México D.F. Sábado 9 de agosto de 2003
Las Brigadas Ezzedin Al Qassam prometen vengar
a sus militantes caídos
Mueren cuatro palestinos en una operación de
Israel en Cisjordania
Hay entre ellos dos miembros de Hamas; fallece oficial
del ejército de Tel Aviv en acción punitiva
Por primera vez en siete meses, ataca la milicia chiíta
Hezbollah posiciones de las tropas israelíes
DPA, AFP Y REUTERS
Nablus, 8 de agosto. Cuatro palestinos -entre ellos
dos miembros de Ha-mas- y un soldado israelí murieron este viernes
durante una operación del ejército de Tel Aviv en Cisjordania,
ante lo cual las Brigadas Ezzedin Al Qassam, brazo armado del movimiento
de resistencia, reaccionó airadamente con el anuncio de que vengará
la muerte de sus militantes caídos.
En Líbano, en tanto, la milicia chiíta libanesa
Hezbollah atacó posiciones de las tropas israelíes, por primera
vez en siete meses, en la disputada zona fronteriza de las Granjas de Chebaa.
Las acciones militares contra los palestinos se llevaron
a cabo en el campo de refugiados de Askar, en la ciudad de Nablús,
donde las tropas israelíes ingresaron para detener a los palestinos,
que se encontraban escondidos en un edificio.
Un comando israelí rodeó el edificio para
capturar a dos responsables de Hamas, pero al no conseguirlo los soldados
lanzaron un co-hete antitanque contra la tercera planta, que hizo estallar
los explosivos que se encontraban allí, de acuerdo con el parte
oficial, aunque testigos afirmaron que los mi-litares dinamitaron el inmueble
y arrasaron el lugar con una excavadora antes de retirarse.
Un vocero del ejército indicó que se trató
de una "operación puntual" y afirmó que fueron los palestinos
los primeros en abrir fuego.
Un comandante israelí, que se identificó
como coronel Harel, dijo que la operación en el campo de refugiados
estuvo dirigida a arrestar a dos militantes de alto rango que planeaban
ataques.
Redada de gran envergadura
Además
de los dos activistas de las Brigadas Ezzedin Al Qassam, otro palestino
perdió la vida sofocado por granadas de gases lacrimógenos,
mientras que uno más fue abatido a balazos cuando arrojaba piedras
contra los soldados, indicaron fuentes médicas; otros seis militantes
fueron heridos en la operación.
En los tiroteos también perdió la vida un
oficial israelí, sargento jefe de la unidad de elite de los comandos
de la marina. Se trata de la redada de mayor envergadura lanzada por el
ejército desde el inicio de la tregua anunciada el 29 de junio por
los grupos palestinos.
Las brigadas Ezzedin Al Qassam amenazaron con represalias
e hi-cieron un llamado a todas sus células resistentes para que
"respondan a este crimen" e inflijan "una lección radical" al enemigo.
"El enemigo sionista debe pagar el precio apropiado por
sus crímenes contra nuestro pueblo, como el perpetrado hoy" en Nablús,
señalaron en un comunicado publicado en Gaza, en el que acusaron
al ejército israelí de haber violado decenas de veces la
tregua de Hamas y otros grupos armados.
Uno de los líderes políticos de esa agrupación,
Abdel Aziz al Rantissi, afirmó que "Hamas se ha comprometido siempre
a respetar la tregua, pero ha anunciado en comunicados que las violaciones
no quedarán sin respuesta".
Otro responsable político de Ha-mas en Gaza, Ismail
Abu Chanab, amenazó con romper la tregua: "La operación de
Nablús es una violación flagrante de la tregua por el enemigo
sionista. Para nosotros acaban de franquear la línea roja y no permaneceremos
silenciosos ante una agresión como ésta".
El ministro palestino de Cultura, Ziad Abu Amr, a cargo
de los contactos con los grupos de resistencia, afirmó que las operaciones
de ese tipo podrían llegar a sabotear los esfuerzos de la Autoridad
Na-cional Palestina (ANP) para prolongar la tregua.
