México D.F. Martes 4 de noviembre de 2003
Si no se aprueba, el villano es el Congreso, explican
PRD, PT y Convergencia califican de trampa la propuesta fiscal de Fox
ENRIQUE MENDEZ Y PATRICIA MUÑOZ
Los grupos parlamentarios de PRD, PT y Convergencia en la Cámara de Diputados consideraron que la propuesta de Vicente Fox de aplicar un IVA general de 10 por ciento constituye ''una trampa'', porque sabe que habrá oposición en el Congreso a dicho gravamen y, si no se aprueba, entonces ''el villano de la película'' será el Poder Legislativo. Por su parte, los priístas afirmaron que todavía no deciden si votarán a favor o no de dicho impuesto.
''Aunque el Estado necesita más ingresos, éstos no deben ser pagados por los consumidores'', dijo el coordinador de los diputados perredistas, Pablo Gómez Alvarez, quien acusó a Fox de ''intentar poner contra la pared'' a los legisladores.
Como parte del debate, Gómez recomendó a Fox que evite una nueva controversia con el Congreso sobre el IVA. ''Se vería como una maniobra que enrarecerá el ambiente y nos iremos a una polémica en los medios para ver quién es el villano de la película, y el Congreso no admitirá serlo y habrá un encuentro innecesario.''
A su vez, el coordinador del PT, Gonzalo Yáñez, afirmó que al mandatario ''ya se le acabó la inteligencia y sus cacareadas reformas no son más que bolsear a la población. Ya se ve que el Prozac no da para más''. Una alternativa, expresó, es que se dejen de pagar los intereses de la deuda y que se elimine el rescate bancario. Ahí, señaló, hay suficientes recursos públicos, sin necesidad de dañar una vez más a las familias mexicanas.
El rechazo de los partidos opositores -excepto el PRI- en San Lázaro se fortaleció luego de que la Secretaría de Hacienda insistió en el argumento de que ''una tasa única en el IVA permite recuperar el potencial recaudatorio fiscal y tener una ganancia adicional por eficiencia en la recaudación de ese impuesto'', como señaló en un documento que la dependencia entregó a la comisión legislativa del ramo.
Sobre ese punto, el secretario de la Comisión de Hacienda y coordinador de Convergencia, Jesús Martínez Alvarez, consideró que el debate no debe ser si se aumentan o no las tasas impositivas, sino que se modifique el sistema tributario para facilitar el pago de impuestos. ''Un nuevo procedimiento de recaudación aportaría tres o cuatro veces más de lo que recauda Hacienda actualmente'', dijo.
Por su parte, y aun cuando dentro de la bancada del tricolor ya hubo un rechazo a gravar con ese impuesto alimentos y medicinas, el vicecoordinador de los legisladores priístas, Roberto Campa, dijo que en el grupo parlamentario éste es ''un asunto que todavía no está resuelto''.
Podría haber paro nacional: UNT
La Unión Nacional de Trabajadores (UNT) acordó rechazar la aplicación de cualquier impuesto a alimentos y medicinas, y este planteamiento se defenderá en la jornada nacional de movilizaciones que realizarán las próximas semanas los sindicatos democráticos del país, los cuales incluso están dispuestos a llegar a un ''paro nacional en protesta por las medidas equivocadas que impulsa el gobierno''.
Francisco Hernández Juárez, uno de los dirigentes de la presidencia colegiada de la UNT, sostuvo lo anterior y dijo que el gobierno de Vicente Fox insiste en propuestas que tendrán el rechazo nacional por el impacto tan fuerte en la economía de los trabajadores.
El también líder de los telefonistas dijo que esta administración está destinando mal los recursos, porque en lugar de utilizarlos para poner en marcha las políticas públicas que tiene pendientes, prefiere cumplir con el extranjero para obtener buenas calificaciones de las corredurías internacionales, del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, ''sin darse cuenta del gravísimo problema que está generando a nivel interno''.
Hernández Juárez consideró que se prefiere sacrificar más a los trabajadores, sin importar que 60 por ciento de sus ingresos se destinen al rubro de la alimentación, y que un aumento en el impuesto al valor agregado (IVA) impactaría fuertemente sus bolsillos, deprimiendo más el mercado interno.
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