Otro barco secuestrado con unos 27 pasajeros está en aguas de Bahamas

Tres muertos y un niño herido en un asalto a embarcación en Cuba

Autoridades de La Habana culpan a la Ley de Ajuste Cubano de la ola de incidentes

GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL

La Habana, 15 de julio. Tres meses después de que tres cubanos fueron fusilados por secuestrar una lancha para emigrar a Estados Unidos, otros dos asaltos a embarcaciones desembocaron en los pasados dos días en la muerte de tres personas en circunstancias no esclarecidas, heridas graves a un niño de 10 años y la salida de otra nave con unos 27 pasajeros a bordo, que esta mañana estaba en aguas de Bahamas, indicaron hoy informes oficiales.

En el primer caso, ocurrido el lunes en el puerto de La Coloma, en la provincia occidental de Pinar del Río, tres hombres murieron, uno de ellos por un disparo en la cabeza, según los reportes.

En el mismo episodio, el menor herido, su hermano de 17 años y su madre, lograron salir de la nave. El menor está en el hospital provincial de Pinar del Río, con una bala alojada en la parte trasera izquierda del cráneo, entre la oreja y la cervical, con parálisis facial, pero con capacidad para comer, conversar y esperanzas de salvar la vida, indicó la información.

El segundo caso ocurrió la madrugada del martes en la localidad de Boca de Nuevitas, provincia centro-oriental de Camagüey, donde fue secuestrada una embarcación de la empresa militar de cartografía GeoCuba, que después de una travesía de casi ocho horas, en la que fue vigilada por mar y aire por efectivos cubanos, entró a jurisdicción bahamense.

Los dos comunicados que ofrecen sendas versiones oficiales están suscritos por el Ministerio del Interior, cuyo titular es el general Abelardo Colomé Ibarra.

Ambas declaraciones culparon de los hechos a la Ley de Ajuste Cubano, de 1966, por la cual los nacionales de la isla tienen el privilegio de recibir la residencia en Estados Unidos, si llegan a territorio de ese país por cualquier vía, inclusive ilegal y violenta.

El segundo comunicado pidió, además, que Bahamas o eventualmente Estados Unidos devuelvan la nave secuestrada y a sus ocupantes. No estaba claro si todos eran asaltantes o había rehenes. Tampoco se precisó si había armas a bordo.

El pasado 11 de abril, tras juicios sumarios, fueron fusilados Lorenzo Enrique Copello Castillo, de 32 años; Bárbaro Leodán Sevilla García, de 22, y Jorge Luis Martínez Isaac, de 40, hallados culpables del secuestro de una lancha de pasajeros para emigrar a Estados Unidos y condenados bajo la Ley contra Actos de Terrorismo.

Frente a las protestas internacionales por la ejecución sumaria, el gobierno cubano argumentó que esa era una medida disuasoria, para cortar de golpe una cadena de secuestros que podrían desembocar en una crisis migratoria y ofrecer un pretexto para un conflicto militar con Estados Unidos.

Los tres muertos de Pinar del Río son Francisco Lamas Carón, de 29 años; Luis Alberto Suárez Acosta, de 22, y Yosvani Martínez Acosta, de 27.

El perfil de sus edades coincide con el del grupo que asaltó la lancha en abril. En esa ocasión, de 11 asaltantes, sólo tres eran mayores de 30 años y entre ellos había una muchacha de 16.

Pinar del Río

Sobre el primer caso conocido hoy, el Ministerio del Interior dijo que se inició cerca de las nueve de la mañana del lunes, cuando tres hombres que intentaba viajar a Estados Unidos, armados con un revólver calibre .45 y un cuchillo, acompañados de la mujer y los dos menores, asaltaron el pesquero que estaba en un muelle, para lo cual redujeron al custodio, que resultó herido con el cuchillo y le fue arrebatada su pistola calibre .38.

La nave Ferrocemento No. 18, preparada para salir a faena, fue ocupada por los asaltantes que, al desconocer su manejo, obligaron a un patrón a ponerla en marcha. Pero el pescador aprovechó un momento de confusión y pudo escapar lanzándose al agua, indicó la versión. Agregó que frente a la situación anormal, el barco fue rodeado por trabajadores del puerto y agentes de seguridad para impedirle la salida.