Poco antes, el ministro israelí de Defensa, Shaul
Mofaz, advirtió que si la ANP no demuestra antes de finales de septiembre
su determinación de actuar contra los grupos radicales, Israel lo
haría.
Entre tanto, Hezbollah bombardeó por primera vez
en siete meses posiciones del ejército israelí en el sector
de las Granjas de Chebaa, ocupado por Israel y reclamado por Líbano,
a lo que la artillería y la aviación israelíes replicaron
atacando las inmediaciones de poblados y posiciones del movimiento pro
iraní en Líbano sur. En ninguno de los casos hubo víctimas.
Un oficial israelí señaló la gravedad
de la acción de Hezbollah, y afirmó que no habría
podido realizarse sin la aprobación de Siria e Irán, aunque
admitió que pudo ha-ber sido un incidente aislado.
"Es un ataque muy grave" que "refleja la frustración
de Hezbollah y eventualmente de sus respaldos extranjeros" por la disminución
de la violencia de los grupos palestinos, dijo el oficial, según
Afp.
Estados Unidos también criticó a Líbano
y Siria. "Hemos comunicado a Líbano y a Siria nuestra preocupación
por esta escalada calculada y provocadora de Hezbollah", dijo Philip Reeker,
portavoz adjunto del Departamento de Estado.
El comandante de la región militar del norte israelí,
general Benny Gantz, aseguró que sus fuerzas no sufrieron pérdidas
y que los bombardeos causaron daños en un pueblo druso de la meseta
del Golán, que Israel arrebató a Siria en 1967.
Empero, la televisora de Hezbollah, Al Manar, dijo que
cinco soldados israelíes fueron heridos.
El ataque de Hezbollah, cuyos combatientes están
desplegados a lo largo de la frontera entre Líbano e Israel, se
produce a menos de una semana de la muerte de uno de sus líderes
en un atentado en Beirut, del cual fue acusado Tel Aviv.
Preocupación por el muro
Por otro parte, el Comité de De-rechos Humanos
de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que controla el acatamiento
por parte de los gobiernos del Pacto de Derechos Civiles y Políticos,
exigió a Israel que detenga la valla de seguridad que construye
entre su territorio y Cisjordania.
En una resolución adoptada hoy en Ginebra, consignó
que el derecho a la libertad de circulación se halla restringido
en Israel, en particular con la imposición de toques de queda, controles
de carretera y la construcción de la zona de separación mediante
un cerco y un mu-ro que dificultará el acceso a la atención
de la salud y los servicios médicos de emergencia.
El comité invitó a Israel a terminar con
"la vaguedad de las definiciones en la legislación y en las normas
contra el terrorismo", que "parecen contravenir en varios aspectos el principio
de legalidad".
La ONU expresó también su preocupación
por la práctica de ejecuciones selectivas de quienes Israel sospecha
que son terroristas en los territorios reocupados, al tiempo que deploró
el carácter punitivo de la demolición de bienes y casas.
Asimismo, se opuso a utilizar a residentes locales como
escudos voluntarios durante operaciones militares para registrar
viviendas o detener a sospechosos de terrorismo, así como a la llamada
"presión física moderada" para obtener información
considerada crucial para la protección de la vida y la integridad
física.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, también
reiteró que la valla que construye Israel puede dificultar la creación
de un Estado palestino, aunque consideró que es una "reacción
a los días de terror" por los ataques antisraelíes
En otro asunto, la Fundación Australiana por la
Paz de Sydney otorgó su premio anual 2003 a la diputada palestina
y militante de los derechos humanos Hanan Ashrawi, por su compromiso en
favor de los derechos humanos y en el proceso de paz en Medio Oriente,
así como por su valor en la lucha contra la opresión y la
corrupción.
Ashrawi fue portavoz de la delegación palestina
que llevó a cabo las negociaciones de paz con Israel de 1991 a 1993,
y en 1998 fundó Iniciativa Palestina por la Promoción del
Diálogo Global y la De-mocracia. El premio será entregado
en noviembre en Sydney.
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