Denuncia Amnistía Internacional numerosas irregularidades en el proceso electoral

Sólo un fraude llevaría a Ríos Montt a la presidencia, dicen en Guatemala

Acusan al mandatario Alfonso Portillo de usar fondos estatales para apoyar al ex dictador

JUAN BALBOA ENVIADO

Guatemala, 7 de noviembre. Esquipulas y Cobán, dos pueblos indígenas de larga historia cultural, fueron escogidos por el general retirado Efraín Ríos Montt, candidato del oficialista Frente Republicano Guatemalteco (FRG), para cerrar la víspera y hoy su campaña, pidiéndole a Dios que lo ayude a llegar a la silla presidencial. "Yo sólo quiero estar cubierto con la sangre de Cristo", ha llegado a decir el ex dictador.

Pero Ríos Montt parece estar muy lejos de alcanzar la presidencia, porque se mantiene 24 puntos abajo de otros dos candidatos presidenciales, Oscar Berger y Alvaro Colom; mientras tanto, la sombra de la corrupción tocó esta semana su campaña, al conocerse que utiliza fondos del Estado en ésta.

El fantasma del fraude se hizo presente tras las denuncias sobre la utilización de recursos por parte del actual mandatario Alfonso Portillo para revivir la imagen del oficialista Ríos Montt y revertir su imagen negativa.

Las primeras denuncias de fraude las hizo la dirigencia de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), que lleva como abanderado a Colom, hombre de centro-derecha, al hacer público que el gobierno de Portillo utiliza recursos del Fondo Nacional para la Paz en la campaña del general retirado.

A estas denuncias se sumó la de líderes mayas, xincas y garífunas contra el partido del general por manipulación del voto, presiones y amenazas a indígenas, si no apoyaban al oficialista Frente Republicano Guatemalteco (FRG). Según líderes indígenas, entre ellos Antonio Delgado, en 16 de los 22 departamentos del país el FRG los ha obligado a afiliarse para beneficiarse de resarcimientos y proyectos de desarrollo.

"Han soltado el rumor de que si el FRG no gana el próximo domingo se producirán hechos de violencia como a principios de los años 80, cuando el general Ríos Montt fue presidente a fuerza", coincidieron la mayoría de los líderes que participaron en el Encuentro indígena por el voto libre.

Mientras se conocían estas denuncias, el FRG intensificó su campaña de regalar granos básicos, pollos y enseres domésticos, principalmente en las zonas rurales.

En el departamento de Alta Verapaz, líderes del FRG dieron un curso masivo sobre cómo votar por ese partido y pocos minutos después regalaron ollas y sartenes. En Quetzaltenango, el propio Ríos Montt entregó bicicletas.

Las dudas sobre la manipulación de las elecciones se hicieron más evidentes en los pasados cuatro días, cuando miles de ex miembros de las Patrullas de Autodefensa Civil, grupo paramilitar organizado y fundado a principios de los 80 por el general retirado y ahora candidato, iniciaron movilizaciones violentas en varias regiones y departamentos importantes: Huehuetenango, Quezaltenango, San Marcos Retalhuleu y la sierra de los Cuchuatanes.

Los ex paramilitares exigen un pago que el gobierno de Portillo les prometió, pero el descontento ya tocó terreno electoral, pues los propios patrulleros amenazaron con quemar urnas el próximo domingo y bloquear carreteras para evitar la movilización de votantes.

Este viernes, asimismo, organizaciones humanitarias como Intermom Oxfam y la sección española de Amnistía Internacional (AI) advirtieron acerca de "numerosas irregularidades" jurídicas y políticas, y de la existencia de un clima de violencia de cara a los comicios.

Ambos organismos, según agencias de prensa, recordaron que en los meses recientes se produjeron entre 17 y 21 asesinatos vinculados a los comicios.

Ni las encuestas ni Dios lo salvarán

La más reciente encuesta publicada tiene nervioso al comité de campaña de Ríos Montt, pero también al palacio presidencial; tanto, que ha movilizado unidades oficiales para la campaña del FRG. Arístides Crespo, jefe de la bancada del FRG, inclusive aceptó el uso de nuevos recursos para la campaña, pero dijo que se obtuvieron de "forma particular y no institucional".

El sondeo, realizado por Vox Latina, da una pequeña ventaja al derechista Oscar Berger, de la Gran Alianza Nacional, sobre el candidato de la UNE. Empero, el primero bajó de 37.2 por ciento en las preferencias en octubre pasado a 30.9 por ciento. En cambio, Colom logró subir de 21.3 por ciento a 27.4 por ciento, y la tendencia, según analistas, es que continúe al alza.

Para ganar la presidencia se requiere el 50 por ciento más uno de los votos válidos emitidos. De no ser así, los dos más votados van a segunda vuelta.

Ríos Montt mantiene un lejano 11.4 por ciento de las preferencias electorales, aproxidamente el mismo porcentaje desde hace más de cuatro meses, y no se prevé que pueda crecer, cuando apenas faltan dos días para las elecciones.

Las encuestas han sido un dolor de cabeza para el general, quien encabezó en 1982 un golpe militar en Guatemala y está acusado de ser el responsable del asesinato de miles de indígenas.

Pero además, ex funcionarios judiciales se ampararon la víspera en contra del procedimiento "anómalo" de la Corte de Constitucionalidad, la cual favoreció la candidatura de Ríos Montt. El propio Colom advirtió al general que de llegar a la presidencia comenzará de inmediato un juicio por su participación en el asesinato de indígenas.

Aún más: el impopular gobierno de Alfonso Portillo, quien llegó a la presidencia por el FRG, tiene en vilo las posibilidades del general retirado de llegar a la pronosticada segunda vuelta, prevista para el 28 de diciembre.

En este contexto, Miguel Angel Sandoval, del Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos, asegura que sólo "un colosal fraude" puede llevar al triunfo al general retirado y ex dictador.