"Si nos movilizamos" ocurrirá lo que pasó en Seattle hace cuatro años, dice el francés

Posible, boicotear la reunión de la OMC en Cancún, afirma Bové

Insta a que todo mundo salga a la calle; si somos numerosos podemos cambiar las cosas, señala

Opositores a la mundialización discuten en el foro Larzac 2003 formas de protesta ante esa cita

NOTIMEX Y AFP

Paris, 8 de agosto. El líder campesino francés José Bové aseguró que "si nos movilizamos" es posible boicotear la reunión de la Organización Mundial de Comercio (OMC) que se llevará a cabo del 10 al 14 de septiembre en Cancún, como ocurrió hace cuatro años en Seattle.

Miles de militantes altermundistas habían llegado este viernes en la mañana a la meseta de Larzac (sur de Francia), para una gran concentración de tres días de opositores a la mundialización liberal y a las orientaciones de la OMC.

Algunos observadores estimaron que podría llegar a 100 mil el número de activistas. José Bové exhortó a sus seguidores, simpatizantes y público en general a que en septiembre "todo mundo debe salir a la calle (...) si somos numerosos podremos cambiar las cosas", añadió.

José Bové y su colega boliviano, Evo Morales, se encuentran entre las figuras más destacadas del foro antiglobalización Larzac 2003, que inició hoy en la localidad francesa de Aveyron para discutir estrategias de lucha.

El foro, que espera reunir a 100 mil personas, o por lo menos la mitad, en tres días de sesiones discutirá las formas de protesta que realizarán en la próxima cita de la OMC que tendrá lugar en el Caribe mexicano.

"Entre las personas que trabajan en la organización del acontecimiento y los participantes que siguen llegando, hay ya por lo menos entre 15 mil y 20 mil personas", en menos de 24 horas, estimó uno de los responsables.

Más de mil voluntarios instalaban esta mañana los últimos puestos, organizaban la seguridad en los estacionamientos y la eliminación de los desechos.

Otras 300 personas, también voluntarias, entre miembros de protección civil, médicos y socorristas, instalaban los puestos de atención sanitaria en el lugar. El líder de la Confederación Campesina, José Bové, es la figura central de esta manifestación.

En libertad condicional desde hace apenas unos días, después de haber sido encarcelado por destruir plantas genéticamente modificadas, Bové pidió al primer ministro francés Jean-Pierre Raffarin que organice en septiembre "un gran debate sobre la OMC".

En una entrevista a la radio privada francesa Europe 1, Bové dijo desear que se aclarase antes de la cumbre de Cancún (México) la "posición de Francia", así como la de la izquierda sobre la liberalización de los intercambios agrícolas e industriales.

"¿Es que Francia va a continuar sosteniendo la reforma de la política agraria, que es un suicidio para los agricultores europeos y que es una catástrofe para los campesinos de Africa?", inquirió Bové al lanzar el reto a Raffarin.

Bové tiene previsto pedir permiso a la justicia francesa para acudir a la reunión en la ciudad mexicana, en la que está acreditado.

El dirigente habló esta tarde en la manifestación de apertura, consagrada precisamente a la OMC y a la coyuntura de la cumbre de Cancún. Decenas de foros, exposiciones, proyección de documentales y presentaciones de teatro callejero están programados hasta el domingo en la meseta de Larzac, donde se esperan entre 50 mil y 100 mil personas.

El encuentro se abrió con un foro que, bajo el título ¿Qué es la OMC?, la apuesta de Cancún, refirió "cómo el orden económico representado a través de la OMC no duda en utilizar su potencia militar, como en el caso de Irak".

Durante la sesión del sábado, Evo Morales, líder campesino boliviano, ex candidato presidencial y actual diputado, intervendrá en el encuentro La agricultura europea, sacrificada en el altar del liberalismo mundial.

El diputado explicará también cómo en esta última década Bolivia ha visto aumentar las importaciones, ha experimentado un éxodo rural y ha vivido la lucha de los cocaleros para mantener una cultura tradicional.

Este acontecimiento en Larzac tiene un valor altamente simbólico pues marca también el 30 aniversario de una primera manifestación (60 mil personas) destinada a impedir un proyecto del gobierno de la época de expropiar tierras a los campesinos del lugar para ampliar un terreno de maniobras militares.

"No es un azar que estemos hoy en Larzac. Hace 30 años se organizó la primera concentración masiva contra la extensión del campo militar, entonces nadie creía que 103 familias de agricultores podrían vencer al ejército, lo que finalmente sucedió gracias a la solidaridad", destacó Bové.

El movimiento surgido de esa primera manifestación desarrolló importantes vínculos de solidaridad con la lucha contra las dictaduras militares de la época en América Latina, entre otras, y fue uno de los embriones del actual movimiento internacional contra la mundialización neoliberal.