Se niegan a entregar el autobús donde murió de un tiro; quieren sembrarnos pruebas, dicen

Culpan a estudiantes de la muerte del empleado de una normal rural

Amenaza el gobierno de Chiapas con acusar a los alumnos de "resistencia a particulares"

ANGELES MARISCAL CORRESPONSAL

Tuxtla Gutierrez, Chis., 14 de agosto. La Procuraduría de Justicia de Chiapas detuvo y mantiene en calidad de "presentados" a cinco estudiantes vinculados con el asesinato de Joel David Martínez López, trabajador de la Escuela Normal Rural Lázaro Cárdenas del Río, del estado de México, muerto la noche del miércoles de un balazo en el tórax en un autobús donde viajaban estudiantes de ambas entidades.

Debido a que los alumnos "se niegan a entregar el autobús donde ocurrieron los hechos, a que movieron la escena del crimen y por rehusarse a los exámenes que comprobarían si hubo o no disparos por parte de los estudiantes y obstaculizar las labores periciales", la dependencia inició otra averiguación previa por "resistencia a particulares".

La procuraduría acusa directamente del homicidio a los cinco estudiantes, en tanto que éstos señalan que fueron dos hombres, "con corte tipo militar", quienes los agredieron desde fuera del autobús cuando regresaban del plantón que mantienen en el centro de Tuxtla Gutiérrez.

Ante las versiones contrarias y presuntos intentos de los policías estatales por "sembrarnos pruebas inculpatorias", los acusados pidieron la intervención de la Procuraduría General de la República y de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Debido a la negativa de los alumnos a entregar al Ministerio Público el autobús donde falleció Martínez López, decenas de policías estatales se apostaron a no más de 200 metros de la escuela, apoyados por equipo antimotines y helicópteros que sobrevuelan la zona, en espera de ejecutar una orden de cateo, mientras cortaron al centro educativo el suministro de agua y energía eléctrica.

Los jóvenes presentaron el vehículo ante representantes de los medios de comunicación. En él se observa el orificio dejado por un disparo cuya trayectoria, según las evidencias, provino del exterior y se incrustó en la zona donde estaría el conductor.

Luego de una amplia explicación de cómo sucedieron los hechos, señalaron que "como a las 2 de la mañana, unos compañeros fueron al servicio médico forense para ver el cadáver. En ese momento los detuvieron" y permanecen en los separos de la procuraduría. Ellos son Diego Sánchez, Elías Pomarino, Víctor Alvarez, Miguel Angel Guzmán y Neider Córdoba Domínguez, dos son alumnos de la Escuela Mactumactzá y tres de la Lázaro Cárdenas, del estado de México.

Los jóvenes pidieron la permanencia de la prensa y solicitaron a la procuraduría la presencia de peritos y agentes del MP. Tres horas después llegó el personal, mientras medios de comunicación, peritos y ellos mismos tomaban fotos y videos del interior del autobús.

Mientras los alumnos se oponían a que les tomaran fotografías a ellos y al interior del centro educativo, uno de los funcionarios públicos afirmó haber encontrado una ojiva en el escalón de la entrada del autobús. La recogió como "evidencia".

De inmediato lo acusaron de haber sembrado esta prueba para hacer creer que el disparo provino del interior del vehículo, por lo cual impidieron la continuación de las diligencias y retuvieron a los funcionarios más de dos horas.

Luego de desnudarlos, con objeto de revisarlos "para ver si llevaban otras pruebas para sembrar", los estudiantes permitieron al personal abandonar el centro educativo y señalaron que no les iban a entregar el autobús, "porque es la única prueba que tenemos de que nosotros no disparamos".

Averiguaciones por mover la escena del crimen

Mientras eso sucedía, el procurador Mariano Herrán Salvatti, acompañado por forenses de la dependencia, sostuvo que el señor Joel David Martínez López recibió un impacto de bala, disparada a no más de 10 centímetros, mismo que entró por el costado izquierdo y salió por la tetilla derecha, lo que indicaría que provino del interior del autobús, en el que se presume viajaba parado y no en función de chofer". Herrán acusó a los estudiantes de manifestar "versiones encontradas y contradictorias" en cuanto al lugar donde ocurrieron los hechos.

Señaló que según la necropsia practicada al cadáver de Martínez López, éste se encontraba intoxicado con mariguana y cocaína, y en sus pertenencias se localizaron dos envoltorios de esas drogas. "Estamos solicitando una orden de cateo; podríamos no necesitarla por tratarse de una institución pública, pero queremos que una autoridad avale el cateo al autobús y las demás diligencias que se deben hacer."

En Ocosingo, maestros de la Coordinadora de la Selva, adheridos a la sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, iniciaron movilizaciones en protesta por las acciones emprendidas por las autoridades contra estudiantes de la Normal Rural Mactumatzá.

Según un despacho de la agencia Notimex, el dirigente de la Coordinadora, Enoc Aguilar Santis, dijo: "pedimos que se libere a los 177 (alumnos) arraigados, pues dentro de ellos hay seis compañeros catedráticos de Mactumatzá".

Por otra parte, más de 200 estudiantes de la escuela normal rural de Ayotzinapa, en Guerrero, cerraron durante dos horas las principales calles de Chilpancingo en protesta por el homicidio de Joel Martínez López, suceso que atribuyeron al gobierno federal. De acuerdo con información del corresponsal en Guerrero, el dirigente de la escuela de Ayotzinapa, Marcelo Delgado, dijo que Joel Martínez López, chofer asesinado el jueves en Chiapas, es originario del municipio de Pilcaya, Guerrero.