México D.F. Sábado 9 de agosto de 2003
Acepta Bucareli inercias burocráticas;
anuncia evaluación
Cumplir acuerdo para el campo, exigen al gobierno
Más de 3 mil 500 labriegos protestaron en ocho
secretarías
MATILDE PEREZ U.
Líderes del Congreso Agrario Permanente (CAP) aseguraron
que las manifestaciones que realizaron ayer cerca de 3 mil 500 campesinos
en ocho secretarías de Estado, en la ciudad de México, fue
un llamado de atención al gobierno federal para que cumpla con los
282 compromisos del Acuerdo Nacional para el Campo (ANC), que contempla
el establecimiento de reglas de operación de los programas y la
entrega de los recursos comprometidos para el sector rural, además
de la evaluación del capítulo agropecuario del Tratado de
Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Al término de la jornada, que se inició
muy temprano en la Alameda del Sur, donde se rindió un homenaje
a Emiliano Zapata por el 124 aniversario de su natalicio, y culminó
ya entrada la noche en la Secretaría de Gobernación, el gobierno
federal, en voz del subsecretario Gonzalo Altamirano Dimas, reconoció
que sí hay inercias burocráticas en el campo y grandes rezagos
que no pueden resolverse a tres meses de la firma del ANC.
Informó que organizaciones y autoridades convinieron
en seguir realizando una evaluación puntual de los compromisos signados
en abril pasado, y a la fecha "no podemos hablar de triunfalismos ni de
descalificaciones, hay que poner todo en su justa dimensión".
A
su vez, el coordinador en turno del CAP y dirigente de la Central Campesina
Cardenista (CCC), Max Correa, reconoció la voluntad política
gubernamental para avanzar en el ANC y consideró loable que éste
acepte que hay inercias y conductas que frenan el acuerdo, como demandan
las organizaciones. Aseguró que si bien hay diálogo abierto
y que en los últimos días el gobierno dio señales
de que quiere avanzar, eso no significa que "renunciemos a las movilizaciones
ni a las protestas; esta fue sólo la primera jornada, la segunda
la realizaremos del 8 al 10 de septiembre".
Hasta antes del compromiso en Gobernación, los
líderes agrarios sólo tenían la promesa de que a partir
de mañana y en la siguiente semana volverían a ser recibidos
en las secretarías para entregarles la información solicitada.
Alvaro López Ríos, dirigente de la Unión
Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), comentó que las
organizaciones del CAP accedieron a flexibilizar sus posturas, y además
no se logró la unidad esperada para realizar las protestas en bloque.
"El gobierno logró cabildear e inmovilizar a la Confederación
Nacional Campesina (CNC) con la ronda de encuentros que sostuvo la dirigencia
con diversos secretarios de Estado, el pasado miércoles y jueves.
El Barzón decidió concentrarse en la preparación de
su convención nacional, y en las organizaciones del CAP no hubo
un mensaje preciso hacia sus integrantes para llevar a cabo la toma
de las sedes estatales de las secretarías y de los distritos
de desarrollo rural".
López Ríos adelantó que la jornada
de movilizaciones sería poco articulada. Pero también advirtió
que la actitud torpe y mentirosa del gobierno federal "exacerba los ánimos
de los campesinos, quienes podrían sumarse a la nueva postura del
EZLN y del movimiento indígena. Este es un último llamado
a las autoridades federales y un emplazamiento de mayor exigencia al gobierno
para que cumpla con el acuerdo y rectifique la política para el
campo".
En las movilizaciones sólo participaron contingentes
de la Central Campesina Cardenista (CCC), Unión Campesina Democrática
(UCD) y Confederación Agrarista de México (CAM), pero a las
mesas de negociación acudieron integrantes de Central Campesina
Independiente (CCI), UNTA, Central Independiente de Obreros Agrícolas
y Campesinos (CIOAC), Unión General Obrero Campesina Popular (UGOCP)
y Consejo Nacional de Sociedad y Unidades de Campesninos y Colonos (Consucc).
En esas mesas para continuar la gestión, seguimiento y evaluación
del ANC no participaron las organizaciones que conforman el movimiento
El campo no aguanta más.
Sin consignas y en silencio, los pequeños grupos
de campesinos -la mayoría de la CCC, UCD y CAM- se manifestaron
en las instalaciones de las secretarías de Economía, Desarrollo
Social, Salud, Medio Ambiente y Recursos Naturales; los contingentes más
numerosos se concentraron en Reforma Agraria, Hacienda y Agricultura; a
ésta llegaron, al mediodía, cerca de 800 personas en 19 autobuses
y bloquearon el tramo de la avenida Municipio Libre, ubicado entre las
avenidas Cuauhtémoc y Universidad, donde permanecieron hasta que
concluyo la negociación en la Secretaría de Gobernación.
En ese sitio, algunos de los campesinos golpearon al conductor
del automóvil con placas 531-MAA por no retroceder en el momento
que cerraban el tramo de Municipio Libre; durante varios minutos el hombre
trató de eludir dentro de su automóvil la furia de los manifestantes,
quienes, ante la presencia de la policía, dejaron que el conductor
continuara su camino.
En los módulos de la SRA -localizada en la colonia
Presidentes Ejidales- integrantes de la CAM derribaron una puerta de alambrado
de acceso al área de estacionamiento, mientras que dirigentes de
la Coduc, UGOCP, Consucc, UNTA y de CCC se reunían con el subsecretario
de Política Sectorial, Armando Ríos Piter.
Ignacio Irys Salomón, dirigente de la Coduc, comentó
que mañana los líderes de las organizaciones del CAP se reunirán
nuevamente con Ríos Piter para recibir información del monto
de los recursos ejercidos para la compra de tierras y si el techo financiero
de la SRA es suficiente para responder a los compromisos adquiridos en
el Acuerdo Nacional para el Campo.
Afuera de la Sagarpa, los campesinos esperaban que se
respondiera a las exigencias que presentaran sus dirigentes, entre ellos
Luis López Alvarez, coordinador del CAP en la Comarca Lagunera,
quien llevó la consigna de exigir un plan emergente de empleo para
esa región ubicada entre Coahuila y Durango. "Son 37 mil ejidatarios
que desde 1992 padecen por la sequía, la reducción de los
apoyos de Procampo y de la entrega de agua. Todos tenemos que entender
que el campo es un mal necesario, y que si no hay producción de
alimentos ni trabajo en el campo, los riesgos sociales aumentan". dijo.
En la Secretaría de Economía la negociación
fue de fast track, apenas 15 minutos, ya que los planteamientos
de evaluación del TLCAN y sacar al maíz blanco y frijol de
ese acuerdo tuvieron como respuesta: "los recibiremos la próxima
semana".
En Desarrollo Social, el subsecretario de Desarrollo Social
y Humano, Antonio Sánchez Ríos de Rivera, aseguró
que hay avances en las negociaciones.
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