México D.F. Viernes 18 de julio de 2003
Resurge la amenaza de huelga en la armadora
Complicaciones en las pláticas para evitar el
recorte en VW
FABIOLA MARTINEZ
El quinto día de negociaciones entre trabajadores
y directivos de la empresa Volkswagen (VW) de México concluyó
sin acuerdos, con "posiciones muy distintas y complicaciones".
El dirigente de los 10 mil 200 trabajadores sindicalizados
de VW, José Luis Rodríguez, dejó en claro que el gremio
"rechaza categóricamente" que la reducción en el índice
de producción corresponda al pretendido despido de 2 mil 20 obreros
de la planta ubicada en Puebla.
"Nosotros
de ninguna manera estamos aceptando el número. Inclusive, si estamos
aquí es para defender todos los puestos de trabajo, que no se pierda
ninguno. En definitiva el número (de despidos) es muy cuestionable",
señaló el líder sindical en un receso de la negociación.
Precisó además que el plan de la compañía
es reducir la producción del modelo Jetta (de 800 a 600 unidades
diarias); el New Beetle Limousine de 270 a 163 y el NB Cabrio se conservaría
en 310 unidades, es decir, el índice se desplomaría de mil
400 a mil 72 unidades al día.
Entrevistado anoche en la Secretaría del Trabajo
y Previsión Social, donde se realiza la negociación desde
el viernes pasado, Rodríguez aseveró que no hay visos de
solución, por lo menos en las próximas horas, toda vez que
la representación de la empresa, encabezada por Eduardo Sotomayor,
director de Relaciones Laborales, no ha presentado los detalles técnicos
del eventual convenio.
Por su parte, el abogado del sindicato, Héctor
Barba, aclaró que el eventual arreglo sería un "convenio
transitorio" que no afectaría en ninguna de sus cláusulas
al contrato colectivo de trabajo vigente.
El 30 de junio pasado, la trasnacional alemana anunció
un drástico recorte de 2 mil 20 trabajadores (20 por ciento de la
nómina), como alternativa para enfrentar una reducción de
mil 400 a mil 72 unidades diarias. La empresa aplicará esta medida
en el esquema de producción a partir de la primera semana de agosto.
De inmediato, el sindicato advirtió que no permitirá
la liquidación de ninguno de sus afiliados y, en cambio, propuso
disminuir la jornada laboral (en un esquema de cuatro días laborados
por tres de descanso) y en consecuencia bajar salarios, los cuales se ubican,
en promedio, en 3 mil pesos mensuales.
Ayer, en el quinto día de negociación, el
sindicato reconoció que no había ningún acuerdo hasta
el momento "porque ellos quieren asegurar, en principio, los aspectos técnicos
(reducción de jornada) y posteriormente los temas económicos",
relativos al sueldo de los obreros.
Las horas de conversación redundaron en ese tema
porque la representación obrera advirtió que no habrá
arreglo en tanto no se hable del costo económico que podría
asumir la compañía. Ante el nulo avance, la comisión
de trabajadores reiteró que no descarta la posibilidad de encabezar
una huelga como "último camino" para defender sus fuentes de empleo.
No obstante, las pláticas continuarán hoy
por la mañana en el auditorio de la Secretaría del Trabajo.
|