México D.F. Jueves 4 de diciembre de 2003
Se proyectaron un corto, por los 25 años
del encuentro, y la cinta Hoy y mañana
García Márquez, invitado de honor a la
apertura del Festival de Nuevo Cine Latinoamericano
GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL
La Habana, 3 de diciembre. Al frente de una noche
de recuerdos, el Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez
asistió el martes a la inauguración del Festival Internacional
del Nuevo Cine Latinoamericano, que cumple su primer cuarto de siglo.
En
el palco de honor, junto a su esposa Mercedes y al director del festival,
Alfredo Guevara, Gabo presenció la ceremonia inaugural, un
corto conmemorativo de los 25 años del foro de La Habana y la cinta
Hoy y mañana, primer largometraje del argentino Alejandro
Chomski.
Amigo de Fidel Castro y muy vinculado con la revolución
cubana, García Márquez viaja con frecuencia a la isla, pero
hacía más de un año que no se le veía en un
acto público aquí.
En ese lapso se produjo la polémica internacional
que siguió a la detención masiva de opositores y el fusilamiento
de tres secuestradores, y en la cual el novelista colombiano tuvo una posición
matizada, que se registró en las páginas de este diario.
Aunque la inauguración formal fue por la noche,
desde media mañana se inició la ronda de exhibiciones del
festival. En la céntrica sala 23 y 12, en la esquina que forman
esas calles, un barrio de mucho ambiente cinéfilo, se presentó
el primero de los documentales a concurso: Tlatelolco, las claves de
la masacre, dirigido por Carlos Mendoza y producido por La Jornada
y canalseisdejulio, sobre la matanza de estudiantes en México el
2 de octubre de 1968.
Horas más tarde, en el teatro Karl Marx, la velada
inaugural arrancó con Memorias, un corto de 12 minutos de
la peruana Chiara Varese y la cubana Miriam Talavera, sobre el primer Festival
de La Habana (1979).
Las imágenes en blanco y negro recrearon aquella
apertura, que presidía Castro en uniforme militar de gala y a la
que asistieron el propio García Márquez, el chileno Miguel
Littin, ahora presidente del jurado de ficción; el cubano Julio
García Espinosa, hoy director de la Escuela Internacional de Cine
de San Antonio de los Baños; el colombiano Jorge Sanjinés,
el greco-francés Costa Gavras, que será homenajeado en estos
días y los estadunidenses Francis Ford Coppola, Harry Belafonte
y Robert de Niro.
En aquella sesión estaban también, y desfilaban
por el corto, el brasileño Glauber Rocha, el cubano Tomás
Gutiérrez Alea y el comandante Manuel Piñeiro, durante décadas
el operador principal de la política latinoamericana de La Habana.
Terminó el corto y siguieron los recuerdos. El
compositor y virtuoso de la guitarra Leo Brouwer, autor de bandas sonoras,
director del Grupo de Experimentación Sonora (crisol de donde salieron
Silvio Rodríguez, Pablo Milanés y Noel Nicola), recibió
a título especial un Premio Coral (el trofeo del festival), de manos
del autor de Rabo de nube.
La jornada concluyó con la cinta inaugural, que
es un fresco del panorama latinoamericano: el laberinto de la clase media
ilustrada (en este caso argentina), golpeada por la crisis y el desempleo.
|