México D.F. Viernes 15 de agosto de 2003
Ex habitantes de inmuebles de alto riesgo ahora
ocupan los albergues temporales
"Muchos años vivimos con miedo"
En los campamentos, además de servicios hay actividades
recreativas para los niños
BERTHA TERESA RAMIREZ
Para Gloria Dolores Contreras, originaria del Distrito
Federal, quien durante cinco años vivió en un lúgubre
edificio de la calle Lucerna, entre techos y paredes a punto de derrumbarse,
pagando una renta congelada de 30 pesos, resulta casi un sueño
que las autoridades capitalinas hayan decidido apoyar a las familias que
habitaban edificios en franco deterioro y alto riesgo en el Centro Histórico.
Ella
y su familia, como otras ocho desalojadas de inmuebles en peligro en esa
zona, vivía con el miedo de que el tejado se viniera abajo, sobre
todo durante la temporada de lluvias o por un temblor, recuerda a la puerta
del cuartito que ocupa en el campamento Villa Margarita, ubicado en la
colonia Patera, delegación Gustavo A. Madero, donde fueron trasladadas
algunas de las mil 500 familias que han aceptado abandonar sus casas ante
el peligro en el que se encontraban.
Dionicia Pedro Dámaso, otra ex habitante del inmueble
de Lucerna, agrega que por años vivieron en medio de la inseguridad
y la insalubridad, pues no contaban con agua; esa situación no era
muy distinta de la de su pueblo, en el estado de Querétaro, sólo
que aquí puede salir a vender y obtener dinero para comer y hasta
para mandar a sus hijos a la escuela, comenta.
Guadalupe Baños también fue reubicada temporalmente,
pero ella vivía en una vieja vecindad de la calle Allende. Comenta
que su vivienda se inundaba irremediablemente cuando llovía y las
paredes estaban ya muy deterioradas, porque el agua se trasminaba y el
techo estaba a punto de caerse. Dice que pagaba 400 pesos al mes por la
renta de un cuarto.
Por su parte, la directora del Instituto de Asistencia
e Integración Social (Iasis), María Rosa Márquez,
explica que dentro del Programa de Apoyo a Familias en Alto Riesgo, la
dependencia a su cargo atiende a 230 familias en nueve campamentos que
cuentan con todos los servicios, atención médica y actividades
de recreación para los niños.
Indicó que se espera que en el transcurso de este
mes 700 familias sean trasladadas a los 14 albergues con que cuenta el
Iasis. Se prevé que allí se ubique a 45 por ciento de las
mil 500 familias; el resto decidió alojarse con parientes.
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