Llaman a manifestaciones en Euskadi para rechazar la nueva ola represiva

Arrestan a ocho vascos que trabajaban en empresas vinculadas con diario clausurado

Continúa la ofensiva judicial contra publicaciones nacionalistas acusadas de lazos con ETA

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 16 de octubre. La Guardia Civil española arrestó hoy en varias ciudades vascas a ocho personas que trabajaban en empresas relacionadas con el diario vasco Euskaldunon Egunkaria, clausurado en febrero pasado por supuestos vínculos con la organización armada vasca ETA.

El operativo, autorizado por el juez Juan del Olmo, de la Audiencia Nacional, fue realizado por 200 agentes en localidades del País Vasco y Navarra, quienes incautaron gran cantidad de material informático y documentación.

De acuerdo con los investigadores del caso, algunas de esas empresas habrían servido para ocultar movimientos de fondos vinculados con el periódico clausurado.

El rotativo vasco, el primero escrito íntegramente en lengua euskera, fue acusado y clausurado en febrero anterior por presunta colaboración con ETA, a la que, según el Ministerio del Interior español, pertenecía al formar parte de su "aparato financiero".

También se ordenó entonces la detención de los directivos del periódico, entre ellos Martxelo Otamendi, quienes posteriormente salieron en libertad.

Los agentes españoles detuvieron en Do-nostia a Xabier Legarra, Mikel Agirrezabalaga y Miguel María Sorozabal, éste último gerente de la editorial Zabaltzen, una de las empresas editoras del periódico.

En Errentería fueron detenidos Miguel Az-cune Alberdi y José María Sors Bagués, en tanto que en Hernani y Tolosa fueron aprehendidos Juan María Larrarte, vocero de los trabajadores durante las protestas del cierre, y Armando Hernández. En Estella fue arrestado Angel Ramón Díez Elósegui, quien trabajaba en la empresa Gráficas Lizarra.

El juez los acusa de crear un "entramado financiero" mediante la creación de varias empresas para ocultar los fondos con los que presuntamente "ayudaban" a ETA.

Según la información policial, los detenidos manejaron más de 15 millones de euros de origen desconocido desde 1990, y asegura recibieron 9 millones de la misma moneda en subvenciones públicas.

El juez indicó que las empresas del "entramado Egunkaria" no declararon al fisco los cinco años anteriores, en los que habrían ocultado los beneficios "que percibieron de administraciones públicas, como diputaciones y ayuntamientos, aunque en su mayoría procedieron del gobierno vasco".

Esta conclusión se habría obtenido del análisis de más de 30 mil documentos y cien computadoras incautados durante la primera operación contra el periódico, al que además acusan de emitir facturas falsas y falsificar documentos de carácter contable.

El ministro español del Interior, Angel Acebes, precisó que esta acción judicial está relacionada con la "investigación judicial sobre posibles irregularidades contables, destino de subvenciones y blanqueo de dinero" de empresas que tienen que ver con el entramado Egunkaria.

Pero el abogado de Egunkaria, Eneko Et-xebarria, negó que los detenidos tengan re-lación con ETA, y anticipó que interpondrá un habeas corpus: "Vamos a solicitarlo y a decir que estos detenidos nada tienen que ver con ETA ni con la actividad terrorista; lo único que han hecho es trabajar por el euskera", indicó el abogado ante la prensa.

De su lado, el consejo de los organismos de euskera, Kontseilua, convocó para el viernes a una concentración popular frente a los ayuntamientos de todas las localidades del País Vasco, así como a una manifestación el sábado en Donostia, para rechazar esta nueva operación policial.

El diario vasco Gara editorializó que con estas acciones de detención el Estado español intenta castigar y paralizar mediante el terror a aquellas personas que están trabajando en la construcción de las bases que contribuyen a que Euskal Herria se mantenga viva, e impedir así que el País Vasco tenga opción de futuro.

Añadió que ninguno de los actos delictivos imputados por el ministro español del Interior a los detenidos se corresponde con los métodos utilizados por el magistrado del Olmo: apresamiento por parte de agentes de la Guardia Civil con asalto nocturno a sus viviendas e incomunicación antes de pasar a disposición del Poder Judicial.

El rotativo Euskaldunon Egunkaria desapareció tras su cierre, si bien los mismos trabajadores y su anterior director, Otamendi, crearon un nuevo periódico, Egunon, también escrito íntegramente en euskera.