuevas tendencias tienen que ver con esa visión menos ligada a una identidad específica, pero por el otro, la ventaja es que, al menos aquí, ante el peso de este imaginario desarrollado sobre todo en el siglo XX, se mantiene un contrapeso a la otra línea que está desarrollándose, más que nada mediante la investigación, como en el caso de Manuel Ramos, pues se redescubren autores extraordinarios.

''Lo que sí se ha dado en los años recientes es un mayor alcance de los proyectos de investigación, de renovar la mirada sobre lo que ha sucedido en México". Esta situación no se limita a la capital, sino que es válida para otros lugares del país.

En cuanto a la Bienal de Fotografía, ésta se mantiene como un espacio de ''mucha convocatoria", en especial para las personas jóvenes que desean ''consolidar su carrera como artistas".

Aparte de los dos premios de adquisición del certamen, de 75 mil pesos cada uno, los participantes seleccionados pasarán a una segunda etapa en la que dispondrán de un laboratorio para producir sus trabajos, si así lo desean, lo cual es una novedad, ya que los apoyos siempre serán ''insuficientes".

El 2 de septiembre de 2004 se emitirá un aviso que dará a conocer el nombre de los ganadores. Cabe apuntar que a cada premiado, por primera vez, se le entregará una impresora, un kit de cartuchos y un escáner. Los premios serán entregados en la ceremonia de apertura de la muestra de esa bienal el 9 de septiembre y posteriormente itinerará dos años por el país.

Con el propósito de reconocer a los autores cuya trayectoria haya sido sobresaliente en los dos años anteriores, en paralelo a la Bienal de Fotografía se convocará al premio Fotógrafo Revelación dirigido a personas de hasta 35 años. Este galardón es promovido por PhotoEspaña y el Centro de la Imagen, tanto para un autor español como para uno mexicano quienes tendrán una exposición que se presentará como parte de la bienal.

Muestra sobre el icono del Che Guevara

Por otro lado, Castellanos se refirió al programa del Centro de la Imagen para 2004, institución que el próximo 4 de mayo cumplirá una década de actividad. Entre los grandes proyectos menciona que para marzo habrá una exposición de fotografía contemporánea en Alemania, con la colaboración del Instituto Goethe. Vendrá, luego, una muestra de fotografía latinoamericana, que en la actualidad se presenta en España, junto a la cual se organizará un foro para debatir sobre los 25 años de la realización de los primeros coloquios de la región y se cerrará el año con un par de proyectos relacionados con la investigación, como es el caso de Natalia Baquedano, primera mujer en instalar un estudio fotográfico en México (1890), y de Elsa Medina.

Asimismo se tiene prevista una exposición, con la curaduría de Trisha Ziff, sobre el icono del Che Guevara, es decir, todo lo que ha sucedido a partir de la imagen mítica captada por la lente de Alberto Korda, cómo ha circulado y cuáles han sido sus efectos. Para el primer semestre de 2004 se espera la circulación del libro sobre los 160 años de la fotografía, que es un directorio de autores.

El 30 de abril es la fecha límite para recibir los trabajos que concursarán en la Bienal de Fotografía.