Negociación paralela Gordillo-Barrio; excluyen al PRD

Encabezará el PRI la mesa directiva en San Lázaro

La Junta de Coordinación Política, también para el tricolor

ROBERTO GARDUÑO

El PRI y el PAN negociaron la conformación de los dos principales órganos de gobierno de la Cámara de Diputados y excluyeron de facto al PRD. Elba Esther Gordillo y Francisco Barrio se arreglaron para que el Revolucionario Institucional encabece la presidencia de la mesa directiva y la Junta de Coordinación Política durante el primer año de la 59 Legislatura. De esa forma, el priísta Enrique Burgos responderá el tercer Informe de gobierno de Vicente Fox Quesada, dijeron a este diario integrantes de la bancada tricolor cercanos a esas pláticas.

La negociación entre la lideresa priísta y el ex secretario de la Contraloría se concretó con un arreglo que no convino del todo al PAN, porque ese partido pretendía tener en sus manos la presidencia de la Cámara de Diputados el último año de la legislatura con objeto de afrontar el cambio de administración federal en 2006. La lógica matemática del PRI se impuso porque argumentó en todo momento que su mayoría numérica de 222 legisladores le da privilegio para conformar los órganos de gobierno y las comisiones legislativas, a su conveniencia política.

De esa forma, el tricolor encabezará la mesa directiva y la Junta de Coordinación Política durante el primer año de la 59 Legislatura. El blanquiazul tendrá en sus manos ambos órganos en el siguiente año, y para el tercero y último, el Revolucionario Institucional, con Elba Esther Gordillo, presidirá la mesa directiva, y el Partido de la Revolución Democrática estará al frente de la Junta de Coordinación Política.

Tal hecho confirmará el rechazo a la propuesta del PRD, partido que puso sobre la mesa la urgencia de negociar la presidencia de la mesa directiva en bloque, con objeto de que las tres fuerzas mayoritarias ocuparan esa posición de la siguiente forma: primer año, el Revolucionario Institucional; segundo, Acción Nacional, y tercero, el de la Revolución Democrática. Tanto Elba Esther Gordillo como Francisco Barrio desecharon la pretensión del partido del sol azteca y se comprometieron a realizar una votación conjunta en favor del tricolor, después, juntos, lo harán por el blanquiazul, y por último el PRI se hará cargo de la mesa.

Y es que la elección de la mesa directiva se realizará en el pleno camaral al inicio de cada año de la 59 Legislatura, para lo cual es necesaria una votación de las dos terceras partes, situación que asegurarán juntas las bancadas de PRI y PAN. En el caso de la Junta de Coordinación Política, como establece la Ley Orgánica del Congreso, se repartirá de mayor a menor número de curules, es decir, primero le corresponde al Revolucionario Institucional, después a Acción Nacional y por último al Partido de la Revolución Democrática.

Una vez que ya existe un arreglo paralelo entre Gordillo y Barrio, en las filas de los diputados del tricolor alienta el descontento porque la coordinadora y su grupo concéntrico no han convocado a una sola reunión plenaria de la fracción para informar sobre los avances de la negociación. Es más, se califica de ''grupo espurio'' a los coordinadores estatales, a los que convocó la lideresa priísta con objeto de negociar las posiciones de éstos en las 18 comisiones legislativas que intenta presidir el Revolucionario Institucional. Inclusive, la maestra citó para este jueves a las 17 horas en su oficina del edificio priísta a esos representantes estatales para dar a conocer el resultado de su negociación con el PAN.

Por su parte, al salir de la reunión oficial de los líderes de las bancadas, realizada en el viejo salón de protocolo, el perredista Pablo Gómez denunció que la negociación paralela entre Gordillo y Barrio ha roto la pluralidad en la Cámara de Diputados, porque ''ningún partido tiene la mayoría, y si hay una coalición de dos partidos, suficiente para excluirnos, nosotros haremos ver que se trata de una exclusión política que no tiene sentido''.

También rechazó la propuesta de reducir el periodo de gobierno de la mesa directiva a seis meses, porque ''eso es bajarle de nivel a la presidencia de la Cámara. Es una posibilidad. En el Senado es de un año, Ƒpor qué tiene que ser aquí de seis meses?''

De lado panista, José González Morfín negó que existiera una negociación con el PRI: ''Mañana (hoy) lo vamos a resolver''. No obstante adujo que los coordinadores resolvieron enviar una invitación a la presidencia del Senado para analizar la minuta de alargamiento de los periodos ordinarios de sesiones en San Lázaro.