México D.F. Miércoles 23 de julio de 2003
Critican al ejército israelí
Pide Arafat enviar observadores para supervisar la paz
DPA, AFP, REUTERS Y PL
Beirut, 22 de julio. El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, pidió hoy el envío de observadores internacionales que supervisen la puesta en marcha del plan de paz para poner fin al conflicto israelí-palestino, dijo la voz de Líbano.
Sólo el cuarteto de paz, integrado por Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y la Organización de Naciones Unidas (ONU), pueden contribuir al cumplimiento del mapa de ruta, dijo Arafat, quien puso de manifiesto la urgente necesidad de solucionar el diferendo entre ambos pueblos.
Por su parte, el líder del opositor Partido Laborista israelí, Shimon Peres, sugirió que Jerusalén sea una "capital mundial" bajo la autoridad de la ONU, cuyo secretario general, Kofi Annan, fungiría como alcalde, para poner fin al conflicto.
El plan pasaría por declarar área santa los sitios sagrados de judíos, cristianos y mu-sulmanes ubicados en la vieja Jerusalén, ciudad que ambas partes consideran su capital.
En tanto, Israel aceptó liberar a 450 palestinos en lugar de los 350 previstos inicialmente, informó este martes la televisión estatal israelí, que citó fuentes de seguridad.
El anuncio se hizo mientras analizaban el asunto, en la franja de Gaza, el ministro de la ANP encargado de los prisioneros, Hi-cham Abdel Razeq, y el jefe del Shin Beth, el servicio israelí de seguridad interior, Avi Dichter, que concluyó sin acuerdo debido a que Tel Aviv se negó a discutir la lista de los posibles liberados, dijo Razeq.
Por su parte, el ministro de Interior israelí, Avraham Poraz, anunció la supresión de las ventajas económicas a las colonias ju-días de Cisjordania y la franja de Gaza.
Lo anterior, mientras el primer ministro palestino, Mahmoud Abbas, llegaba a Jordania, donde se entrevistará con dirigentes de ese país antes de viajar a Washington para reunirse con George W. Bush.
Política de eliminación selectiva
En otro asunto, la Asociación para la De-fensa de los Derechos Cívicos en Israel criticó en su informe anual la actuación del ejército israelí frente a los palestinos.
El texto denunció el gran número de civiles muertos como resultado de la política de eliminación selectiva de activistas palestinos llevada a cabo por Ariel Sharon: "La mayoría de los casos de muerte nunca son objeto de una investigación, y los pocos que lo son raramente tienen como resultado acusaciones formales".
También destacó un alarmante deterioro de la situación de los derechos humanos en Israel y criticó las medidas de austeridad económica adoptadas por el gobierno.
La policía de fronteras israelí, por otra parte, mató a un árabe-israelí al confundirlo con un "terrorista" palestino cerca de la localidad de Taibeh.
La víctima, que conducía un vehículo sospechoso en el que se suponía que viajaban militantes palestinos que iban a cometer un atentado, ignoró las señales de los guardias fronterizos para que se detuviera.
En tanto, dos israelíes resultaron heridos en el norte de Israel tras disparos de la defensa antiaérea del Hezbollah desde el sur de Líbano, que alcanzó la localidad fronteriza de Shlomi.
En Beirut, el grupo chiíta reivindicó los disparos al afirmar que su milicia lanzó dos ráfagas contra aviones israelíes que sobrevolaban la zona.
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