Consideró clave invertir más recursos en la creación de instituciones de enseñanza

Reconoce Sylvia Ortega grave déficit de espacios educativos para jóvenes

Aplicarán encuesta entre estudiantes para conocer los índices de alcoholismo y tabaquismo

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

La subsecretaria de Servicios Educativos en el Distrito Federal, Sylvia Ortega, reconoció que faltan espacios educativos para los jóvenes y que se necesitan más recursos, con el propósito de incrementar la oferta de lugares en las instituciones educativas.

La funcionaria consideró que los recientes suicidios de jóvenes que no lograron ingresar a la institución educativa de su preferencia se deben a que las escuelas y las familias no han logrado dar seguridad a los estudiantes para que puedan contender con el fracaso escolar.

Sin embargo, señaló que es "maniqueo" hacer una conexión automática entre los suicidios y la falta de espacios educativos en la ciudad de México.

Dijo que pueden ser muchas las causas que llevan a una persona a quitarse la vida. Explicó que el ambiente en el que viven los capitalinos es difícil y en esas circunstancias el fracaso escolar se puede convertir en un "detonador" para que los jóvenes tomen una decisión de este tipo.

Consideró que los casos recientes son lamentables y que la sociedad, en particular los padres de familia, tienen que participar de manera más activa en la orientación de sus hijos para que no se repitan este tipo de casos.

Aseguró que las autoridades de la Secretaría de Educación Pública (SEP) están afligidas y preocupadas, pero también ocupadas en mejorar el ambiente escolar de los alumnos, a fin de que encuentren en la escuela un lugar cálido y seguro.

Es cierto, dijo, que no aprobar un examen puede ser frustrante y por eso se debe ayudar a los jóvenes a que tengan mayor seguridad para contender con la frustración que provoca el fracaso escolar.

La funcionaria se preguntó si faltan espacios educativos y respondió que sí y que ante ello es necesario crear políticas de mayor atención a los jóvenes. Explicó que se necesitan más recursos y mejor distribuidos para ampliar la oferta de lugares.

Por otra parte, anunció que el próximo año se aplicará una encuesta en el Distrito Federal para determinar los índices de consumo de tabaco y alcohol entre los estudiantes de educación básica y definir qué tipo de acciones preventivas se deben instrumentar por parte de la SEP.

Refirió que esta diagnóstico forma parte de la encuesta sobre el consumo de drogas ilícitas, que en 2000 reveló que 5.8 por ciento de los alumnos alguna vez han consumido mariguana, 5.2 por ciento cocaína y 4.3 por ciento sustancias inhalables.

Dijo que las autoridades educativas no son partidarias de que en los planteles educativos se apliquen exámenes antidopaje, pero dijo que si los padres de familia optan por este mecanismo para vigilar a sus hijos lo pueden hacer con apoyo de los servicios de salud.

Ortega señaló que no es justificable que las escuelas sirvan para realizar pruebas generalizadas a los niños, pero insistió que es una prerrogativa de los padres de familia.

Dijo que más allá de este tipo de pruebas, la tarea central deben ser los programas de prevención en conjunto con las familias, porque el problema de las adicciones concierne a toda la sociedad.

A cuatro días del inicio del ciclo escolar, admitió que hay muchas escuelas en mal estado y algunas que llevan operando hasta 10 años en aulas provisionales, por lo que este año se buscará remplazarlas por salones definitivos.

Confirmó que el rezago es "importante" no sólo en la infraestuctura física, sino también en pizarrones, sillas y otro tipo de mobiliario escolar. Ante ello, se van a sustituir 458 mil muebles inservibles en más de 3 mil escuelas, los cuales se van a donar al museo del Papalote para su reciclado y, a cambio, habrá visitas gratuitas a este lugar.