Para las bandas sólo fue un rozón el operativo, afirman comerciantes y vecinos

"La policía no tocó a los cabrones", dicen tepiteños

JOSEFINA QUINTERO MORALES

La zona comercial de Tepito quedó bajo control ayer. En el Eje Uno Norte había gran despliegue de uniformados a pie, en patrullas y a caballo, con sus armas de cargo.

Por su parte, comerciantes y residentes del lugar, aseveran que "la policía hace sólo pendejadas", mientras el barrio es dirigido por bandas muy conocidas; saben cada movimiento, quién roba, vende piratería, clona tarjetas, trafica drogas, armas o se dedica a la venta de lo robado.

Sostienen que a esos grupos la presencia de la policía no les asusta; "son más hijos de la chingada que nosotros, pero con la diferencia que ellos tienen el aval del gobierno, dijo Juan, quien refiere que el viernes por la noche fue cateado por estar parado en el eje, cuando los agentes de la Agencia Federal de Investigación (AFI) salían del operativo en la calle Tenochtitilán.

Socorro, comerciante del lugar, comentó que la situación que se vive en Tepito se debe a que "lo quieren desaparecer, están calentando las cosas y al mismo tiempo preparan el terreno.

"Es cierto -agregó-, entraron a dos calles importantes: Jesús Carranza y Tenochtitlán, pero no tocaron a los cabrones de Tepito, a la banda fuerte, sólo fue un rozón, los están probando".

Los comerciantes expresaron su inconformidad porque "la gente ya no quiere comprar en el barrio, piensa que es peligroso y que los van a asaltar".

Denunciaron que los policías cobran cuando hacen sus revisiones. "Cuando ven que alguien sale con mercancía, lo registran, y si no les dan dinero los atoran con amenazas. A nosotros también nos han asaltado los agentes de la AFI".

Sin embargo, esta vez la presencia policiaca será permanente en la zona, según advirtió el secretario de Seguridad Pública, Marcelo Ebrard Casaubón.

Mientras, ayer fue notoria la baja afluencia de gente, a pesar de que es fin de mes y quincena. Según los comerciantes, las ventas están muy por debajo de lo normal. Carla Hernández, quien fue a comprar ropa y zapatos tenis, comentó: "desde hace una semana quería venir, pero me dijeron que estaban gruesas las cosas por lo de los operativos. Cuando llegué, me impresionó ver tantos policías. Da más miedo entrar ahorita que cuando no hay vigilancia; las pistolas y los caballos imponen".