Reprimenda a quienes no tienen que ver con reformas

''Dejen de hablar'', exige Vicente Fox al gabinete

Reconoce los desvelos y el afanoso interés mostrado por el PRI

JUAN MANUEL VENEGAS Y CIRO PEREZ SILVA

El presidente Vicente Fox Quesada exigió a los integrantes del gabinete legal y ampliado: ''Dejen de hablar'', trabajen en orden, y los funcionarios que no tengan que ver en las negociaciones políticas para las reformas fiscal y eléctrica ''se callen''; además, reducción en el gasto corriente de cada una de las dependencias federales, así como ''solidez, compromiso y unidad''.

En reunión que tuvo lugar el miércoles pasado, para que el gabinetazo conociera el documento denominado A la mitad del camino, el mandatario advirtió asimismo que, independientemente del futuro de las reformas, la austeridad marcará el presupuesto de cada una de las secretarías de Estado, toda vez que ''la prioridad será la inversión para reactivar el mercado interno''.

Hay dependencias ''que no han cumplido con las metas de ahorro... ahora hay que ahorrar más y evitar el gasto superfluo'', llamó la atención Fox a sus colaboradores poco después de que en conferencia de prensa hiciera un reconocimiento a los ''desvelos'', la ''voluntad'' y el ''afanoso'' interés del PRI para impulsar la reforma fiscal.

En el grupo de Los Pinos cercano al Presidente, en tanto, se destacó la importancia de la encerrona del miércoles, pues es momento de ir preparando lo que será ''el legado'' del foxismo. Este es el objetivo del documento que elaboró el coordinador de Políticas Públicas de la Presidencia, Eduardo Sojo, que define ''metas cumplidas'' pero, sobre todo, lo que ''falta por hacer'' en los próximos tres años.

La evaluación corresponde a cada una de las áreas del gobierno, explicaron diversos funcionarios consultados, y se prevé dar a conocer los resultados a partir de los primeros días de diciembre, cuando se haya cumplido exactamente ''la mitad del camino''. Se adelantó que se hará énfasis en los programas que permitieron ''la reducción de la pobreza''; la ampliación en la cobertura del programa Oportunidades; las iniciativas que fueron aprobadas y que contribuyen al fortalecimiento de las instituciones y de la democracia en el país; las acciones que aseguraron la ''estabilidad económica'', y el combate a delincuencia y crimen organizado.

La reunión de Fox y su gabinete se llevó a cabo el miércoles al mediodía y se prolongó casi dos horas. Ese mismo día, funcionarios de Los Pinos consultados informaron que se trató de la presentación de un documento que ''hacía el corte de caja preciso'' para conocer los resultados de los primeros tres años del sexenio y definir las metas de la segunda etapa, con la advertencia de que éste será un periodo que ''exigirá la unión de esfuerzos'' y que ''no habrá pretextos para incumplir objetivos''.

Este jueves, en el contexto de las celebraciones por el 93 aniversario de la Revolución Mexicana, por separado algunos secretarios comentaron sobre el encuentro, coincidiendo en que al final de la presentación del mencionado documento de evaluación hubo de parte del Ejecutivo una ''enérgica'' llamada de atención en temas como ejercicio del gasto corriente y negociaciones para las reformas.

''Nos hizo un llamado a concentrarnos en la obtención'' de las metas de gobierno; a un mejor manejo del presupuesto y ''a la unidad'' para alcanzar los objetivos que ''nos hemos trazado el próximo año para los sectores social y económico'', precisó una de las fuentes. Gasto social, fortalecimiento del mercado interno y generación de empleos serán los tres ''grandes objetivos'' en 2004, añadió.

Otra más señaló que se notó ''el malestar'' del Presidente en el caso de las declaraciones que diversos funcionarios ''han estado haciendo'' en torno a la desincorporación de algunas entidades. Fue ahí donde Fox les exigió: ''Dejen de hablar''.

Fue ''categórico'' -explicó la fuente- en las instrucciones: ''Todos aquellos que no son los responsables de las dependencias que conducen las negociaciones de las reformas, deben callarse''. Y demandó, en ese sentido, ''disciplina'' y que omitan ''cabildear'' mayores presupuestos fuera de las instancias que corresponde del gobierno federal.

Según se dijo, la molestia de Fox fue por la ''avalancha'' de declaraciones de varios funcionarios respecto al proyecto para la desincorporación de entidades como Imcine, Notimex y el Colegio de Posgraduados, entre otras, que provocaron problemas a los responsables de la negociación política con los partidos en el Congreso. En cuanto al presupuesto señalaron que el próximo año ''será austero'', lo que ''nos obligará a un mayor esfuerzo de ahorro y a evitar, como nos dijo el Presidente en la reunión del miércoles, el gasto superfluo''.

Por otra parte, ese mismo miércoles -en conferencia de prensa luego de la recepción al presidente de Alemania, Johannes Rau- Fox reconoció los ''desvelos'', la ''voluntad'' y el ''afanoso'' interés de las directivas y legisladores del PRI y del PAN para sacar adelante una reforma fiscal que genere lo ingresos que ''son urgentes y muy necesarios'' para el Estado.

''Mi reconocimiento para el PRI, que afanosamente está buscando soluciones'', dijo Fox al conocer la propuesta tricolor de crear un nuevo impuesto para gravar con 10 por ciento las cadenas productivas y comerciales.

''Entiendo que el PRI va a proponer una reforma que tiene los mismos objetivos (que la suya, que implica gravar medicinas y alimentos), y que opera de manera diferenciada... espero conocerla a detalle; pero en este momento, lo importante es que no hay un rechazo a la idea de una iniciativa de reforma fiscal, lo cual es un paso importante hacia delante. Reconozco el esfuerzo del PRI y del PAN que están verdaderamente desvelándose y trabajando duro para encontrar una propuesta...'', puntualizó el mandatario.