México D.F. Jueves 28 de agosto de 2003
MEXICO SA
Carlos Fernández-Vega
El arte de convertir la posición política en excelente negocio
Fernández de Cevallos y Hamdan Amad han destacado por éxitos legales en detrimento del erario
NO SON LOS UNICOS, pero sí los más ostentosos, siempre ligados a causas justas.
SON DIEGO FERNANDEZ de Cevallos y Fauzi Hamdan Amad, ambos panistas, quienes han hecho de su carrera política un excelente negocio. Por sus respectivos despachos de abogados han hecho fila casabolseros, banqueros, empresarios y demás "hombres de negocios" metidos hasta el cuello en operaciones irregulares, por decir lo menos.
AMBOS, ESPECIALMENTE EL PRIMERO, han recorrido buena parte del circuito político nacional (desde candidaturas a la Presidencia de la República hasta posiciones en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal) y el sello distintivo en ellos ha sido la combinación y el usufructo de sus respectivas posiciones dentro del poder público con la realización de jugosos negocios, siempre en aras del "ejercicio libre" de su profesión.
ASI, EN LOS RECIENTES años se han visto defendiendo -y cobrando una jugosa rebanada- a una amplia gama de delincuentes de cuello blanco, entre los que destacan los especuladores bursátiles que desplumaron a los pequeños inversionistas en el crac de 1987, los banqueros que asaltaron el erario por medio del Fobaproa y los empresarios que en la devolución de impuestos han encontrado un inagotable filón de oro. En el ejercicio, hasta una pobre viuda (que dejaría de serlo) mordió el polvo, a pesar de que aparentemente ganó la demanda que interpuso en contra del Banco del Atlántico. Diego metió la mano, la influencia y la charola senatorial, y la señora perdió el caso.
EN ESOS Y EN MUCHOS otros casos, Fernández de Cevallos y Hamdan Amad han ejercido todo el peso de sus influencias, utilizando con singular alegría la cobertura que les significa ser integrantes activos de la clase política del país y asegurando que dicha actitud no es ilegal. Habrá que determinarlo, pero de entrada sí es perfectamente inmoral. Lo paradójico del caso es que pertenecen a un partido que dice estar en contra de este tipo de actividades y que siempre ha condenado, según lo asegura, estas prácticas despreciables.
AYER EN ESTE ESPACIO se comentaba que a lo largo de la autodenominada administración del cambio, la Secretaría de Hacienda ha perdido 60 por ciento de los juicios (más de 32 mil), quebranto que al erario le ha significado una merma superior a 217 mil millones de pesos, y en este sentido, se anotaba, la ineficiencia de la autoridad fiscal va de la mano de otro cáncer nacional, es decir, el tráfico de influencias.
COMO PUBLICO La Jornada en su edición del pasado lunes (Andrea Becerril), tan sólo en 2003 "el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa (TFJFA), donde se dirimen las inconformidades de los particulares en contra de la Secretaría de Hacienda y de las demás dependencias del gobierno federal, lleva juicios por un monto superior a 90 mil millones de pesos. Un rico filón por el que pelean los grandes despachos de abogados, entre ellos los de los panistas Fernández de Cevallos y Hamdan Amad, sólo que éstos llevan ventaja sobre los demás litigantes.
"EN CALIDAD DE SENADORES proponen y aprueban leyes en materia fiscal, y ratifican además a los magistrados de ese tribunal. El propio presidente del TFJFA, Alejandro Sánchez Hernández, contó con el aval de los mencionados legisladores. Es el tráfico de influencias al que se refirió la también senadora del blanquiazul Luisa María Calderón en su propuesta de reforma constitucional, que prohíbe a los miembros del Congreso litigar o intervenir en actividades lucrativas.
"LOS DESPACHOS DE AMBOS senadores acaparan los casos de mayor monto, los de las grandes empresas que se inconforman con el fisco o contra alguna otra autoridad, utilizan relaciones con los magistrados a los que ratificaron y buscan el beneficio de leyes que ellos aprobaron en los ratos en que legislan. De acuerdo con datos del tribunal, este año la sala superior, donde se ventilan los juicios más importantes, llevó 270 asuntos en contra de dependencias del gobierno federal. De éstos, 200 tuvieron fallos en favor de las empresas y una buena parte de ellos estuvieron bajo la asesoría de los despachos de Hamdan Amad y Fernández de Cevallos."
LO MAS LAMENTABLE del caso, más allá de la constante merma al erario, es que el Poder Legislativo, teniendo todas las facultades legales para proceder, se limite a condenar este tipo de prácticas sin ir más allá. El proceder de Fernández de Cevallos y Hamdam Amad no resulta novedoso, toda vez que llevan casi cuatro lustros en dicho ejercicio, de tal suerte que si el pretexto es el tiempo, pues ya ha pasado demasiado para no actuar en consecuencia.
ANTE EL OBVIO tráfico de influencias que ejercen -y por lo visto seguirán ejerciendo- este tipo de personajes, tímido ha sido el proceder de los integrantes del Legislativo, quienes no ordenan una investigación rigurosa sobre el particular, sino que se limitan a proponer, a plantear posibilidades.
CRECE EL ESCANDALO y se "sugiere" que la Auditoría Superior de la Federación investigue los casos de tráfico de influencias y de abuso de poder en el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, porque "es inadmisible que legisladores del partido en el gobierno" conserven privilegios gubernamentales para proteger los intereses de empresas privadas, amén que "sería" productivo "abrir" el debate para modificar el marco jurídico y evitar casos como los señalados (La Jornada).
EL TRAFICO DE INFLUENCIAS, pues, no es una práctica nueva, ni mucho menos los personajes involucrados en este escándalo y si, como dice el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, Jorge Chávez Presa, "la sociedad está cansada de observar que en las dependencias del gobierno federal se registran malos manejos de los recursos públicos, y que funcionarios o empresarios que desempeñaron actividades privadas en las administraciones pasadas ahora se aprovechan de sus contactos y sus relaciones para desde el gobierno emprender negocios que por desgracia no son regulados", entonces sólo resta actuar en consecuencia.
Las rebanadas del pastel:
SIGUEN LOS CHISTES: la desigualdad en el país avanza a pasos agigantados, la economía no crece ni genera empleos, pero "hemos recuperado, después de mucho tiempo, el horizonte de largo plazo" (Fox dixit). [email protected]
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