"Los asaltantes amenazaban con matar a los rehenes", señaló el comunicado, pero no explicó a quién se lo hicieron saber ni bajo qué condiciones. El mismo texto puntualizó que la mujer en realidad era cómplice de los secuestradores y llevó a sus hijos fingiéndose víctima de la situación.

La declaración del Ministerio del Interior afirmó: "Se ignora todavía en detalles cuáles fueron las causas o qué tipo de desavenencias surgieron entre los asaltantes, que originaron lo que se produjo después".

Ese posterior suceso ocurrió, según el propio informe, cerca de una hora después del asalto, es decir, alrededor de las 10 de la mañana del lunes: "Se produce un disparo aislado en el interior de la embarcación, y pocos minutos más tarde se escuchan varios disparos intermitentes.

"Finalizado esto, casi de inmediato se observa al joven de 17 años que sale corriendo de la nave con el hermanito de 10 años en brazos, que estaba gravemente herido en la cabeza. Con ellos corría también la madre", señaló el ministerio. "Los tres fueron transportados de inmediato al hospital provincial de Pinar del Río en una ambulancia, sin perder un minuto en indagar lo sucedido en la embarcación".

No quedó claro qué había ocurrido con los pescadores y agentes de seguridad que habían rodeado el barco y si tuvieron alguna interacción con los secuestradores.

Según el informe, una hora más tarde, es decir, hacia las 11 de la mañana, no había ruido alguno procedente del barco, "lo cual decidió a las autoridades a realizar una cautelosa exploración. Al acercarse a la misma y entrar, encontraron a tres hombres que yacían inmóviles, dos de ellos habían muerto y el otro estaba inconsciente, herido por un disparo en la cabeza, y fue trasladado al hospital".

Según el mayor de los hermanos, citado por el Ministerio del Interior, el primer disparo fue hecho por los secuestradores contra el niño de 10 años; luego intentaron disparar al adolescente, pero la pistola se amartilló. De acuerdo con esa misma declaración referida en el comunicado, "minutos después tuvo lugar un tiroteo entre los propios secuestradores".

El informe oficial indicó que la mujer no había rendido declaración hasta hoy, que el hombre hallado inconsciente murió poco antes del amanecer del martes y que el caso "continúa siendo investigado en todos sus detalles". El documento no precisó cuántos disparos se hicieron ni de qué calibres, ni cómo pudo producirse el desenlace.

Los tres asaltantes tenían abundantes antecedentes penales, según el informe. Lamas Carón estuvo encarcelado dos años y ocho meses, en dos ocasiones, por robo con violencia. Suárez Acosta purgó dos condenas de más de un año y ocho meses por hurto y sacrificio de ganado mayor, y Martínez Acosta salió en abril pasado de la cárcel, tras cumplir cuatro años y 10 meses de reclusión por hurto y sacrificio de ganado mayor. Los tres también afrontaron otros procesos y acusaciones diversas.

Camagüey

El segundo caso se inició a las 3:50 de este martes, dijo otro comunicado. Las autoridades cubanas lo reportaron como secuestro al Servicio de Guardacostas de Estados Unidos. La nave capturada fue seguida por un avión militar cubano y una lancha patrullera.

De acuerdo con el informe, la tripulación de la lancha dijo que observó a siete hombres en cubierta y a una veintena de personas más adentro de la embarcación. A las 8:50 la Guardia Costera estadunidense avisó que enviaría un rastreo naval y aéreo, pero a las 10:30 rectificó para indicar que siendo una nave de bandera cubana cruzando un "paso inocente" (Canal de las Bahamas), Estados Unidos se abstendría de actuar y dejaba la decisión al gobierno de Cuba. Desde La Habana respondieron que sólo se daría seguimiento a la embarcación.

A las 11:30 el barco secuestrado entró en aguas jurisdiccionales de Bahamas, con lo cual cesó el seguimiento cubano y así se lo informaron a los guardacostas estadunidenses, agregó el comunicado. Indicó que también fueron notificadas del caso las autoridades bahamenses.