Analistas dan como hecho que la cuestionada primera ministra será destituida

Ola de especulaciones en Perú sobre los posibles miembros del próximo gabinete

Beatriz Merino es considerada la funcionaria que da estabilidad al gobierno

DPA, AFP Y REUTERS

Lima, 13 de diciembre. El ambiente político peruano se inundó hoy de especulaciones en torno de los posibles miembros del próximo gabinete ministerial y respecto de la orientación que habrá de tomar el gobierno de Alejandro Toledo, quien espera remontar la semana entrante la crisis política que enfrenta.

Algunos sectores políticos consideraron "sana" la decisión del presidente Toledo de pedir la noche del viernes la dimisión de sus ministros y consejeros presidenciales, incluyendo a la cuestionada primera ministra Beatriz Merino, aunque otros segmentos opositores expresaron su respaldo a la funcionaria.

No obstante, se da como hecho la destitución de Merino, pues el mandatario anunció la remoción de todo el gabinete como fórmula para superar la crisis desatada a raíz de una serie de acusaciones contra la popular primera ministra, que van de corrupción a rumores de presunto lesbianismo.

De cara a la presentación del nuevo gabinete, el próximo lunes, según anunció el mandatario, ya se baraja una serie de nombres como posibles sustitutos de la liberal independiente Beatriz Merino, señalada en todo el ámbito político como una eficiente abogada tributarista que otorgaba estabilidad al gobierno.

Entre los posibles sucesores se mencionaba a los parlamentarios Carlos Ferrero y Antero Flores Aráoz; los ministros del Interior, Fernando Rospligiosi, y de Vivienda, Carlos Bruce, así como el ex ministro de Trabajo Fernando Villarán.

El líder opositor y ex presidente Alan García no descartó que tanto él como el Partido Aprista Peruano (PAP), el principal de la oposición, estarían dispuestos a integrar un gabinete multipartidista, con el propósito de salir de la turbulencia política.

"Si el Ejecutivo acepta que es imprescindible convocar a todos los partidos para sostener la democracia, y de acuerdo como se plantee la composición del gabinete, estoy seguro de que nadie podría negarse a participar", apuntó García.

Sin embargo, analistas destacaron que se da por descartada cualquier aproximación del gobierno con el PAP, ya que eso implicaría una ruptura con el Frente Independiente Moralizador (FIM), único aliado en el poder del partido toledista Perú Posible, que tiene una antigua e irreversible enemistad con el partido del ex mandatario.

Aunque hubo algunos sectores que defendieron la honestidad y prestigio de Merino, incluyendo al propio Alan García, reportes de prensa local señalan que la primera ministra habría aceptado su renuncia en el contexto de una gira que realiza por Estados Unidos.

Mientras Toledo era autorizado por el Congreso a viajar del 15 al 17 a Uruguay para participar en la cumbre del Mercosur, analistas políticos destacaron que ahora su reto es encontrar una persona adecuada para remplazar a Merino, considerada la única persona que dentro del gabinete que había logrardo obtener alta aprobación popular y era bien vista por la oposición.

El escándalo en torno a Merino estalló a finales de noviembre, cuando comenzaron a circular rumores sobre su presunto lesbianismo, lo cual es tabú en la conservadora sociedad de Lima. Tres periodistas señalaron luego que Merino les informó que el legislador Luis Solari era el autor de la campaña para desacreditarla refiriéndose a su vida íntima. Según Merino, Solari habría informado sobre el asunto al nuncio apostólico en Perú, Rino Pasigato, con lo cual se resintió la relación entre ella y los dignatarios de la Iglesia. La funcionaria atribuyó la campaña a que "creen que quiero postularme a la presidencia".

El cardenal de Perú, Juan Luis Cipriani, manifestó este sábado que la dignidad de la premier ha sido dañada por personas que entregaron documentos a un sector de la prensa contra Merino. "Es un hecho, no un rumor, que fueron a los medios de información a entregar documentos para dañar la imagen y la honra de la primera ministra", expresó el religioso.

Reiteró que no ha "recibido visita de ninguna personalidad política para denunciar asuntos sobre la privacidad y honra de la presidenta del consejo de ministros". El pasado miércoles el nuncio apostólico en Perú, Rino Pasigato, negó haberse reunido con políticos del partido en el gobierno envueltos en el escándalo de acusaciones mutuas.